Análisis de I, AI

I, AI es un Bullet Hell que promete llevarnos a una experiencia retadora y clásica a través de escenarios vistosos y renovados ¿Lo habrá conseguido?

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De nueva cuenta estoy por aquí para darles mi más sincera opinión sobre un título que adelanto desde ya, puede ser algo adictivo y muy entretenido. Son pocos los juegos que apuestan aun por un género algo de nicho como el “Bullet Hell” o la “Lluvia de balas” un género que se caracteriza por su alta dificultad, al mismo tiempo de su fórmula adictiva.

I, AI es un juego que nos trae precisamente la premisa original y sin modificaciones de un Bullet Hell; desarrollado y distribuido por Satur Entertainment para PS4, PC, Nintendo Switch y por supuesto, Xbox One.

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Apartado técnico

Se trata de un juego con un apartado gráfico algo normal, no sorprende en lo absoluto, pero en realidad es que tampoco está tan mal. Como puedes ver en las diferentes capturas o los videos, se trata de un escenario que va a apareciendo progresivamente mientras nosotros limpiamos zonas de enemigos.

No hay mucho detalle, simplemente lo necesario; tenemos el espacio de fondo y las instalaciones, los enemigos y a nuestra nave en un plano más apreciable. El juego promete ser una experiencia clásica con gráficos modernos y la verdad, es que no podría describirlo mejor.

El apartado sonoro tampoco es que esté especialmente cuidado, los efectos de sonido como los disparos o las explosiones son contundentes, aunque algo genéricos, lo mismo sucede con la música que pasa sin pena ni gloria.

Te decía que era lo correcto por que no llega a ser feo, sin embargo, si es insuficiente, claramente se pudo hacer mucho más por el apartado técnico de este título. Por cierto y está de más mencionarlo, pero el juego corre a una tasa de 60 cuadros por segundo para tener, una experiencia muy agradable aunque por otro lado, casi de obligatorio cumplimento.

Jugabilidad

I, AI cuenta con una historia principal que es mejor ni mencionar, por lo irrelevante que resulta, prácticamente debemos escapar para alcanzar la libertad y todo esto ¿de qué manera lo haremos? Exacto. Por medio de nuestra nave y repartiendo una lluvia de disparos.

Por su manera de jugar nos recuerda a títulos como el clásico Galaga, pero que no te quede ni la menor duda es mucho más que eso, como te dije anteriormente, se trata de un juego del género Bullet Hell y esto significa que nuestra pantalla se llenará rápidamente de enemigos variados, justo como de todos nuestros disparos.

Tenemos el control de una pequeña y nada sofisticada nave, al inicio será fácil, ya te lo puedes imaginar, son los niveles que servirían como un simple tutorial, pero es que, ya al pasar al tercer nivel por ejemplo, el juego da por hecho que has entendido como jugar y te comienza a poner a prueba. Cada nivel es un escenario que se divide en diferentes fases, marcadas por obstáculos como asteroides o minas y por los enemigos que van desde naves pequeñas y rápidas a estaciones con láseres destructivos.

Son muy pocos los botones que debemos usar para jugar a este título de disparos y nuestra concentración o nuestros reflejos serán nuestros mejores aliados. Desde el tercer nivel sentirás cierta curva de dificultad que aumentó sin que te pidiera permiso, precisamente el punto en el que conocerás la verdadera experiencia de un Bullet Hell.

En primer lugar, que sepas que será difícil, y morirás, y morirás. No es el Souls de los juegos de naves pero si es desafiante cuanto menos, ahora bien, la cantidad de enemigos, las balas en el entorno se verán incrementadas a lo largo de los niveles, pero, no son tan espectaculares como deberían, ya que los efectos visuales no son muchos.

Eliminando enemigos iremos consiguiendo algún tipo de material azul que deberemos de recolectar pues con el podremos mejorar nuestra nave hasta conseguir algo realmente destructivo y duradero. Como te lo imaginas si nuestro medidor de vida llega a agotarse, moriremos automáticamente y tendremos que iniciar el nivel desde el principio, hecho que, por supuesto que no te gustará, e incluso te molestará. Justo aquí es que el I, AI hace algo muy inteligente y es que desde el tercer nivel tendremos que acudir a la rejugabilidad, aportando un interesante toque Rogue-like.

Al nosotros repetir niveles anteriores conseguiremos este material azul para mejorar nuestra nave y es que esto es pieza clave para poder seguir avanzando en los niveles. Las mejoras no son muy costosas o difíciles de conseguir y van desde mejorar nuestros cañones principales y la armadura, hasta conseguir acciones especiales que nos ayuden con enemigos mucho más grandes y fuertes.

Se trata de un título que te obliga a terminarlo y esto es así por su formula adictiva, es muy entretenido y después de poco tiempo terminarás enganchado, querrás tener una nave increíble en apenas unos niveles y cuando tengas las mejoras necesarias, seguirás avanzando con la campaña, una decisión en el diseño que sinceramente me parece muy inteligente y bien ejecutada.

Aunque se que no he dicho algo muy negativo del título, lo tiene y precisamente lo tiene en la jugabilidad, sucede que es desafiante si, pero no imposible como otros exponentes del género, solamente digo que una vez tengas las mejoras correctas, la experiencia de nuevo normaliza la dificultad, además de eso, los niveles tampoco son especialmente largos.

Pero sobre todo y aunque deberemos recordar no era el objetivo de los desarrolladores, es una fórmula clásica que no implementa absolutamente nada nuevo. Como te lo dije no es malo ya que desde un principio sabemos a que nos estamos enfrentando, pero, bueno, si los desarrolladores hubieran querido hacer algo más ambicioso, eso por supuesto que se hubiera agradecido.

Duración

I, AI es un título que durará tal vez un fin de semana bien dedicado o una semana con sesiones más cortas. No es largo y su arco principal se divide en 20 niveles, pero es por su formula y jugabilidad que nos obliga a rejugar niveles que aumenta su duración indefinidamente.

Conclusión

Se trata de un juego que claramente te recomiendo, es muy entretenido y lo poco o mucho que puedas disfrutar con él, es tiempo en el que te divertirás y frustrarás a partes iguales.

No innova en ninguno de sus aspectos y eso le pasa cierta factura, no hay gráficos espectaculares que claramente pudo haberlos, no hay una historia con mayor profundidad que claramente pudo haberla y sobre todo, no hay mejoras jugables sobre la fórmula ya conocida que claramente pudo haberlas.

Sin embargo, que sepas que debes de estar consciente de esto, el juego nunca promete nada que no haya dicho y es por eso que son graves las faltas, pero perdonables.

Cómpralo si es que quieres un juego para disfrutar después de alguna sesión larga jugando al Warzone o al AAA que tengas en ese momento. Es desafiante y sobre todo, divertido.