Seguro que recordáis hace un año como fue el lanzamiento de Fallout 76, el nuevo juego de ZeniMax y Bethesda llegaba al mercado con numerosos problemas de rendimiento, estabilidad y otros problemas derivados de su género, ser un juego solamente online y con unos servidores que no aguantaron las numerosas peticiones en las semanas posteriores al lanzamiento. La compañía realizó un trabajo constante para solucionar los problemas que presentaba el juego en los meses posteriores al lanzamiento, hasta conseguir que el juego fuera una experiencia mucho más similar a lo que se había concebido en un primer momento.
Pese a todas las actualizaciones y correcciones que recibió el juego muchos usuarios no se sintieron satisfechos con Fallout 76 y por ello reclamaron la devolución de lo invertido en el mismo. Un año después del lanzamiento el la Comisión de Competencia y Consumidores de Australia se ha pronunciado dando la razón al consumidor final y explicando que las políticas propias de una empresa no pueden contravenir a la ley de consumo de Australia.
ZeniMax tendrá que devolver el dinero a aquellos jugadores que compraron Fallout 76 desde el 24 de noviembre de 2018 y el 1 de junio de 2019
Cuando un consumidor compra un producto, recibe automáticamente la garantía, y el minorista debe asegurarse de que la política de reembolso y devolución represente lo que establece la ley australiana de derechos del consumidor. Si un consumidor ha comprado un producto defectuoso, la ley le otorga el derecho de solicitar un reemplazo o un reembolso.
ZeniMax también ha actualizado sus términos y condiciones de sus páginas web para dejar sus políticas más claras y adaptarse a la leyes del consumidor australianas.
Os recordamos que la pasada semana se presentó Fallout 1st, una suscripción premium para Fallout 76.
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