Después de paralizar una de sus características, Rare se ha visto obligada a desactivar todas las nuevas features del último parche.
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Actualización
Noticia Original
Microsoft ha puesto tanta confianza en Rare, que desde el principio les ha permitido aplicar parches y cambios en Sea of Thieves sin pasar por el proceso de certificación interno de Microsoft. Puede que esto empiece a correr peligro si casos como el que os contamos hoy se repiten. Ayer Rare lanzó el séptimo parche para el juego de piratas, con la muy acariciada característica de tener tripulaciones privadas, junto con más novedades. Lamentablemente el parche comenzó a provocar problemas de latencia que provocaron un nuevo parón de una hora, y la retirada de la posibilidad de dar y recoger objetos de otros jugadores. Esta es la característica que Rare pensó que estaba ocasionando problemas, pero ahora podemos deciros que se equivocaban. Los problemas siguieron despues del parón, y a lo largo de esta madrugada se desactivaron todas las novedades del parche, hasta que sepan identificar la causa de los problemas.
El arranque de Sea of Thieves ya fue problemático, dada la falta de preparación para el número de usuarios intentando conectar en los primeros días, y un problema con los logros se extendió durante más de un mes. Teniendo en cuenta que el plan de Rare es introducir ampliaciones de tamaño medio/grande cada dos meses, y pequeños parches cada una o dos semanas, este caso sienta un precedente un tanto complicado para el futuro. Si nuevas características con un tamaño e importancia moderados crean problemas, qué puede pasar cuando se introduzcan nuevas mecánicas, nuevos enemigos, una nueva zona del mapa, o incluso una nueva compañía. Quizá Rare deba reconsiderar la urgencia de la implementación de estos parches, y darse un poco más de tiempo para testear. Un retraso de unos días, o un par de semanas, en la llegada de novedades puede hacer menos daño que una mala implementación que tengan que retirar.
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