Analizamos NASCAR Heat 5, la nueva entrega basada en la licencia de esta famosa competición americana, y que busca ser máximo exponente en consola.
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Ahora que esta generación de consolas está acabando podemos afirmar sin duda que el género de conducción nos ha ofrecido multitud de grandes títulos estos últimos años. Este género tiene la gran virtud de poder ofrecernos experiencias muy distintas sin salirse de los estándares que suelen ofrecernos prácticamente la totalidad de títulos.
En lo que a títulos basados en competiciones reales se refiere, en los últimos meses hemos recibido títulos bastante notables como son Assetto Corsa Competizione o F1 2020. En el día de hoy vamos a analizar NASCAR Heat 5, la nueva entrega de esta licencia que busca explotar la competición automovilística americana por excelencia.
Esta nueva entrega, desarrollada por el estudio 704Games y publicada por Motorsport Games llega apenas 10 meses después del lanzamiento de la anterior entrega con el principal objetivo de buscar mejorar una fórmula que quizás este demasiado destinada a los amantes de esta competición. ¿Será este NASCAR Heat 5 el nuevo referente dentro de esta saga? Vamos a comprobarlo.
Apartado técnico
Como hemos comentado anteriormente, este título sigue la estela de sus predecesores y representa a la perfección todos los equipos que participan en la competición, al igual que sus respectivos coches y pilotos. Al igual que ocurre con los otros títulos de conducción que hemos citado antes esto tiene sus virtudes y sus puntos negativos, y es que quizás provoca que el juego no sea del gusto de una gran masa de jugadores.
Tal y como ocurría con Heat 4 todo aquello que esta relacionado con el mundo de la NASCAR esta recreado prácticamente a la perfección, Este punto lo cierto es que el juego es muy continuista, y es que a simple vista podríamos decir que estamos ante un simple parche que actualiza los equipos y pilotos. Esto ocurre de la misma manera con las pistas, y es que dispondremos de 34 circuitos oficiales, que cubren lugares del mundo real como Daytona, Indianápolis, Bristol, los óvalos de Martinsville, así como circuitos de carretera como Watkins Glen y pistas de tierra como Eldora.
El juego nos ofrece la posibilidad de elegir un «modo rendimiento» que sacrificará un poco de calidad gráfica para ganar algunos fps de rendimiento. Sin embargo el juego no llega a 60 fps en ningún momento, incluso si lo jugamos en una Xbox One X. No encontraremos ningún fallo en el apartado gráfico reseñable, aunque si chirría por ejemplo ver como desaparecen las huellas de los neumáticos de los coches que tenemos delante en las carreras de tierra. Pese a ello el juego tiene un acabado bastante correcto, y aunque las diferentes cámaras exteriores dejan un poco que desear la cámara desde el volante funciona genial.
Su apartado sonoro es muy bueno, y desde el primer momento notaremos el gran trabajo que ha realizado el estudio a la hora de desarrollar el juego. Tanto el ruido de los diferentes motores como el resto de sonidos que provengan de nuestro equipo harán que nos sintamos en todo momento como pilotos de NASCAR. El juego llega totalmente en inglés, algo que es común dentro de la saga teniendo en cuenta que se trata de una competición automovilística cuyo principal público esta en norteamérica.
Jugabilidad
Hablando de la jugabilidad de este NASCAR Heat 5 no podemos decir demasiadas cosas malas, y es que sigue en la línea de las anteriores entregas. Esto no es malo, pero puede no justificar la inversión en esta entrega si tenemos Heat 4. Antes de hacerse con este juego debemos tener en cuenta que tipo de competición es la que representa, y es que estamos ante una de las competiciones más peculiares a nivel mundial puesto que la mayoría de circuitos son óvalos. Prepárate para girar a la izquierda.
A la hora de jugar podremos elegir si preferimos utilizar mando o volante, y la verdad es que el control está bastante bien depurado. Con el mando los coches responden bastante bien, y aunque en ocasiones los coches pueden ser un poco toscos lo cierto es que estamos ante un título muy disfrutable. Al igual que ocurre con F1 2020 el título cuenta con multitud de opciones de configuración, incluso de modificar como reaccionan los coches a las colisiones, lo que permitirá a cada jugador adaptar su experiencia y facilitar la curva de aprendizaje.
Su modo carrera, muy mejorado
Los títulos de conducción de los últimos años le están concediendo una gran importancia a sus distintos modos Carrera, y lo cierto es que es algo de agradecer. En el modo Carrera de este Heat 5 puedes elegir entre unirte a un equipo o crear el tuyo propio, opción mucho más interesante a nuestro parecer. Unirte a un equipo te permite estar pendiente solo de cada carrera, ya que todas las demás cosas se manejan en segundo plano. Si sois de aquellos que no se conforman con solo saltar a la pista, crear vuestro propio equipo te permite controlarlo todo. Desde la contratación en tu equipo, en qué se especializan tus mecánicos, cuánto dinero eliges gastar en los coches, hasta entrenar a tu equipo para que sean más productivos a la hora de realizar las reparaciones.
En este punto es, sin duda, donde más evolución podemos ver en la saga. Al crear tu equipo es donde puedes ver realmente un cambio en la profundidad del título. Ser capaz de establecer amistades y rivalidades con otros pilotos parece ser un poco más equilibrado que en las versiones anteriores también. Conduce bien y otros pilotos trabajarán contigo. Conduce demasiado agresivo o ponte un poco agresivo en la pista y la IA puede decidir intentar eliminarte si te acercas demasiado
Modos de sobra en NASCAR Heat 5
Pese a que como hemos dicho el modo carrera es la estrella dentro de los modos de juego de Heat 5, el título tiene bastantes opciones como para tenernos entretenidos durante bastante tiempo. El modo carrera rápida nos permite dirigirnos directamente a la pista y configurar totalmente el tipo de prueba que vamos a disputar. Tendremos a nuestra disposición 3 tipos de competiciones NASCAR sobre asfalto más una ficticia que se desarrolla sobre tierra y que es bastante espectacular.
Junto con este tenemos también la posibilidad de disputar campeonatos, desafíos y multijugador en pantalla dividida. Un añadido muy interesante en la edición de este año es la posibilidad de participar en sesiones de prueba antes de acceder a la calificación o la carrera. Estas sesiones nos permitirán probar diferentes configuraciones para nuestros vehículos y salir a pista para comprobar cual de ellas se adapta mejor a la pista o a nuestra forma de conducción. La oferta de modos de Heat 5 la completa su vertiente online que nos permite crear o unirnos a salas donde poder disputar carreras con otros usuarios, y dos completos editores con los que podremos modificar completamente a nuestro piloto o los coches de nuestro equipo.
Duración
Como suele ocurrir con los juegos deportivos y de conducción, NASCAR Heat 5 nos dará tantas horas de juego como queramos invertir en él. Las posibilidades de configuración de nuestra experiencia hará que la curva de aprendizaje sea bastante amigable, y nuestro afán de superación hará seguro que vayamos mejorando vuelta a vuelta en cada uno de los circuitos.
El modo carrera continúa siendo la estrella dentro de los modos para un solo jugador, y es que los nuevos añadidos y opciones de configuración de nuestros equipos harán que juguemos muchas horas. Por supuesto jugar a Heat 5 con amigos será también bastante divertido, y lo podremos hacer tanto en pantalla dividida como online, donde además podremos competir por ser los mejores pilotos.
Conclusión
La evolución dentro de cualquier saga de videojuegos es muy importante, y en ese sentido podemos considerar a NASCAR Heat 5 como un pequeño paso hacia delante. Sus cambios dentro del modo carrera y las sesiones de prueba son añadidos bastante necesarios y que hacen mejor al título. Sin embargo estos cambios son demasiado pequeños para justificar la compra del título, y más teniendo en cuenta que no ha transcurrido un año desde el lanzamiento de su anterior entrega.
Heat 5 no es, ni de lejos, un mal título de conducción pero necesita una gran evolución para poder acercarse a otros competidores dentro de su género. Además, que el título solo represente la NASCAR americana no ayuda a que el juego llegue a un gran público, y es que probablemente este muy destinado a aquellos amantes de la competición.
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