Análisis de Infernax

Hoy analizamos Infernax, un metroidvania con olor a clásico, el cual no llega a ser memorable pero tampoco desechable.

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Incluso aunque disfruté y mucho de Symphony of The Night y Lords of Shadow, no me consideraría un gran fan de la saga Castlevania. Esto no se debe a nada en particular, simplemente creo que llegué tarde a la fiesta, y por lo mismo no tengo la conexión o el interés de aquellos que ya están en la franquicia desde las épocas de Dracula’s Curse o incluso el infame Castlevania 64. Así y todo, el gameplay de los títulos originales siempre me pareció super divertido, y no empecemos con el asunto del género metroidvania, porque si me dan el tiempo necesario les podría escribir una tesis entera explicando las razones que lo hacen tan entretenido.

Lo que busca hacer, lo consigue con creces - ¡Comparte!

Es por esto que cuando nuestro querido Pedro del Pozo me habló sobre la posibilidad de analizar Infernax, no lo pensé dos veces, ya que esta parecía ser una obra inspirada en los clásicos juegos que mencione al principio, la cual incluso tenía aspecto de haber sido creada durante aquellos lejanos años, y que si bien el producto final es bastante entretenido, al mismo tiempo me dejó una sensación un poco extraña en el cuerpo.

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Aquí nos pondremos la armadura de Floripondio, un audaz y valiente caballero de las cruzadas que regresa a su reino tras casi un año de ausencia, y el cual al llegar encuentra las cosas un poco distintas, con una invasión demoníaca haciendo estragos por cada rincón de su reino. Nuestro objetivo aquí será el de encontrar 5 gemas las cuales nos permiten controlar la mente, el espacio, el tie… ah no no, perdón, sinopsis equivocada. Lo que quería decir es que debemos encontrar 5 gemas las cuales se encuentran dispersas por todo el reino, para poder así romper un sello que nos llevará a dónde se encuentra el artífice de todo esto, al cual deberemos derrotar si es que queremos traer un poco de paz a nuestras tierras.

La historia sin dudas no es el punto más fuerte de la experiencia, ya que más allá de una introducción visualmente atractiva (aunque corta, eso sí), no termina siendo demasiado atractiva, ya que se termina resumiendo en lo típico de humanos bien, demonios mal, objetivo: matar matar. Igualmente contamos con ciertos momentos en los que deberemos elegir entre dos opciones a la hora de interactuar con algún personaje, las cuales se suelen resumir en intentar arreglar un problema con palabras, o directamente a los golpes, y que tienen diversos impactos en el desarrollo de la historia, como por ejemplo poder evitar algún enfrentamiento, o incluso desbloquear el acceso a un comerciante.

PD: El personaje principal no cuenta con un nombre, ya que podremos llamarlo como nosotros queramos, así que pido disculpas por si alguno se emocionó pensando que jugaríamos con Floripondio, el caballero de las cruzadas #NoMeArrepientoDeNada.

Apartado técnico

En cuanto a este aspecto, claramente el juego no es un triple AAA, pero lo que hace o busca hacer, lo cumple con creces. En cuanto al aspecto visual nos encontramos con un juego que consigue asemejarse bastante a la estética de 8 bits de finales de los 80, y por lo mismo, logra convertirse en una experiencia que le hará brillar los ojos a cualquier jugador nostálgico(e incluso a los no tan nostálgicos). Además, los variados diseños de escenarios y enemigos ayudan a que la cosa no se sienta tan repetitiva, en especial con los jefes, los cuales sin dudas se nota que fueron hechos con mucho amor y dedicación (aunque me imagino que no es el caso dentro de la historia del juego, ya que son feos como trabajar un domingo). Añado puntos extra a este apartado por el detalle de como nuestro personaje se llena de sangre cuando es salpicado por un enemigo.

A nivel sonoro el título cuenta con el mismo amor y dedicación que en su apartado visual, con efectos y música de 8 bits excelentemente logrados, los cuales hacen que la experiencia sea aún mucho más llevadera.

Además deben saber que el juego se puede jugar con sus textos totalmente localizados al español, y que en cuanto a rendimiento nos encontramos con un producto bastante sólido el cual, a excepción de algún que otro ataque que no debería haberme alcanzado, no me dio ningún tipo de problema.

Jugabilidad

Este es un título del género metroidvania el cual como ya mencioné, intenta homenajear a los primeros juegos de la saga Castlevania, aunque en una comparación más cercana podemos ver qué es un poco más limitado de lo que uno esperaría. Los controles por su parte son sencillos, contando con un botón de ataque para dañar a los enemigos con nuestro confiable Lucero del Alba (Maza en esfera con púas, para la gente bonita), un botón de salto, uno para utilizar objetos, otro para magias, además de los gatillos y los bumpers para seleccionar hechizos o pociones. Sumado a esto, podremos protegernos de la mayor parte de ataques haciendo uso de nuestro escudo, aunque este no utiliza ningún botón: nuestro personaje se moverá siempre con el escudo delante de él, por lo que se protegerá de casi todos los ataques que estén dentro de su rango de protección, dejándonos vulnerables cada vez que utilicemos nuestro Lucero del Alba. Esto sin dudas resulta ser una mecánica útil, incluso a pesar de que en varias ocasiones terminé recibiendo daño de ataques de los cuales debería haber estado protegido, pero así y todo hubiera preferido contar con un botón dedicado a está acción, en lugar de ser una “acción automática”.

Algo que deben saber, es que tanto las pociones, como las magias y las armaduras solo podrán ser adquiridas a través de los comerciantes que encontraremos en varias secciones del mapa (las magias igualmente, también se pueden encontrar ocultas en cofres repartidos por el mundo), y a los cuales podremos comprarles utilizando las monedas que cada enemigo soltará al ser eliminado. Estos atractivos círculos de oro serán los únicos ítems que podremos conseguir durante la campaña (sin contar ítems clave), algo que en lo personal no me terminó de agradar, ya que sentí en falta esa sensación que provoca encontrar un objeto curativo cuando más lo necesitábamos, o incluso esa arma especial que estuvimos buscando durante hora y media que parecía que jamás iba a reaparecer.

Igualmente con esto no quiero decir que no existan maneras de curarnos, ya las pociones curativas y algunas magias nos ayudará con esto, e incluso podremos hacer uso de unos altares los cuales recuperarán nuestra vida y el maná con solo acercarnos, además de que funcionarán como punto de guardado, menú de mejoras e incluso como una vía rápida para escapar de las profundidades de alguna mazmorra, algo que solo dice presente en lugares muy específicos. Desgraciadamente una cosa que no dice presente, es algún sistema de viaje rápido entre puntos de guardado, lo cual si bien no resulta 100% necesario en esta experiencia, hubiera sido una opción bastante útil para navegar el mapa, en especial si es que en algún punto terminamos perdiéndonos.

El sistema de mejoras por otra parte no se complica demasiado: podremos aumentar nuestro daño, vida y capacidad mágica utilizando la experiencia obtenida al derrotar enemigos, aumentando el requisito de puntos cada vez que llevemos a cabo una mejora. Estos puntos, así como las monedas, no serán tan complicados de conseguir en dificultad casual, ya que cada vez que terminemos como carne molida, el juego nos permitirá conservar la mayor parte de esta, perdiendo un muy pequeño porcentaje cada vez. Es por esto que en lo personal recomendaría que los más veteranos traten de probar este título en dificultad clásica, la cual cuenta con una menor cantidad de puntos de guardado, una sola vida inicial (aunque podremos conseguir extras al avanzar) y no conservaremos nada de lo que hayamos ganado después del último altar tras morir.

En cuanto a enemigos, contamos con una interesante variedad, cada uno con un tipo de ataque diferente y con ganas de dejarnos como el alemán gigante de Los Cazadores del Arca Perdida, aunque esto último si bien lo logran, no es por su propio esfuerzo, sino que gracias al conjunto creado por las secciones de plataformas, las trampas y probablemente, nuestras ganas de querer avanzar rápido. Los jefes son quizás lo más decepcionante de todo, ya que mayormente no nos costará demasiado derrotarlos debido a sus claros patrones de movimiento, los cuales podremos aprender de memoria al tercer o cuarto intento.

Para finalizar, debo decir que contamos con un mundo relativamente amplio, aunque no tan complejo si lo comparamos con otros exponentes del género como Symphony of the Night. Los recorridos en general se sienten quizás más directos en comparación, además de que no cuenta con esa sensación de necesitar 1000 objetos distintos para abrir sus 2000 rutas principales y alternativas. Esto no quita que existan caminos que requieren de avanzar en el juego antes de poder ser accedidos, pero en general se siente todo más directo y por lo mismo, mucho más sencillo. Sumado a esto también debo mencionar que el mundo cuenta con un corto ciclo de día/noche, el cual agrega algunos enemigos rápidos durante la etapa nocturna, pero que honestamente no cambian demasiado la experiencia.

Duración

En cuánto a la duración, puedo confirmarles que el juego cuenta con una campaña que ronda las 6-7 horas aproximadamente, y cuya rejugabilidad dependerá primordialmente de que tanto disfruten de este género, de si quieren probar suerte en dificultad clásica, si es que se pasaron el juego en casual, e incluso si es que no lograron explorar todos los escenarios, o finalizar todas las misiones secundarias en su primer partida, ya que existen varias actividades y caminos alternos por descubrir a lo largo de todo el juego, las cuales podemos elegir completar en el momento o dejar para más tarde si es que así lo deseamos. Así y todo debo decir que no considero que este sea un título el cual merezca una segunda vuelta, pero de más está decir que aquel que desee hacerlo contará con la posibilidad de hacerlo.

Conclusión

Infernax es sin dudas un título con mucho aroma y gusto a clásico de los ‘80, el cual en el proceso parece olvidarse de que en realidad no lo es, y que podría haber hecho mucho más para destacar en los tiempos modernos. Igualmente no deja de ser un título entretenido, el cual se ve y se oye genial, y que seguramente alegre a más de un fan de los clásicos del género, en especial porque este título se encuentra actualmente disponible en Xbox Game Pass, por lo que todo aquel que cuente con una suscripción al servicio podrá probarlo sin problemas, algo perfecto en especial para los jugadores a los cuales no les atraiga tanto este tipo de juegos, ya que si bien no les recomendaría su compra directa, si les diria que le den una oportunidad a través del servicio estrella de Xbox.