The Ascent demuestra que nunca hay suficiente ambientación Cyberpunk en nuestras vidas. Toda una sorpresa de Neon Giant que os contamos en su análisis.
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Neones que aportan color tras la oscura realidad. Humanos que se convierten poco a poco en máquinas por la promesa de ser un ente mejor. Cables que se extienden con longitudes infinitas por todas partes. Publicidad de cualquier producto exhibidas en cada rincón, sin pudores, sin límites, sin principios. Y todo bañado con un profundo desprecio por la vida humana. Es el futuro. Es un universo cruel que normalmente denominamos como Cyberpunk. Y The Ascent lo cumple todo a rajatabla. Si eres amante de esta estética y de la violencia que la caracteriza, estás en el sitio correcto.
El título de Neon Giant Games ha sido uno de los exclusivos de consola protagonistas (temporales) de Xbox desde su presentación en verano de 2020 como parte de una conferencia donde la máxima era “así serán los juegos de la next-gen”. Y no es para menos, desde un primer momento, The Ascent, construido con Unreal Engine 4, lucía impresionante. Desde su perspectiva isométrica era capaz de mostrar un nivel de detalle enorme, un asombroso apartado artístico y un diseño de acción muy espectacular y vistoso. Eso era a través de vídeos. En movimiento os aseguro que es mucho mejor.
A pesar de que en un primer momento el argumento no pudiera importar, nada más allá de la realidad, pues al menos personalmente, me he visto envuelto en el “complicado” lore que muestra The Ascent, pero que gracias a un completo Glosario que te explica todo lo que necesitas y se va actualizando. Porque The Ascent en realidad hace referencia al Grupo Ascensión, una de las múltiples corporaciones que existen en Veles, el planeta en el que se desarrolla el juego y en concreto dentro de una de las Arcologías, gigantescas construcciones donde se concentran cientos de miles de habitantes para trabajar, dormir y en definitiva, ser “contrayentes” de estos grupos y prácticamente dar su vida como esclavos a cambio de trabajo.
Nosotros somos uno de estos contrayentes, con un futuro bastante negro, pero que se verá envuelto gracias al encargado de su cúmulo en medio de la caída del grupo Ascensión, por una extraña y repentina bancarrota del mismo. Los altos mandos han huido o desaparecido, y la propia Arcología corre peligro de ser tomada por otra corporación, absorbiendo propiedades y por supuesto contrayentes. ¿Cual es nuestro papel en esta trama? ¿Que descubriremos en cada uno de nuestros encargos?
Sin llegar a ser un RPG donde los personajes tienen profundidad, las conversaciones son importantes o la trama relevante, si que se aprecia el esfuerzo, y se te gusta el género, disfrutarás del lore aportado. Pero The Ascent se confiesa como especialista en la acción y es aún mas divertido cuando nos dedicamos a generar violencia en las calles de Veles.
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Apartado técnico
Tal y como sucedía con Cyberpunk 2077, estamos ante un claro caso de “capturitis aguda”. No sabemos si será por la ambientación en general, cuya estética se presta mucho a esto, pero con The Ascent se da absolutamente el caso, sobre todo por el soberbio diseño artístico y la ambientación aportada por el estudio. A pesar de no ser un AAA, de no usar la típica vista en 3ª o 1ª persona, os puedo asegurar que me ha dejado con la boca abierta. Incluso comenzando en las cloacas de la Arcología, The Ascent es capaz de maravillar con un ambiente opresivo y oscuro pero que rebosa vida.
Al contrario de lo que sucede con muchos RPG de acción con vista isométrica, aquí todo está realizado completamente en 3D, con un detalle tan insano que parece un arte conceptual en movimiento. Y no sólo eso. El coctel de iluminación, reflejos, efectos de partículas, físicas generadas, destrucción de escenarios, etc… es de los que quitan el hipo, hasta el punto de tener esa sensación constante de juego de nueva generación, como si antes no se pudiera hacer todo eso. Y es que realmente en Xbox Series X, donde se mueve a 4K y 60 fps de una manera increíble, sin bugs, parones ni nada por el estilo, ahora mismo no hay nada parecido. No me quiero ni imaginar este título con Ray Tracing, tiene que ser algo absolutamente descomunal.
Algo extraño es el tema de los tiempos de carga, pues si bien una vez se hace una primera carga de unos 15-20 segundos, después el título carece de ellos. Sin embargo y debido a que comparte habitación con la anterior generación, si que tendremos algo similar a los “ascensores” de Mass Effect, que en este caso, parece algo anecdótico para no abrir diferencias entre versiones.
Y es que como título cyberpunk funciona genial. Los escenarios siempre poblados con gente, múltiples enemigos en pantalla, y siempre sin perder ese estilo que le caracteriza. Todo, por supuesto, bañado de una buena Banda Sonora con temas adecuados, que encajan a la perfección en cada una de las situaciones, incluso usando canciones determinadas en algunos establecimientos para aportar una ambiente más íntimo. Porque en relación a los efectos, disparos y explosiones, todo cuenta con su ‘punch’, que en especial, tenemos que nombrar a la granada ‘Vengadora’ que suena espectacular.
Buenas noticias, pero mal resultado en el aspecto de la localización de The Ascent, pues si bien tiene su tratamiento al español, con una buena calidad del texto, hemos encontrado un problema en el texto que se generan en las conversaciones, que pasa a ser en inglés (claramente por un bug), además de ofrecer un sistemas de respuestas cortas a lo Fallout 4, pero que resultan suficientes para cada una de las conversaciones, porque -oh, sorpresa- nuestro personaje no habla.
Jugabilidad
Seguramente lo hayas oido ya, pero ciertamente The Ascent es algo así como un “Diablo con pistolas”, o un “shooter pero con el estilo de Diablo”. Lo que no sabes y te voy a contar es que en los momentos de acción casi parece que estás manejando un shooter 3D al uso, principalmente por el sistema de combate que pone sobre la mesa Neon Giant, que junto a lo espectacular que se muestra en movimiento hacen un coctel explosivo.
Pero comencemos por el principio. Porque podremos crear nuestro personaje desde cero, con poca variedad de opciones, he de decir, pero que tampoco importa mucho ya que más adelante podremos cambiar (sin coste alguno) totalmente de aspecto o incluso de género. Y es que realmente somos lo que se dice un “machaca”, una de esas personas que no piensa, actúa. Y en este caso, dispara y luego pregunta. Nuestro papel es ese, el juego no pretende otra cosa y así nos tratarán en todo momento. Aunque habrá alguno de nuestros jefes al que le moleste que matemos alguna que otra decena de inocentes solo por estar en medio de un tiroteo. Daño colateral asumible, lo llaman.
No hay duda, The Ascent es un RPG de acción, pero está lejos de ser un indie cualquiera. No es el típico juego bonito que gasta sus recursos en 6 u 8 horas de historia, si no que se toma su tiempo para ofrecernos un amplio mapa dividido en zonas listo para explorar, varias alturas sobre el que se construye y se divide de una manera orgánica y coherente, para poder buscar ese cofre escondido o porque no, una mazmorra que nadie quería que encontrásemos.
Pero mucho ojo, porque si encontramos enemigos de mas nivel duraremos lo que un caramelo en la puerta de un colegio. Las múltiples misiones secundarias que incluye nos pueden llevar a lugares que no visitaríamos de ninguna manera con las principales, pero también aprovecharán el progreso de éstas y la apertura de nuevas áreas con motivo de la historia. Tanto para unas como para otras no han recortado en cinemáticas o cambios de perspectiva para ofrecernos con más detalle esa conversación, aportando un toque de calidad al conjunto y la posibilidad de apreciar bien el modelaje de personajes y escenarios desde un ángulo más cercano (ejemplo en la galería de abajo).
Es por esto que resulta recomendable no excedernos en esa exploración, pues nos pueden machacar en un segundo sin apenas darnos cuenta. No obstante, los puntos de respawn son bastante generosos con la progresión, pero al mismo tiempo, pueden ser confusos, pues tu personaje revive en el más cercano, no en el último por el que pasaste, dando algunas situaciones en las que reapareces en sitios que habías desbloqueado anteriormente, pero no habías pasado esta vez, nada raro, pero si que te puede descolocar un poco. Y si realmente nos perdemos, podemos coger la parada del Metro más próxima o por un módico precio, llamar a un Taxi y que nos recoja volando. Algo tenía que tener bueno el futuro y eso son los Taxis Voladores.
En relación al combate, The Ascent lo apuesta todo a una acción dura en la que las coberturas se convierten en un aliado esencial cuando la situación nos supera. Pulsando el gatillo izquierdo, podremos apuntar desde arriba, por encima de las coberturas, mientras nos resguardamos agachados, dándonos la oportunidad de sobrevivir a un frente abierto en el que las balas vuelan. Pero siendo esencial, no es una táctica infalible. Los enemigos nos flanquearán rápidamente, por lo que pensar rápido, usar nuestras habilidades, elegir el mejor objetivo y disparar primero será nuestra principal tarea.
Quizá pudiera parece un sistema caduco que poco a poco podría aburrirnos, pero las habilidades relacionadas con las Prótesis ayudarán a mitigar esa sensación. Desde granadas que hacen implosionar los objetivos o a digitalizar nuestro daño hasta sacar bots de ayuda o torretas, estas habilidades tácticas se irán volviendo cada vez más indispensables y junto a la variedad de armas disponibles, una manera de prepararnos ante cada enfrentamiento. Porque en The Ascent tendremos multitud de combates que serán totalmente aleatorios, pero otros en los que habrán jefes de final de fase o enemigos de élite que serán insalvables. Y mucho ojo, porque ahí es donde nos daremos cuenta del dolor de cabeza que nos pueden dar.
Por supuesto, como muchos estarán esperando, tendremos que ir looteando nuevas armas, armaduras, granadas y toda clase de objetos, que conforme avancemos en la aventura se irán haciendo más fuertes, con estadísticas mejoradas y capacidades de defensa o de ataque muy útiles para adaptarnos a cada situación, incluso algunas tendrán distintos tonos que indican si son raras, especiales o épicas (aunque no estén clasificadas de esta manera literalmente hablando). Cada nivel nos permitirá añadir puntos a las características de nuestro personaje, que a su vez, irán sumando a 4 capacidades, que son las que realmente definirán el mismo y a las armas que manejen. Por ejemplo, una Granada PEM tendrá más potencia si nuestro personaje tiene una bonificación de técnico y el más vigoros@ potenciará las granadas explosivas.
En realidad, todas estas mecánicas no son ninguna novedad en el género y si he de confesar algo, agradezco que estén simplificadas al máximo y que la personalización o “builds” estén supeditadas al que quiera dedicarse especialmente a ello, que se puede. Pero al mismo tiempo, el jugador despreocupado solamente se fijará en que quiere tener más vida o esquivar con más eficacia.
Podríamos seguir explicando en profundidad cualquiera de estos apartados, pero en definitiva, se puede afirmar que The Ascent es un título intencionadamente accesible. No penaliza el no poner mucha atención a este tema.
Duración
Decía Neon Giant que la duración contando solamente la misión principal estaría sobre las 15 o 20 horas. Y no estaba equivocada, sobre lo que si estaba es que es una locura hacer solo las misiones de historia, pues ir con el nivel raspando el recomendado nos puede hacer que nos atasquemos en algún que otro enfrentamiento importante. No obstante, explorar el mundo de The Ascent mientras buscamos objetivos secundarios o solamente por placer, no cuesta nada, con cada rincón diseñado con tanto talento o enfrentamientos random tras cada esquina que no nos permiten aburrirnos. El resultado es que superas fácilmente esas 20 horas con poco que te interese la historia, te detengas a ver su lore y te lies con las secundarias. Al menos, a pesar de ser algo simples algunas, no son repetitivas ni algo rutinario solo para recibir experiencia.
Toca hablar del cooperativo de The Ascent. Y si bien es simple de describir, casi merece un apartado por si solo, pues aunque debido a jugar mayormente bajo embargo, no hemos encontrado otro usuario en línea (de momento no cuenta con Matchmaking), si que lo hemos hecho de manera local. Porque si, cuenta con un cooperativo local y online para hasta 4 jugadores.
Solo tendremos que iniciar una nueva sesión, elegir el perfil del personaje principal sobre el que se basará la partida y que cada jugador lleve el suyo. Lo malo de este modo local, es que cada jugador deberá progresar siempre bajo esa misma cuenta, por lo que conviene empezar todos al mismo tiempo para que no sea un caos, porque aunque no hemos podido comprobar por falta de tiempo como se equilibra el juego con jugadores de distinto nivel, si que en la partida hemos observado que el título se adapta muy bien a este tipo de partida, a costa de ser irremediablemente algo caótico cuando los enemigos y los 4 jugadores se mezclan en pantalla, la cual siempre será la misma, impidiendo que nos podamos alejar demasiado unos de otros. Se estirará, pero no se romperá.
Conclusión
Tenía muchas ganas de jugar a The Ascent. Desde el primer vistazo que le eché sabía que sería especial, pero que en el fondo, no pasaría de un indie de enorme calidad. Pues me alegro mucho de haberme equivocado. Con la reciente experiencia de Cyberpunk 2077, The Ascent ha conseguido maravillarme con su estética, su apartado artístico y sus potentes e impactantes gráficos.
Bajo ese aspecto inofensivo con el que puede calificarse este tipo de ARPG de vista isométrica se escondía un título muy grande. Mucho más de lo que cabría esperar de un equipo de tan sólo 12 personas.
No podemos decir que no tiene pegas, las cuales hemos descrito a lo largo del texto, pero en lo que pretende, lo hace a la perfección. Es un título altamente funcional, el manejo con el mando es exquisito, la fluidez de los 60 fps, el detalle de los escenarios, las misiones, el lore… y por encima de todo, una acción excepcional que sabe reinventar cada enfrentamiento a pesar de contar con unos recursos limitados pero muy bien gestionados. Hasta se permite el lujo de insertar ese tono irónico-futurista constante con el que una Gatling Gun se llama “Rompehuelgas” y su descripción incluye “Arma diseñada para control de masas” o un presentador decir prácticamente entre risas que el fracaso de un sistema de gobierno en el que votaban todos por igual era algo evidente.
Lamentamos no haberlo podido testear en Xbox One, donde funciona a 30 fps, pero la sensación con Xbox Series X es casi de juego de nueva generación, como si de alguna manera tal nivel de detalle no fuera antes posible. Quizá solo había que esperar que se juntara el talento de la gente de Neon Giant Games.
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Apartado técnico95/100
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Jugabilidad85/100
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Duración85/100
Lo bueno
- Artística y gráficamente espectacular.
- La acción es brutal.
- Los escenarios rebosan vida.
- Los cambios de cámara le otorgan libertad creativa sin perder la perspectiva de la acción.
- ¡Cooperativo local y online para hasta 4 jugadores!
Lo malo
- Nuestro personaje debería de haber tenido algo más de movilidad.
- Pequeño bug con la traducción.
- La navegación por el mapa con respecto a los objetivos es algo confusa a veces.