Hace unas semanas surgió desde Microsoft el conocido como Threshold, el cual ya se descubre, como el sucesor de Windows 8, el cual parece que tiene los días contados.
Pero antes de sacar conclusiones precipitadas, parece que Threshold será la base fundamental para el nuevo sistema operativo de Microsoft, que le correspondería Windows 9, algo que podría poner en riesgo toda la estructura que Microsoft ha venido planteando con XBOX One y los dispositivos móviles, como teléfonos y tablets, en las que ha establecido Windows 8 como base.
Pero lejos de ser algo que cambie totalmente lo marcado por Windows 8, parece que es más una decisión de Microsoft para solventar los problemas de imagen, tal como surgieron con Windows Vista y su sucesión con Windows 7. Si bien, Windows 8 ha sido vapuleado por los usuarios, la imagen que queda de aquellos errores parece estar lastrando un sistema operativo que se ha tornado en una gran herramienta y sistema para multitud de fines.
Según un site especializado en difundir información sobre Microsoft, más concretamente, sobre sus sistemas operativos Windows, habría sugerido que Threshold, que sería el término que sirve para describir las actuales Build de la nueva apuesta para Windows, podría verse en el mercado para abril de 2015. La acumulación pre-alpha del sistema operativo estará disponible para los desarrolladores después de desarrollar la Build2014, y consistirá en tres versiones de hitos antes de que sea enviado a la fabricación para su distribución comercial. Del mismo modo, su efecto para los dispositivos móviles, tablets y XBOX One parece no ser relevante, ya que se seguiría trabajando en la línea de compatibilidad para crear una red de interacción totalmente compatible como una gran plataforma.
Todo apunta a un nuevo sistema que mantendría una continuidad con el actual, pero hasta que no se haya desarrollado y comenzado su difusión en fase beta, no se podrán sacar conclusiones.