Análisis de Street Fighter 6

Capcom ha puesto toda la carne en el asador con Street Fighter 6 y el resultado es asombroso. Divertido, espectacular, y esta vez, también para todos los públicos.

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El rey de la lucha ha vuelto. No se me ocurre otra manera de expresar la gratitud tan grande que tengo hacia Capcom por haber construido semejante carta de amor para los fans de la lucha y al mismo tiempo, un título absolutamente accesible para todos los públicos. Street Fighter 4 fue un juego de enorme éxito, un cambio en la franquicia que nos sorprendió a todos y dominó las competiciones con dureza, pero su quinta parte, apareció en un momento de extraña necesidad de la compañía, con una limitación importante en contenido, funcionalidades e incluso durante un buen tiempo, hasta podemos decir que roto. Pero lo que más nos dolió fue que no contaran con Xbox para ello.

Porque Street Fighter V era en su núcleo jugable un título enorme, diversión pura en forma de juego de lucha como no lo había visto desde hace mucho. La simplificación de sus técnicas unida a la complejidad de manejo de cada uno de sus personajes era un reto increíble, porque precisamente al carecer de modos offline potentes todo se centraba en el online y mejorar tu técnica. Pues Street Fighter 6 coge lo mejor de ambas entregas y lo amplifica astronómicamente, con una ambición de Capcom que solo podría pasar en su enorme racha de títulos que llevamos viendo los últimos años: La saga Resident Evil ha resucitado y de qué manera. Devil May Cry V fue un golpe en la mesa increíble y prácticamente cada título lanzado por los japoneses con el ya famoso RE Engine es, como mínimo, un juegazo.

Hay mucho que explicar porque Street Fighter 6 tiene mucho que contar. No obstante, las claves están muy claras, pues parece que Capcom ha cogido una frase al pie de letra para construir esta sexta entrega: «Fácil de manejar, pero difícil de dominar». Para ello, ha construido todos los modos en base a lo que busca cada uno de los usuarios que se pueden ver atraídos por Street Fighter 6, pues sus espectaculares combates seguro que te dejarán fascinado. Tanto si solo quieres pasar un buen rato, dejar las competiciones online a un lado y quizá de vez en cuando echar unas peleillas con un amigo, como si eres un super fan de la franquicia que quiere ponerse de inmediato con las clasificatorias, Capcom ha pensado en ti.

Street Fighter 6 está dividido en tres grandes modos que bien podrían ser tres juegos distintos. El modo World Tour es una especie de Street Fighter RPG, que nos ha recordado levemente a la dinámica de la saga Yakuza, con conversaciones, combates en la calle, items, mini juegos y una historia que seguir. Realmente se han sacado de la chistera un modo del que sinceramente, no apostaba ni un dolar hasta que no lo he podido probar en profundidad. Es más, comentándolo con los compañeros, me ha gustado llamarlo más bien «Final Fight RPG», pues por momentos, Metro City (y que Cody Travers sea el actual alcalde ayude) es una especie de versión modernizada de aquel ‘Yo contra el barrio’ de las recreativas. Un guiño de auténtico lujo por parte de Capcom que los más viejos del lugar apreciaremos, pues incluso ¡podremos jugar al Final Fight original en recreativas!

El siguiente modo, y probablemente a la larga el más longevo de todos, es el Battle Hub. Ahora ya no tendremos que esperar en un soso menú a que el matchmaking nos busque una partida. Ahora nuestro avatar, el mismo que manejamos en el modo World Tour, visitará una especie de sala junto a otros jugadores, donde podremos retarlos a un combate directamente con nuestro luchador favorito o incluso con nuestro avatar, al que podremos entrenar y preparar precisamente con el modo World Tour. Tras varios días con el juego lamento haber pasado demasiado tiempo en esta sala, porque es un auténtico vicio pasar las horas combatiendo contra otra gente. Sobre todo con un Rollback Code que funciona a las mil maravillas. Literalmente, he tenido cero problemas con este tema.

Por último queda el modo Fighting Grounds. Es el Street Fighter más clásico. El modo Arcade con mini-historia incluida de cada personaje, los entrenamientos, las guías de combo, y algunas opciones interesantes como el «Combate Extremo», que nos dejará luchar con condiciones extrañas y sorprendentes. Por supuesto, también podremos acceder a los combates casuales e igualados online desde aquí. Digamos que solo este modo, era todo lo que ofrecía Street Fighter V. Imaginad el enorme cambio.

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Apartado técnico

Street Fighter 6 agarra con maestría el RE Engine y vuelve a dejar constancia que en esto de ser el número uno de los juegos de lucha también es importante ser el más bonito de todos. Por encima de todo, los luchadores son los que se ven beneficiados absolutamente de esta subida excelsa de calidad a todos los niveles. Muchos ya lo habéis visto en la demo o en la beta, es que directamente parecen personajes de una película de animación. La ropa, los músculos, los gestos, incluso las texturas de la piel se ven extremadamente detalladas. Eso sí, nuestros avatares, al tener un tremendo margen de diseño que nos permitirá fabricar auténticos engendros callejeros, puede ser que no tengan este nivel tan alto de calidad, aunque las físicas sigan siendo exactas, pues te avisan que el avatar con piernas o brazos largos tendrá más alcance, pero al mismo tiempo, tendrá menos movilidad debido a eso.

Con relación al resto de elementos, ciertamente están un escalón por debajo. Aquí la cuestión es representar con cero lag o cero bajones de frames cada lucha y al menos en Xbox Series X, lo consigue perfectamente. Tenemos modo Calidad o modo rendimiento para elegir, y aunque en principio con el de Calidad las peleas son a 60 fps, hay un extraño bug que hace que las peleas callejeras con el avatar del modo World Tour se vean a 30 fps. Por eso optamos por elegir el modo rendimiento casi todo el rato. El problema es que algunas texturas de este modo no estaban terminadas en la versión de análisis para Xbox, ya que se añadirán con parche día uno, según nos ha confirmado Capcom.

Nota: Por si véis alguna textura en las imágenes que está fuera de tono, sabed que es por esto y no debería de haber mayor problema el próximo día 2 cuando tengáis la versión final. Es en el modo World Tour precisamente donde esta falta de calidad visual se nota más, pero lo cierto es que no afecta para nada al margen de las texturas de baja resolución que se solucionarán con el parche.

Ese es el único punto negativo que tenemos que poner en este apartado, porque las luchas son un auténtico festín para nuestros ojos. Las animaciones de los personajes son sublimes y la física de los impactos es muy realista, pues realmente veremos como golpeamos con una efectividad exacta donde vaya nuestro movimiento de ataque. Y en este sentido toca abordar un tema que algunos han visto algo «recargado», pues si bien los efectos de los especiales, los cambios de cámara rápidos están integrados a la perfección y todo se mueve de maravilla, el efecto visual de ‘pintura’ que afecta a los movimientos Drive puede parecer algo recargado. Pero es solo cuando lo vemos desde la silla del espectador. Cuando estamos jugando, esos efectos son tan llamativos porque realmente tenemos que saber cómo combatirlos o evitarlos, pues el Drive Impact es literalmente un golpe casi imparable, ya que está hecho para eso.

Si en el mismo momento, ejecutamos nosotros un Drive Impact, la pantalla se llenará de este tinte efectista y se ralentizará para aportar esos microsegundos de drama que ocasionarán que uno de los dos será derribado. Es decir, en la práctica, es efectista, si, pero tremendamente útil a nivel visual.

En el terreno sonoro, Street Fighter 6 es potente a nivel de efectos y contiene una gran cantidad de pistas musicales que harán nuestras delicias, aunque para tener a los 8 luchadores originales del Street Fighter 2 original podían haberse currado alguna en plan revival, algo que realmente hubiéramos agradecido, pero no ha sido así. No obstante, el juego estará en constante actualización, así que no descartemos nada todavía.

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Jugabilidad

Como hemos comentado arriba, lo más importante en un juego de lucha es precisamente los luchadores que tendremos disponibles. Street Fighter 6 ya cuenta con una ventaja interesante, pues nuestro Avatar será de «estilo fluido», pues conforme avancemos en el modo World Tour, tendremos cada vez más opciones para personalizarlo totalmente. No obstante, de los clásicos encontraremos a Ryu, Ken, Dhalsim, E.Honda, Zangief, Chun-Li, Blanka y Guile. Por la parte de los ya conocidos de otras entregas, tenemos a Luke, que ocupa la portada, a Cammy, Juri y Dee Jay. Aunque sin duda los más interesantes son los nuevos, que aportan un punto vital y refrescante al estilo de Street Fighter: Kimberly, Lily, Jamie, Manon, Marisa y JP.

De estos últimos llama poderosamente la atención lo que se parece Kimberly luchando a otro clásico del universo Metro City: Guy, o que Lily luche con el mismo estilo que el mítico T.Hawk. Es otro de los detalles que a los veteranos y seguidores de la saga seguro que agradecen. Por supuesto, cada uno tiene su estilo diferente y para conocerlos a fondo tendremos una ‘Guia de personaje’ que nos contará exactamente cuáles son las cualidades y como se lucha con cada uno de ellos, para que no nos equivoquemos al elegir. Eso sí, me encantaría remarcar lo mucho que odio al maldito Ken Masters, ya que en manos de principiantes sigue siendo un arma extremadamente mortal y OP, que te puede destrozar en pocos segundos, como sucedía en SFV. Muy recomendado saber contrarrestarlo si queremos avanzar más allá de estos primeros niveles en el competitivo.

Pero por supuesto, hay que detenerse un momento en explicar el «meta» de SF6, el famoso sistema Drive. Pero, ¿que es el sistema Drive? Pues se trata de una barra que tenemos justo debajo de la de vida que nos permitirá hacer varios movimientos especiales para tener más maneras de abrir la defensa de un oponente o de romper sus ataques. Como sabéis, una de las maneras más habituales de ejecutar combos en SF es el sistema de cancelación de movimientos, para continuarlos con otros o terminarlos con especiales. Eso sigue intacto, pero el sistema Drive añade varias opciones: El Drive Impact, que es un movimiento casi imparable que romperá si o si la defensa para poder asestar un combo tras ello, el Drive Block, que nos permitirá cubrirnos como si pulsáramos hacia atrás, el Drive Parry, que nos permitirá hacer parrys a los ataques enemigos y que en lugar de agotar la barra la rellenará y el Drive Reversal, un movimiento similar al Impact pero que va justo después del Parry y mucho más poderoso.

Por ejemplo, si te arrinconan, un Drive Parry + Reversal girará las tornas del combate y un Drive Impact cuando estén arrinconados a su vez, provocará que choquen contra la pared y caigan al suelo. Peor se vuelve cuando la barra se agota y entramos en modo recuperación, siendo totalmente vulnerables a los Drive Impact, incapaces de usar los Drive Parry e incluso pudiendo entrar en modo aturdimiento si nos chocamos contra la pared. En ocasiones, agotar del todo esa barra, puede suponer una rápida derrota.

Pero no sólo están los golpes Drive, también podremos potenciar nuestros golpes especiales con la barra Drive. Por ejemplo, si pulsamos puñetazo fuerte + puñetazo medio mientras hacemos un Hadoken con Ryu, se ejecutará la versión Drive del mismo, el cual golpeará hasta tres veces al oponente. El problema es que esta acción gastará hasta dos bloques dependiendo del movimiento realizado, pero aporta un matiz realmente importante, al crear versiones diferentes y potenciadas de los ataques especiales de cada uno de los luchadores. Imaginad las posibilidades que ofrece.

Capcom quería llegar más lejos, a más audiencia con esta entrega y creemos que lo ha conseguido de sobra con las tres opciones de combate que tendrán nuestros luchadores:

• El modo Clásico tendrá la combinación habitual de patadas y puñetazos débil, medio y fuerte, necesitando de la combinación de botones para hacer los movimientos Drive o los especiales. Más control para los expertos, pero más complicado de dominar.
• El modo Moderno está equilibrado de manera que cualquiera puede aprender a manejar fácilmente a un luchador. Botones que accionan el Drive directamente o los agarres se unen a que tendremos un botón para hacer especiales con solo mover la palanca a un lado, incluso pulsando el gatillo podremos encadenar autocombos.
• El modo Dinámico es el recomendado para los jugadores casuales o que no se quieren quebrar la cabeza. Simplemente machacar botones y reventar al oponente mientras se dan un festín visual. La IA hará toda clase de movimientos espectaculares por tí.

Street Fighter RPG alias «World Tour»

Efectivamente, como hemos mencionado arriba, Capcom se ha sacado de la manga un modo que prácticamente es una campaña para un solo jugador de Street Fighter. El modo World Tour es una manera de experimentar con nuestro propio avatar cual es proceso para convertirnos en un «Street Fighter» de clase mundial. Para ello, tendremos que movernos por Metro City, guiados por Luke, que será nuestro primer Maestro y que nos dirá cuales son los pasos a seguir para progresar. Nuestro avatar, de creación totalmente propia y con una variedad increíble de elección, será el protagonista de una aventura en la que conoceremos a todos los luchadores oficiales, algunos de ellos, ofreciéndose a enseñarnos sus técnicas.

Pero no penséis que es un mero trámite para nuestro avatar. Tendrá una historia bien hilada (aunque nada complejo, por supuesto), con cinemáticas, animaciones especiales, conversaciones y sobre todo, muchas luchas. Incluso nos retarán por la calle al más puro estilo JRPG, deteniéndose la exploración para pelear contra ellos. Entrar en detalles sobre este modo es prácticamente como empezar a hablar de un juego nuevo, así que de nuevo me limitaré a lo dicho al principio. Imaginaos una especie de Yakuza, algo más simple, con los combates al estilo Street Fighter y viajes por el mundo encontrando a otros maestros mientras desvelamos la trama para poder personalizar a nuestro propio luchador para encontrar nuestro estilo perfecto. Resident Evil 7 fue una joya que Capcom mantuvo en secreto para dejarnos boquiabiertos, y tengo la misma sensación con este World Tour. De verdad quieren llegar a ofrecer algo diferente. Algo más.

El modo Fighting Grounds contiene todo lo clásico que debe tener un juego de lucha: Modo Arcade, Versus, Entrenamiento y Online, pero además ahonda en sus posibilidades ofreciendo el llamado «Combate Extremo», con el que podremos seleccionar pequeños eventos o dificultades a los combates, como por ejemplo, que un toro intente arrollarnos cada varios segundos. Como ya mencionamos, este modo es prácticamente ya un juego por sí solo, por eso incluye una de las herramientas que más apreciaremos como jugadores, pues además de poder ver las Guías de Personajes, también podremos entrenar sus movimientos uno por uno, para poder dominar a nuestro luchador favorito.

Una vez lo hagamos, podemos pasar a los «Desafíos de Combo», que sin las instrucciones en pantalla nos retarán a hacer distintos combos con cada personaje. Por supuesto, esta parte se la dejo a los más expertos, pues yo de momento, solo me he podido centrar en aprender a combatir con Kimberly, una de mis favoritas en esta edición. No obstante, la conclusión es clara con esto: Mas posibilidades e ingente contenido a añadir.

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Duración

Particularmente, he dejado el modo Battle Hub para este segmento, pues a la larga, será sin duda en el que más tiempo pasemos jugando contra otros jugadores en estas salas interactivas online. Representados con nuestro avatar, podremos buscar partidas con matchmaking tanto en Casual como en Igualado, pero también sentarnos en las recreativas a combatir directamente contra otros jugadores que estén allí con nosotros. También tendremos la posibilidad de combatir con nuestro propio avatar, aunque me pegaron tal paliza que poco pude probarlo. Vuelva usted mañana, como dice el refrán.

En este sentido, si queremos darle emoción, podemos activar los Comentaristas. Auténticos profesionales que se ganan la vida «casteando» juegos de lucha que han prestado su voz para comentar las partidas. Por supuesto, están completamente en inglés (o en japonés) y no tienen subs, así que el efecto en los jugadores latinos será mas reducido, aunque le aporta su puntito de espectacularidad.

Otro detalle que me ha fascinado -además del divertido modo foto del World Tour- , es la cantidad de artes conceptuales que se desbloquean cuando nos pasamos el modo Arcade con los distintos personajes. Son auténticas joyas. Algunos oficiales y otros de artistas o fans, pero son absolutamente increíbles.

En el futuro, Street Fighter 6 tiene pensado añadir Pases de Batalla a modo de temporadas para agregar más contenido estético que conseguir, pero también nuevos personajes, pues 4 de ellos, incluido Akuma, llegarán en el próximo año, no solamente para poder luchar con ellos, sino que además serán maestros en el World Tour, para poder seguir ampliando el poder de nuestro Avatar con el tiempo.

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Conclusión

Lo logrado con Street Fighter 6 deja a la altura del betún la anterior entrega. Es increíble, divertido, para todos los públicos y con prácticamente todos los modos que puede permitir un juego de lucha. Jamás habría pensado en que este World Tour les hubiera salido tan entretenido. Aunque tengo que admitir que mi parte más «boomer» se ha flipado bastante con el tema de que se desarrolle en Metro City y haya estatuas de Mike Haggar por todos lados.

Las claves de Street Fighter 6 son sin duda tres: Espectacular, amplio y accesible. Su combate es una maravilla de la diversión y el Battle Hub pinta a tenernos mucho tiempo enganchados, pero si solo quieres probarlo, jugar con los amigos de vez en cuando y pasarte la historia para un solo jugador, el modo World Tour y el control Moderno hará las delicias para ti. Pocos peros le podemos poner al que, de momento, se corona como Rey de la Lucha en este 2023 que se antoja como uno de los más interesantes del género desde hace casi una década. Que Mortal Kombat 1 y Tekken 8 se agarren bien fuerte, porque Street Fighter 6 ya está aquí para hacerse con la victoria.

*Gracias a Capcom y Plaion por el material necesario para el análisis.

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