Analizamos Eiyuden Chronicles: Rising, una acertada introducción con una acción apasionante que sienta las bases de lo que está por llegar.
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En los últimos años, no han sido pocas las obras lúdicas que han apelado a la nostalgia para llegarnos directamente al corazón. Al fin y al cabo, como jugadores, sentimos cierto anhelo por un momento, por una situación o por un acontecimiento ya pasado, sobre todo ante cualquier producto cultural. En otras palabras, la nostalgia vende de todo y se ha convertido en un inagotable filón que nos impulsa a gastar todos nuestros ahorros. Si bien, también es un arma de doble filo que, igual que consigue enamorarnos, nos puede hacer detestar una obra.
Por supuesto, las siglas J-RPG no son precisamente ajenas a esta suerte de fenómeno mental que nos dice que cualquier tiempo pasado fue mejor, especialmente si ponemos nuestras miras en una estela de éxito que encontró su continuidad durante varias generaciones. Por desgracia, la decadencia del desarrollo japonés implicó que, hace unos diez años aproximadamente, entrase en una crisis creativa. Desde entonces, muchas compañías han tratado de recuperar el brío que el género había perdido de un tiempo a esta parte, donde se pueden descifrar varias producciones que han allanado el camino hacia la remontada.
Los JRPG casi con mejor salud que nunca
Ahora, si miramos el catálogo reciente, tenemos muchos motivos para alegrarnos, con varios títulos que nos han vendido la idea de una mirada al pasado del género y otros tantos con la suficiente capacidad de renovación que han incorporado nuevas mecánicas de combate que buscan renovar los pilares del fascinante genio del J-RPG japonés. Llueve a gusto de todos.
Por suerte, desarrolladoras como NatsumeAtari tienen mucho de lo que enorgullecerse con Eiyuden Chronicles: Rising, el sucesor espiritual del gran clásico de la primera PlayStation: Suikoden, y en especial el segundo episodio. Lanzado en 1998, el RPG de Konami se caracterizaba desde el principio por su atmósfera triste y pesada. De hecho, en función de las acciones de los jugadores, su conclusión podría llegar a ser totalmente trágica. El éxito en todas las facetas de la epopeya de Konami Computer Entertainment les llevó a coronar un cénit imaginario que pocas veces ha sido rebasado, ni por ellos mismos, ni por el resto de desarrolladores.
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Tal es el efecto de Suikoden que propuestas como la que protagonizan estas líneas son harto necesarias. A este respecto, combinando una aventura apasionante a través de unas ruinas ancestrales con la historia del resurgimiento de una ciudad de sus cenizas.
Apartado técnico
Combinando sprites con elementos poligonales y efectos modernos para crear un juego único en lo visual y tremendamente atractivo que nos recuerda enormemente a muchos JRPG de la época de los 16 bits, Eiyuden Chronicles: Rising sigue la misma estela de títulos como Octopath Traveller o Triangle Strategy. Una estela (en perfecto castellano) que recurre a una original estética que ha sido bautizada como “HD-2D” y que cuenta con multitud de referencias pictóricas, culturales y arquitectónicas. De esta forma, consigue trazar el camino de la vasta representación cultural en el videojuego de NatsumeAtari.
En otras palabras, Eiyuden Chronicles: Rising enamorará a los veteranos del videojuego que vivieron grandes aventuras en consolas como Super Nintendo, pero también agradará a aquellos jugadores que deseen adentrarse en este género.
Jugabilidad
Cuando el entorno es una amenaza constante, Eiyuden Chronicles: Rising viste sus mejores galas. Y lo hace mientras recorremos un sinfín de escenarios que a pesar de aportar su granito de arena son, valga la redundancia, el escenario perfecto para ofrecernos 30 años de apreciación retrospectiva.
Es más que evidente que todos tenemos capacidades que son positivas y otras que probablemente no lo son tanto. Y precisamente es por eso que tenemos que aceptarlas, ya que eso supone algo más profundo que comprender y podremos asimilar de una forma más objetiva que se trata de algo natural. Eiyuden Chronicles: Rising valora nuestras fortalezas y debilidades mediante un sistema de combate en tiempo real que responde a las debilidades y resistencias de los enemigos, y que están relacionadas con las habilidades que hacen únicos a los personajes que conforman esta aventura.
Trata de evitar la sensación de angustia y ansiedad en el fragor de cada combate, ya que, sin conocimientos previos sobre el uso y manejo de las habilidades, es imposible que pongamos a prueba nuestra efectividad. En pocas palabras, es una obra que invita a usar la cabeza antes de subirse a una moto desbocada.
Así resurgieron de sus cenizas
Todos los medios durante siglos han tratado de mirar a la realidad que nos rodea. Realismo significa que las imágenes por ordenador, los movimientos y las formas no tienen nada que ofrecer; nada que añadir al mundo de la experiencia diaria. Pero más allá de la realidad están las interpretaciones personales del mundo. Los nuevos desarrollos abren la posibilidad de crear mundos en los que la interpretación y la imaginación tienen lugar.
Es algo que vemos en el juego que protagoniza estas líneas, cuando nos planteamos sus relaciones con la realidad física, sus espacios, sus estructuras, etc… Es decir, nos preguntamos qué ocurre cuando lo real se hace virtual, dado que se ha logrado diseñar un mundo que se asemeja a la realidad, con calles, casas y ceremonias que permiten a los jugadores identificarse con su papel social en el mundo. Dicho de otra manera, Eiyuden Chronicles: Rising es algo más que una aventura sencilla amparada en el género de los action RPG.
Una aventura en la que el trabajo de campo que desempeñamos (misiones de recadero) durante las primeras horas nos brinda la oportunidad de entender que nuestras nociones de la realidad muchas veces resultan ser absurdamente estrechas, y es el ejercicio etnográfico una oportunidad para expandir las percepciones que adquirimos del mundo, y de esa manera, enriquecer nuestras habilidades.
CJ y compañía nos muestra esa posibilidad que ofrece el trabajo de campo, al mostrarnos que muchas veces las apreciaciones de nuestra realidad inmediata están sesgadas por el desconocimiento por no atrevernos a salir y superar nuestros prejuicios como sujetos de conocimiento de una cultura.
Duración
El diseño es una de las grandes disciplinas del desarrollo del videojuego. Es tan abarcadora que es fácil perderse en ella. Con el diseño de misiones sucede igual. No todas pueden ser iguales porque el jugador se aburriría, pero tampoco pueden ser cada una única, porque eso involucraría crear mecánicas o elementos muy específicos de un solo uso.
De todos los tipos de misiones el más fácil de implementar y a la vez el más odiado son las misiones de recadero, puesto que el objetivo es el de buscar a X o a Y. Sobre el papel, no suenan tan mal, pero al final te hacen sentir como un recadero si se abusa de ellas. Por desgracia, Eiyuden Chronicles: Rising ordena tareas bastante monótonas, especialmente durante las primeras horas, y aunque pasados los primeros compases (en torno a 5-6 horas), la aventura de marras va adquiriendo otro cariz, el jugador debe poner de su parte para ver todo el potencial que intenta ofrecer juego. Un juego que puede alargarse más allá de las 20 horas.
Conclusión
La responsabilidad de presentar una obra, recomendarla, resumirla y presentarla como algo útil o necesario, es muy grande para todo prologuista. Demanda una actitud mental altamente positiva que lo conduzca a circunscribirse dentro de los límites señalados por los cánones para cumplir con ese gratificante, aunque no siempre fácil cometido.
Un prólogo debe ser, al mismo tiempo, una breve síntesis de la obra, una sincera crítica no detallada del contenido que refleje la personalidad y estilo del autor. Muchas veces se puede correr el riesgo de escribir un nuevo capítulo e introducirlo como parte de la propia obra. Por otro lado, el riesgo también es permanente al prolongar de manera superficial e irresponsable halagando, más que analizando la obra. En este sentido, Eiyuden Chronicles: Rising brinda una acertada introducción, presentando una historia original con una acción apasionante y sentando las bases de la historia principal que veremos en algún momento del 2023: Eiyuden Chronicle: Hundred Heroes.
*Agradecemos a 505 Games el material proporcionado para poder realizar este análisis.