Foregone nos pone en el rol de una supersoldado en su cruzada por enmendar viejos errores y salvar a su tierra de un mal devastador. Metroidvania del bueno en este título de Big Blue Bubble.
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La tierra de Calagan fue arrasada por la guerra y consumida por un mal mayor. el Tormento, que corrompe todo lo que toca. La salvación está en las manos de los Inquisidores, un grupo de supersoldados que tienen la misión de restablecer el orden en la región. Por supuesto que la única inquisidora que existe es nuestra protagonista por lo que todo dependerá de ti pura y exclusivamente.
Foregone nos encargará la tarea de acabar con varios proyectos de Inquisidores que salieron mal y que se nos presentarán en modo de jefes cuando lleguemos al final de ciertas etapas no muy largas. Un amplio arsenal de armas (extremadamente innovadoras en muchos casos) nos facilitarán la ardua tarea de recorrer los escenarios cargados de enemigos y llegar finalmente a enfrentar al último proyecto, Zeus, que estimo dejará a más de uno asombrado por el giro narrativo que adquiere la historia en este punto. Sígueme a Calagan, hay muchas cosas que hacer en Foregone, y espero que tengas energía suficiente para ellas.
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Apartado técnico
Big Blue Bubble se tomó un trabajo minucioso para hacer del arte de este juego un trabajo estupendo con todas las letras. Cada escenario tiene una estética particular realizada en pixels modernos pero con una calidad para sacarse el sombrero. Los detalles de los efectos de la guerra o los ambientes naturales no dejan de maravillar fase tras fase desde el comienzo mismo del título, aunque hay que destacar que los efectos del agua se llevan el premio mayor. Desde los fondos de cada etapa hasta el diseño de nuestro personaje y de los enemigos que nos acechan, todo se siente vivo. Incluso en algunos movimientos que podremos notar en 3D, me encontré recordando a Flashback, aquél mítico juego que a pesar de ser ya un tanto viejuno (sin contar con la discutible remasterización) se mantiene como uno de los juegos que mejores animaciones en pixeles he visto.
El arte visual dejó la vara muy alta para el aspecto sonoro que si bien no sobresale, tampoco nos queda debiendo nada. Un poco más de fuerza o contundencia en los golpes o una variedad un poco mayor en los sonidos de los disparos, tanto propios como ajenos, quizás hubiese logrado una inmersión mayor pero tampoco es que sean malos, que no se malentienda. La banda sonora va a quedar resonando en tu cabeza luego de terminados los niveles pero no de mala forma ya que no desentona para nada con la temática de este metrodivania.
Si bien este tipo de juegos en general no suelen estar acompañados de una historia muy extensa, Foregone nos va relatando la historia de ese mundo tan particular, de sus protagonistas y de su triste desenlace por medio de registros en libros que iremos encontrando repartidos en los escenarios. Es por eso y principalmente por el giro en la historia que veremos justo antes de llegar al jefe final, que aquellos que no dominen el inglés estarán muy contentos al saber que el juego está localizado al español de España al completo en lo que a texto se refiere (las voces en inglés están muy bien logradas) y con un trabajo muy digno por parte de los encargados de esta tarea.
Jugabilidad
Foregone reúne todos los elementos esenciales y típicos de un buen metroidvania, con la proyección de poder aprender nuevas habilidades conforme avanzamos. A medida que nos adentremos en los sinuosos caminos de Calagan aprenderemos a hacer una especie de dash aéreo muy típico en la saga Megaman, a treparnos a las paredes y dar un salto en típica vibra Ninja Gaiden, incluso podremos romper el suelo con un golpe. Todas esas cualidades nos harán llegar a otras etapas de los escenarios para abrirnos camino y a ellas se sumarán habilidades adicionales que podremos equipar y variar a voluntad como lanzar un rayo devastador, curar nuestra salud, crear un campo de fuerza que nos protegerá por unos segundos, etc.
Además de los ingredientes clásicos, el título de Big Blue Bubble incluye características típicas de Demon/Dark Souls, Hollow Knight o Dead Cells pero en su medida justa, es decir, no querrás romper la pantalla de tu TV cada 15 minutos. La curva de dificultad en el título es exponencial y justa, y te dejará adaptarte bien avanzando con cierta soltura por los escenarios. Esto no quiere decir que no vais a morir, porque lo harás y varias veces abandonando todas las monedas y la experiencia que tengamos acumulada hasta ese punto sin gastar. Claro que esto no es imposible de recuperar a través de dos variantes: recorrer todo el escenario hasta llegar al lugar de nuestra muerte o bien hacer un trato en uno de los puntos de avanzada que tendremos en el juego con uno de los personajes que nos devolverá la mitad de oro y experiencia perdidas sin hacer ningún esfuerzo.
En esos mismos puntos de avanzada podremos mejorar nuestras armas y nuestras habilidades hablando con dos de los personajes que allí se encuentran para ayudarnos. Aquí vemos otra ventaja: las mejoras de las armas y de las habilidades no son para nada imposibles y sí muy necesarias para causar más daños nuestros enemigos y que podamos avanzar más rápidamente en los escenarios.
Nuestro arsenal se basará en armas de corto y largo alcance que podremos mejorar a piaccere. Dentro de este catálogo tendremos espadas cortas, espadas largas, lanzas, arcos cortos, arcos largos escopetas, metrallas y mí favorita: gunchuks, una especie de nunchakus combinados con pistolas. Espero que la persona que diseñó ese concepto haya recibido un buen aumento. Todas las armas tienen un cierto nivel que va desde lo básico a lo legendario, y podremos hacernos con ellas simplemente derrotando a nuestros enemigos. Lo mismo sucede con los amuletos que nos otorgarán algunos beneficios adicionales o las armaduras que podremos también equipar.
Las habilidades especiales que tengamos seleccionadas y las municiones de cualquier de las armas de largo alcance se recargan golpeando a los enemigos, algo muy similar a lo que que ocurre en Hollow Knight por ejemplo.
Duración
Foregone no es un juego excesivamente extenso pero está bien lejos de quedarse corto. Unas 7 horas bastarán para terminarlo, incluso con buena parte de los secretos descubiertos pero esto no es todo. Una vez terminado el juego tendremos acceso al “Nuevo Juego +” en dónde podremos volver a jugar la aventura con las habilidades aumentadas que hayamos conseguido en nuestro juego original y enemigos más difíciles. La posibilidad de volver a empezar con todo nuestro equipamiento nos permitirá alcanzar áreas que antes no habíamos podido explorar para así conseguir nuevas habilidades.
Otro de los factores que suman a la rejugabilidad es el final del título. Una vez derrotado el jefe final deberemos tomar una decisión que cambiará el desenlace de la historia y que, créanme, vale la pena ver el resultado de las dos elecciones.
Conclusión
Foregone no es un juego innovador en ningún aspecto, pero lo que toma de otros videojuegos lo toma bien y hace que cada minuto que pasemos al mando de la Inquisidora se disfrute mucho. La combinación de la jugabilidad, la historia, los gráficos y el sonido convierten a este título de Big Blue Bubble en un juego que indudablemente los amantes de los metroidvania van a adorar desde el minuto cero. Lamentablemente, quizás por el momento en que llegó, pase desapercibido para muchos, pero si leísteis hasta aquí y sois amantes de este género, no se lo piensen ni un segundo, Foregone os encantará.
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