Bleed 2 es un divertidísimo run and gun, en el que nos meteremos en la piel (y el pelo) de Wryn, una muchacha valiente, decidida a acabar con la nueva amenaza que está aterrorizando la ciudad.
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¿Como empezar un análisis de un juego del que no esperabas nada y que al final te ha dado tanto? Bleed 2 lo ha conseguido, y aunque parezca mentira hemos pasado de pensar en un indie más de disparos a un tremendo indie de disparos. Puede que esto ahora mismo no os diga nada, pero si seguís leyendo descubriréis el porqué de estas frases.
Como os podéis imaginar por el nombre, Bleed 2 es la secuela de un juego lanzado hace únicamente medio año en Xbox One, sin embargo, eso no significa que sea este un caso como el Five Nights at Freddy’s ya que el primer Bleed salió en PC hace ya nada menos que 5 años.
La historia de Bleed 2 no puede ser más sencilla, nuestra protagonista Wryn esta tomándose su merecido descanso después de salvar la tierra echando unas partidas a la consola, pero algo ocurre que interrumpe su partida: de repente la ciudad está siendo atacada por una nave espacial que aterroriza a la gente. Decidida (y cabreada por dejarla sin su partida de rigor) recoge sus armas y se lanza de nuevo a destruir esta nueva amenaza.
Apartado Técnico
Como vemos en las capturas, Bleed 2 goza de un diseño 2D que, aunque a primera vista parece simple, oculta más detalles gráficos que los que aparenta. El juego se mueve a gran velocidad y en ningún momento notamos bajadas de frames pese a tener la pantalla llena de los disparos enemigos, los cuales son muy variados, entre los que encontramos desde distintos tipos de robots a gatos sin patas con una bandana en la frente, eso sin mencionar a los jefes finales, que todos tienen un diseño espectacular.
En cuanto al apartado sonoro no hay mucho que añadir, sonidos guitarreros y tremendamente frenéticos que distan mucho de los Chiptunes de los que hacía gala su primera parte. Los personajes por su parte no tienen voces, mas allá de los gritos y risas de cada uno.
Jugabilidad
Donde realmente atrapa el juego y a la vez desespera es en este apartado, en Bleed 2 nos encontramos con un run and gun de la vieja escuela, que no te da ni un minuto de respiro a excepción de las secuencias entre fases.
El juego se divide en 6 niveles mas el epílogo, en los cuales nos esperan un buen número de enemigos, jefes de mitad de nivel y los clásicos bosses finales entre los que encontraremos bestias mecánicas, ninjas o seres con poderes psíquicos, los cuales para derrotarlos deberemos hacer uso de toda nuestra habilidad como jugadores. Pero ¿con que contamos para esto? Con una metralleta + espada para devolver los disparos, un salto triple que además nos permite volar un poco por el escenario y el poder de ralentizar el tiempo.
Lo que queda muy claro es que Bleed 2 apuesta por una jugabilidad directa y sin tonterías, amoldando los controles al formato más cómodo posible, aunque en este caso hay que dar un toque de atención sobre ello y es que estos no resultan del todo cómodos durante buena parte del juego ya que para saltar se usa por defecto el gatillo RT, mientras que el joystick derecho lo usamos para disparar, el botón LT lo usamos para ralentizar el tiempo unos 5 segundos, tiempo más que suficiente para poder esquivar o devolver los disparos con RB (si tenemos la combinación pistola-espada). El botón A lo usaremos para hacer una especie de provocación que la usaremos poco o nada durante el juego.
Cuando hablamos de incomodidad, nos referimos sobre todo al botón de salto, y es que, aunque parezca simple el cambiar la ubicación del comando, cuando estamos enfrascados en la batalla tened por seguro que vuestra cabeza inconscientemente pensará que el gatillo derecho es para disparar y no para hacer la acción del salto que es para la que está asignado. Aunque afortunadamente al rato nos acostumbramos, y lo que es más, entendemos la decisión, ya que ponerla en otro botón haría que dejáramos de disparar con lo que el juego se complicaría inútilmente ademas de una perdida de ritmo en la acción.
Otra de las cosas que hemos nombrado es el botón RB, en Bleed 2 es absolutamente necesario el poder devolver los ataques enemigos… siempre y cuando correspondan con nuestro color de personaje, así por ejemplo Wryn representa al color rosa, y solo podrá devolver los ataques de dicho color -como los parrys de Cuphead-, cuando hagamos esto una barra situada en la parte superior derecha que se irá rellenando con nuestras acciones y bajando si nos impacta un enemigo, al final de cada nivel se nos contará si hemos sido ágiles esquivando, rápidos terminando el nivel y la puntuación obtenida en nuestra barra.
Duración
El modo historia no es muy largo, tan solo dura unos 45 minutos, eso sí, tremendamente intensos, tendremos 4 niveles de dificultad, en el que lo único que varía básicamente es la velocidad de disparo del enemigo, su daño y el daño que hacemos nosotros. Además de eso el juego cuenta con otros modos de juego como son:
- Arcade: Jugaremos el modo historia, pero solo contaremos con una vida, asi que tendremos que afinar lo máximo posible y sacar nuestro lado más habilidoso.
- Modo infinito: En este interesante modo, elegiremos con quien queremos jugar (si lo hemos desbloqueado) y deberemos sortear el mayor número posible de niveles posibles en unos mapas que se generan aleatoriamente.
- Modo desafío: El clásico Boss Rush en el que nosotros podemos elegir a enfrentarnos a los jefes que queramos hasta un máximo de tres en un mismo enfrentamiento.
Si a eso le sumamos que podemos jugar con un amigo y lo tremendamente divertido que es el juego, creednos si os decimos que tenéis juego para un buen tiempo y os garantizamos que no os aburriréis lo más mínimo.
Conclusión
Bleed 2 más que un juego es un recordatorio, uno de esos títulos en los que si solo lo ves desde fuera parece que es uno más, solo cuando tomas control de él es cuando descubres lo divertido que resulta, solo nos queda animaros que lo juguéis, porque de verdad que los vais a disfrutar muchísimo y pese a su caótico control en los primeros compases de juego, os garantizamos que os va a divertir muchísimo y por 15€ (ahora está en 13,49€), pese a que el juego está medianamente traducido al español (solamente los menús) merece la pena cada euro gastado en él, un trabajo bestial del señor Ian Campbell, por el cual solo podemos quitarnos el sombrero.
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*Gracias a Digerati Distribution por habernos proporcionado el material para la review.