Análisis VISCO Collection – Un nuevo paseo por los salones de recreativas

VISCO Collection nos ofrece volver a vivir siete grandes exponentes de la época dorada de las recreativas.

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Siempre nos encanta regresar a los salones de recreativas y aunque esto no sea posible en la actualidad sin una máquina del tiempo que nos lleve a los 80 o 90, todavía podemos disfrutar de grandes clásicos, olvidados o no, de otras eras en formato virtual.

Ya hemos tenido grandes recopilaciones de gigantes como Capcom con su Beat ’em up Bundle, los dos Arcade Stadium y Breakers Collection no hace mucho, por citar algunas. De hecho, fue la propia QuByte, la editora brasileña, una de las más grandes de esa región del mundo la que revivió la saga Breakers y la que se anima ahora a traer de la mano de Pixelheart siete títulos de Visco que es muy probable que hayan pasado desapercibidos en los salones de recreativas en su momento, pero bien merecen una segunda oportunidad.

Puede que haya nombres de desarrolladores como Capcom, Konami, SNK, que sean muy reconocibles en estos tiempos por los jugadores, Visco Corporation quizás no suene tanto, pero fue una desarrolladora también oriunda de Japón que lanzó varios juegos en NES, Nintendo 64 y Neo Geo, tanto en recreativas como en la consola de sobremesa. En la actualidad, la empresa sigue existiendo, pero ha mutado su mercado y se ha dedicado exclusivamente a máquinas tragaperras para casinos y otros establecimientos de apuestas.

Esta colección incluye siete títulos de NeoGeo: Andro Dunos, Bang Bead, Captain Tomaday, FlipShop, Ganryu, Goal! Goal! Goal!, y Neo DriftOut. Una oferta muy variada de juegos para abarcar una amplia cantidad de paladares.

Acompáñame a dar un paseo por estos salones que hace rato nos abandonaron en la realidad pero nunca en los rincones más entrañables de nuestros recuerdos. No hace falta que traigas monedas, la casa invita, ya gastaste suficientes en su día.

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Apartado técnico

La presentación del título respeta las convenciones ya establecidas en títulos como los Capcom Arcade Stadiums ya mencionados, con una pantalla de selección de las recreativas dentro del propio mueble de la máquina, algo correcto que no sorprende y no se siente tan vivo como en la producción de Capcom pero que tiene ciertos detalles que se agradecen.

Lamentablemente, la interfaz está solamente en inglés, y si bien no tiene demasiado contenido para ser localizada, no hubiese estado mal llevarla, al menos, al español y al portugués para adaptarlo a distintos mercados de forma correcta. Una omisión que llama la atención teniendo en cuenta el origen de la editora, una que siempre tuvo muy en cuenta a sus coterráneos.

A nivel gráfico y sonoro no hay mucho para decir ya que cada juego tiene sus propias características audiovisuales que, convengamos, datan de la década de los 90, sin embargo la adaptación a las nuevas dimensiones de pantallas, los filtros y otras características modernas están muy bien logradas y son diferentes para cada uno de los títulos.

Adicionalmente, los siete juegos gozan de funciones modernas, como la posibilidad de guardar y cargar partidas en cada juego y hasta la posibilidad de disfrutar de partidas online, una característica que al momento de escribir estas líneas, no está disponible ya que el juego no ha llegado aún al mercado.

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Jugabilidad

Andro Dunos

Uno de los shoot ’em ups del compilado, vio la luz originalmente en 1992 y llegó a la Neo Geo MVS (es decir, la recreativa) y la Neo Geo AES (la consola que todos queríamos y era imposible comprar). Este título es especial para Visco porque fue el primero en llegar a los dos sistemas de Neo Geo, algo que repetiría un tiempo más tarde con Breakers.

El juego, de endiablada dificultad como es normal en el género, permite controlar a dos naves: la Yellow Cherry y la Red Fox, que son las últimas esperanzas de la humanidad para destruir a las fuerzas alienígenas que invaden el planeta.

A nivel gráfico, el juego se destaca por tener unos sprites coloridos y bastante detallados, con un sonido respetable y comandos bastante sencillos de aprender, aunque estimo que no va a quedar grabado en tu memoria como un título en especial de este género que suele ser bastante de nicho y tiende a repetirse en demasía.

Bang Bead

Un juego que te recordará muchísimo a Wind Jammers y que salió originalmente en el año 2000. Aquí podremos elegir entre 9 personajes para disputar una suerte de tejo con pelota en donde la idea es eliminar todos los puntos de defensa del oponente a pelotazos y anotar un gol. Supergolpes mediante, la tarea no es sencilla y cada encuentro se disputa al mejor de dos asaltos.

El título utiliza todo el escenario para combinar los rebotes en ataque y defensa. Cuesta dominarlo pero es muy gratificante alzarse con la gloria. Si títulos como Wind Jammers son lo tuyo, esta producción se ganará un lugar en tu biblioteca de juegos casi de inmediato.

Captain Tomaday

Me es difícil calcular la cantidad de drogas duras que deben haber consumido los responsables del desarrollo de este título. Se trata de un shoot ’em up en donde el jugador controla una especie de tomate que se desplaza volando horizontalmente y se enfrenta a distintos tipos de enemigos que parecen sacados de la mente de un adicto al ácido lisérgico. La particularidad del juego es que el personaje principal no dispara ni balas, ni lásers, ni nada que se le parezca, sino que cada uno de los botones controla uno de los puños del protagonista. Si se mantiene presionado solo un botón, el otro puño crece para poder ejecutar un superpoder que limpia la pantalla de enemigos.

El título es bastante interesante a nivel gráfico y, sin duda, toda una curiosidad.

FlipShop

La precuela de Bang Bead. El título, lanzado en 1998, tiene las mismas características que su predecesor, aunque cuenta con menos personajes y estos todos portan algún tipo de escudo por razones desconocidas. Tal como su secuela, toda una pasada para jugar con amigos, que rápidamente se pueden convertir en enemigos después de unas cuantas partidas.

Ganryu

Un juego que data de 1998 y que bebe mucho, muchísimo de títulos como Shinobi o Stryder. El jugador puede controlar a Musashi o a Suzume en cinco fases que llevarán al personaje principal a luchar con ninjas, monstruos y otros enemigos en escenarios de acción constante y plataformeo experto para rescatar a Otsu.

Este es uno de los mejores juegos de la recopilación, que no conocía de su época y que no tiene nada que envidiarle a los juego en los que se inspira, y teniendo en cuenta los nombres, entenderán que lo que digo es todo un elogio.

Goal! Goal! Goal!

Un título ideal para los fans del deporte rey que añoran la simpleza de los juegos de fútbol de antaño, que lejos estaban de querer ser simuladores. En Goal! Goal! Goal! podremos barrernos sin piedad a lo Eric Cantona en su mejor momento, o sacarnos de encima a un rival con todo el cuerpo.

Las fintas estarán a la orden del día en cualquiera de las 28 selecciones que están a disposición para ganar este campeonato mundial. Un título muy parecido al primer Super Sidekicks, con menos animaciones, pero un gran juego en toda regla.

Neo DriftOut

Para los amantes de los coches no podía faltar este Neo Drifout, un título de rally con vista isométrica lanzado en 1996 que recuerda mucho al de la gallega Gaelco conocido como World Rally. El título incluye varios coches japoneses, cada uno con sus características, para encarar las pistas más difíciles en todos los continentes.

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Duración

Teniendo en cuenta que se trata de una recopilación de juegos de recreativas, hay que tener en cuenta que cada uno de los títulos fue concebido para partidas no muy largas, lo cuál crea un equilibrio muy interesante entre la dificultad y la no repetición de las producciones que forman parte de esta entrega, con la dosis perfecta en cada apartado.

Conclusión

Una excelente oportunidad para disfrutar de siete juegos clásicos sin salir de tu Xbox, ni buscar emuladores, roms y otras herramientas. La recopilación es buena, con una selección variada para atraer a distinto tipo de jugadores, aunque podría haber diferido un poco más en algunos casos como FlipShop y Bang Bead, o incluir más juegos, aunque la relación precio/producto creo que está a favor del jugador.

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