La nueva entrega de WWE toma los mejores elementos de las ediciones anteriores y con ciertos agregados marca una nueva evolución en la franquicia.
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Un año más que llega y un nuevo peldaño evolutivo para la saga WWE 2K que prueba una vez más que está a una gran distancia de sus competidores más cercanos en el género. WWE 2K24 tal vez no demuestre a simple vista las mejoras que tiene con respecto a su predecesor, pero basta pasar apenas unos minutos con él para entender todos los pequeños detalles que se han ido sumando a la entrega más actual de la franquicia.
Esta edición viene en un marco especial, y no solo por la celebración de los 40 años de Wrestlemania sino por la terrible polémica en la que el ex CEO de la empresa, Vince McMahon, se encuentra involucrado, un problema en el que también se ha visto afectado uno de los luchadores más famosos de la promoción, Brock Lesnar, que incluso no aparece en la edición final de la tapa de la edición legendaria cuando sí lo hacía inicialmente.
A pesar de ese contexto de la realidad, el juego logra concentrarse en su propio mundo, con resultados realmente increíbles que demuestran que el producto sigue creciendo en calidad. Pero no tienes que creerme con solo estas palabras, mejor déjame contarte de qué está hecho este WWE 2K24 a lo largo de este análisis.
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Apartado técnico
Con tan solo ver las primeras pantallas del título ya sabemos que la producción gráfica ha estado dedicada al máximo, no menos que en las últimas dos ediciones anteriores. Todas las superestrellas tienen un parecido absoluto con su contraparte real, desde el vestuario hasta el peinado y los tatuajes incluso en las distintas versiones que corresponden a años pasados. ¿Hay cosas que mejorar en este aspecto? Sí, claro, como digo en cada análisis desde hace años, la fluidez del cabello parece fuera de lugar y esto presenta una dualidad ya que quizás este detalle tan puntilloso no se apreciaría si el resto del modelado de cada una de las figuras no fuera tan bueno. Eso sí, algunos luchadores de no tanto renombre no han tenido tanto trabajo y esto se aprecia más que nada en algunas texturas que parecen faltar, pero como digo, esto es hilar fino y solamente algo para comentar sobre la superficie, en líneas generales, el apartado gráfico es nada menos que estupendo.
Los amantes de la fotografía digital estarán encantados de saber que el modo foto a través de Highlight Reels (que también permite capturar video de forma muy sencilla) está de regreso para tomar muchas impresiones digitales desde nuevos ángulos.
De hecho, tal es el nivel de mimo puesto en la estética que hasta los referees se parecen a sus contrapartes reales que podemos ver en TV, y aunque esto no era para nada necesario, muestra el nivel de cuidado de los desarrolladores en cada pequeña cosa.
Otra de las cosas que me sigue sorprendiendo año tras año es la banda sonora que ostenta el juego, no solo por la inclusión de la música de todas las entradas de los luchadores, sino por la amplia variedad de canciones que se pueden escuchar al momento de navegar por los menús, que abarca un amplio espectro que va desde el country y pasa por el rap, el pop, el new metal y hasta el hard rock en ocasiones. Una mezcla sin desperdicio que también se puede disfrutar desde la opción de jukebox del juego.
En consonancia con lo anterior aparecen los efectos sonoros que no le pierden pista al gran trabajo del resto de este apartado, con especial destaque de los comentaristas que nunca se sienten distantes de la acción en pantalla y parece que estuvieran narrando en vivo lo que está ocurriendo de manera magistral. El resto de los efectos de sonido como los impactos de los golpes, de las armas, las caídas en el cuadrilátero y fuera de él se sienten tan espectaculares como siempre.
Realicé el análisis en una Xbox Series y el juego nunca bajó la cantidad de cuadros por segundo, ni siquiera en las partidas con más de 8 luchadores simultáneos, una optimización que también es palpable en los casi inexistentes tiempos de carga que presenta el juego entre menús y en las instancias previas a los combates.
Jugabilidad
Me es difícil determinar cuál es el modo estrella del juego por lo que iré repasándolos todos y dejaré que seas tu quien decida. Las novedades empiezan con el modo Showcase que deja, esta vez, de repasar carreras individuales como en las ediciones anteriores que habíamos visto los ascensos del Rey Misterio y John Cena y en cambio se centra en los 40 años de Wrestlemania haciéndonos revivir luchas icónicas dentro de las cuatro décadas del evento.
Sin duda, en este punto no serán pocas las personas que estén en desacuerdo con la selección que se utilizó, quizás repitiendo muchas veces a Hulk Hogan y omitiendo algunas batallas épicas como Savage vs. Flair en el Wrestlemania 8, pero lo cierto es que están bien seleccionadas y principalmente muy bien presentadas por Corey Graves, más allá de que las personas tendrán sus favoritas y sería imposible incluirlas todas, principalmente por inconvenientes de licenciamiento. De cualquier manera, en lo que a jugabilidad refiere, el modo está intacto y nos llevará a combinar, en 20 encuentros diferentes que recorren los 40 años de historia, distintos ataques en algunos momentos para combinarlos con videos de la filmación real de la época.
A nivel mecánicas la incorporación más notable es la del Super Finisher, que como su nombre indica, permite realizar versiones más poderosas del movimiento tradicional y consumen tres barras de energía. La diferencia principal es que el rival no tiene posibilidad de contrarrestar el movimiento de forma alguna, lo que le da cierto valor estratégico.
Dentro de lo nuevo también aparece una amplia variedad de armas renovadas que ahora se pueden encontrar debajo del ring y que no estaban disponibles en las ediciones anteriores.
También se suma al coctel de movimientos un minijuego en el que las estrellas intercambian golpes en el que el jugador tendrá que llenar hasta un punto específico el cargador sin sobrepasarse. Aún habiendo jugado muchas horas al título, desconozco si hay algo que hace que aparezca esta instancia o si es al azar, pero lo cierto es que es bastante poco frecuente y no está mal que así sea.
En lo que respecta a la variedad de los encuentros, tendremos las mismas opciones que en las dos últimas ediciones y la incorporación de algunas novedades muy interesantes como la “special referee match” en la que deberemos ponernos en el rol del juez del encuentro e impartir justicia de la forma que nos parezca. De esta forma podremos realizar los conteos, descalificar, etc. Eso sí cualquier acto sospechoso debe ser medido, si no otro juez nos reemplazará en la tarea.
Luego también se suman las luchas de ambulancias y ataúdes que básicamente funcionan con el mismo principio, que es el de forzar al rival a entrar a uno u otro por la fuerza con el mismo tipo de minijuego que aparece cuando se quiere someter al rival y que consiste en presionar un botón que rota constantemente. Adicionalmente tendremos también tres tipos de “gauntlet matches” para disfrutar de estilos battle royale o de supervivencia.
MyRise, el modo historia del título, llega con dos historias diferentes, Unleashed y Undisputed, el primero sigue más o menos los pasos de “The Lock” de WWE 2K23 y el segundo es un drama de los típicos de la WWE que tiene comop protagonista a Roman Reigns que siempre será mi ídolo personal por haber conquistado el corazón de Becky Lynch en la vida real.
Universe Mode y MyGM están pensados para los que quieren tomar las riendas de lo que sería una promoción de la WWE y este año incluyen varias novedades en materia de incorporaciones y negocios que se pueden ir realizando entre marcas, más allá del modo historia, creo que aquí es donde la mayoría de los jugadores pasará la mayor cantidad de tiempo y tal vez en MyFaction (el FUT de WWE), que el año pasado recibió muchísimas críticas debido a los precios de las cartas y que este año recibió buenas mejoras con distintos modos que permiten ganar dinero, experiencia o cartas para mejorar los mazos.
El apartado multijugador estuvo muy vivo a pesar de que solo pude probarlo un día ya que el juego lo vengo analizando desde antes de su lanzamiento.
Y si eres un principiante en la saga, tampoco te desesperes porque tendrás un modo de entrenamiento guiado que repasa desde las funciones más básicas hasta los movimientos más complejos.
Duración
Los fans del wrestling pueden disfrutar de este juego por muchísimas horas en cada uno de sus modos, y la constante incorporación de desafíos a realizar en los modos online para un jugador también permiten ampliar la cantidad de horas para disfrutar de esta entrega, al menos, hasta que llegue WWE 2K25.
Conclusión
Estamos ante una nueva entrega que sigue sin dormirse en los laureles conseguidos por las anteriores y sigue sumando detalles que hacen felices a los fans. Puede que si no eres un fan acérrimo de la disciplina y tienes WWE 2K23 en tu poder no quieras cambiar inmediato por esta nueva versión dadas las sutiles novedades, al menos hasta que baje de precio, pero si, por el contrario, eres un apasionado de la WWE, te diría que no lo dudes y lo compres ya mismo, solo el roster impresionante que tiene, aún sin los DLCs ya hace que valga la pena el gasto.
A mí me ha encantado y creo que consiguieron una entrega muy digna del aniversario número 40 de la saga, espero ahora por la próxima edición para ver con qué consiguen sorprenderme en esa nueva ocasión. Mientras tanto, nos vemos en el ring.
Agradecemos a 2K el material con el que se realizó el análisis.
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Apartado técnico85/100
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Jugabilidad90/100
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Duración90/100
Lo bueno
- Las nuevas incorporaciones son sutiles pero se disfrutan mucho
- El apartado técnico es brillante
- Poder pegarle a Bad Bunny
- El roster es demencial
Lo malo
- Los cabellos aún no están del todo pulidos
- Las texturas de algunos luchadores no están tan trabajadas