La difícil vida de una ardilla y todo lo que conlleva, representado en un juego hecho para divertirnos en grande.
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La principal fuente de inspiración de los videojuegos proviene de ideas tan surrealistas que, en muchas ocasiones, dudamos de que el resultado pueda ser tan bueno como la idea misma. Esto suele suceder a menudo, y, en muchas ocasiones, la sorpresa está a la vuelta de la esquina.
En este caso, tenemos un juego que, a primera vista, presenta a un personaje que, en principio, no parecería dar mucho de sí. Nos referimos a Squirrel with a Gun, nada más y nada menos que una ardilla con una pistola. Podríamos imaginar a una ardilla recorriendo mundos y salvando su hogar en un estilo de plataformas, pero no es así; en esta oportunidad nos encontramos con un héroe muy diferente de lo habitual.
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Cuando crees haberlo visto todo, aparece una ardilla armada hasta los dientes - ¡Comparte!
Apartado técnico
Estamos ante un juego poco común y bastante interesante. No hablamos de un título que vaya a romper esquemas o convenciones ya conocidas, al menos desde el apartado técnico, pero sí es un juego atrevido.
Squirrel with a Gun recuerda en cierta medida a otros juegos como Goat Simulator, donde un animal es el protagonista y se ve envuelto en una trama bastante exótica, por así decirlo.
En este sentido, estamos ante un juego que luce bien. Al menos en nuestras primeras impresiones, se siente llamativo a la vista, con un diseño único del personaje, que se asemeja casi a su contraparte real, aunque de forma exagerada para dar cabida a todo lo que el juego nos mostrará más adelante.
Nos encontramos en un mundo que pretende ser un reflejo de una posible realidad, con casas, personas, vehículos y estructuras bastante logradas. Aunque no es un portento gráfico, tiene un aspecto visual bastante decente, lo cual ya suma puntos al juego.
Los entornos son realistas, con detalles propios de la vida cotidiana. Sin embargo, nada más comenzar la aventura, uno se da cuenta de las físicas excéntricas del juego, así como del comportamiento peculiar de los NPCs, lo cual es completamente intencionado y va acorde con lo que ofrece el título.
Así llegamos a un punto de inflexión: aunque ciertos elementos nos dan la impresión de estar en un mundo humano normal, todo esto se ve afectado en momentos, con un rendimiento que puede desentonar. Esto incluye errores como caídas repentinas de FPS o incluso atravesar el suelo, lo cual no es lo habitual.
Además, en ciertos momentos, la partida puede cerrarse inesperadamente, obligándonos a retomar una tarea o actividad desde el principio. Es cierto que esto juega en contra del título, pero, en fin, no es algo grave y la diversión está garantizada.
En cuanto al sonido y la banda sonora, es bastante llamativa. En los momentos de enfrentamiento, se activa una música que tiende a repetirse constantemente; es pegajosa, pero tras varias repeticiones puede resultar algo cansina. El juego cuenta con textos en español, por lo que no tendrás problemas para comprender tu misión y seguir esta alocada aventura.
Existen fallos técnicos que podrían mejorar con futuras actualizaciones - ¡Comparte!
En definitiva, puedes hacerte una idea de lo que el juego tiene para ofrecer. Aunque cuenta con errores técnicos bastante notables, que afectan al resultado final, sigue siendo una buena forma de divertirse con situaciones disparatadas en cada rincón.
Jugabilidad
No hay nada más extraño que un juego como el que estamos analizando. Puede parecer inverosímil tener como protagonista a una ardilla, pero, aunque parezca sorprendente, no es la primera vez que un juego nos pone en la piel de un animal peculiar. Basta recordar Goat Simulator, que, pese a su premisa absurda, es un juego lleno de diversión. Lo mismo ocurre con Squirrel with a Gun.
Al comenzar nuestra aventura, somos una pequeña ardilla que, por accidente, acaba en un lugar y momento equivocados. Como buena amante de las bellotas, al ver una en un lugar específico, decide ir a por ella. Grave error, ya que esto desencadenará los acontecimientos posteriores.
Tras hacernos con esta bellota especial, aparecen unos agentes similares a los hombres de negro, o los famosos agentes Smith de Matrix, que harán todo lo posible por atraparnos. Es entonces, por un golpe del destino, que nos hacemos con una pistola para enfrentar nuestras primeras amenazas.
¡Agentes Smith en este juego, qué locura! - ¡Comparte!
Así damos nuestros primeros pasos, descubriendo que podemos llevar un arma y dispararla. Sin embargo, el cargador se vacía rápidamente y tendremos que buscar munición, que se encuentra en diferentes lugares del escenario.
Además, podemos saltar y movernos como una ardilla. Los movimientos del personaje pueden parecer algo irregulares y toscos al principio, pero es parte de su encanto. Al fin y al cabo, las ardillas son impredecibles, rápidas y un tanto nerviosas.
Tras acostumbrarnos a los controles, algo que sucede en los primeros minutos, aprenderemos otras habilidades, como apuntar, recargar, saltar e incluso aprovechar el impulso de los disparos, que nos permite realizar saltos dobles o llegar más lejos gracias a este efecto.
El objetivo del juego es claro: eliminar a estos agentes que intentan acabar con nosotros, mientras recogemos bellotas y desbloqueamos nuevas zonas del mapa. No es un mundo abierto, sino que está limitado a determinadas áreas con objetivos específicos en cada una de ellas.
Cada escenario cuenta con una serie de objetos para recolectar, lo cual nos permite avanzar y desbloquear nuevas zonas. Además, encontramos nuevas armas, desde escopetas hasta ametralladoras y revólveres, ampliando nuestras opciones.
Nuestro pequeño personaje también puede mejorar en ciertas estadísticas, lo que nos permitirá tener más vida o realizar ataques finales, que varían en función del arma que llevemos, y añadirán un toque espectacular a nuestros remates.
No puedo dejar de mencionar que podremos adquirir o desbloquear vestimentas, que le darán un aspecto cómico a nuestro personaje, además de ofrecer algunas cualidades adicionales. En conjunto, el juego es divertido y agradable. Sin embargo, puede volverse algo repetitivo tras realizar el mismo conjunto de tareas para avanzar.
Los jefes son muy buenos, aunque hay pocos - ¡Comparte!
Los enemigos comunes son repetitivos, algo evidente desde el inicio. Sin embargo, los jefes se llevan la gloria, ya que los combates son intensos y entretenidos, aunque lamentablemente hay pocos, dejando una sensación agridulce. Estos enfrentamientos son divertidos y, a veces, desafiantes.
No debemos ser demasiado exigentes con un juego que se toma las cosas a la ligera y no pretende ser serio. Al final, nos ofrece una experiencia divertida, que es lo que buscamos como jugadores: sentarnos y pasar un buen rato, por lo que cumple su propósito.
Duración
La diversión tiene un inicio y un final, y es inevitable hablar de la duración de un juego. Aquí es donde nos centramos en Squirrel with a Gun. Es un título que ofrece mucha diversión, pero que, desafortunadamente, puede resultar algo corto.
En cuanto a la duración, el juego puede llevarnos más de 6 horas, dependiendo de cuánto queramos explorar. Tiene una buena cantidad de coleccionables distribuidos por el escenario, además de un modo foto para capturar momentos extravagantes.
A pesar de ser un juego corto, ofrece una buena cantidad de coleccionables - ¡Comparte!
Aunque es un juego breve, es muy entretenido y tiene cosas por hacer. No es especialmente difícil, por lo que podrías terminarlo y no sentir ganas de volver, ya que su atractivo podría diluirse debido a la repetición. Al final, dependerá de cada jugador.
Conclusión
Siempre es bueno probar juegos nuevos y diferentes. No todo se trata de historias complejas o mecánicas elaboradas. A veces, como jugadores, solo queremos coger el mando y dejarnos llevar por la experiencia. Squirrel with a Gun encaja perfectamente en esta premisa.
Este título no pretende ser ambicioso ni impresionar con un despliegue gráfico impresionante. Por el contrario, es una propuesta sencilla que nos ofrece lo que buscamos: diversión. Momentos frenéticos, locos y exagerados, simplemente para pasarlo bien, que es de lo que tratan los videojuegos.
El juego tiene sus virtudes, siempre y cuando se le perdonen ciertas carencias que ya hemos mencionado. Al final, ofrece una experiencia directa y divertida, poniéndonos en la piel de una pequeña ardilla que no tiene la culpa de las situaciones en las que se ve envuelta.
*Gracias a Maximum Entertainment por proporcionar el código para realizar este análisis del juego.
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Historia65/100
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Jugabilidad y diversión85/100
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Apartado técnico65/100
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Sonido70/100
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Duración65/100
Lo bueno
- Alocado e irreverente
- Ser una adorable y extravagante ardilla
- La diversión es lo que nos hace seguir jugando
- Tiene esa esencia de lo que fue en su momento Goat Simulator
Lo malo
- Son contados los jefes
- Es corto y de eso no hay la menor duda
- Algunas mecánicas pudieron ser más pulidas
- Errores técnicos que pueden romper el ritmo
- Puede sentirse repetitivo luego de varios minutos