El juego de fútbol más Arcade que no esperábamos llega en unas semanas y nosotros ya lo hemos podido probar.
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Quién nos iba a decir que el estudio detrás de uno de los últimos Indies que más han destacado, Sifu, nos iba a sorprender de esta manera con su siguiente juego. Y es que el estudio se ha salido por la tangente y nos presenta Rematch, un nuevo juego de fútbol árcade al más puro estilo Rocket League.
Un juego del que bebe parte de su esencia (sin coches, claro) con una propuesta muy sencilla de aprender pero difícil de dominar. Con un enfoque en el multijugador, promete ser una de las propuestas del año cuando aterrice el 19 de junio en Xbox Series, PC y PS5. Y lo decimos con conocimiento de causa, ya que hemos podido probarlo durante varios días en su beta cerrada y te vamos a desgranar nuestras primeras impresiones.
Probamos Rematch y esto es lo mejor del mismo
- Rematch es un juego de fútbol árcade donde nos enfrentaremos a partidos de 3, 4 o 5 jugadores. La diferencia entre ellos radica en tener mayor libertad de movimiento o especializarte más en una posición. Para nuestro gusto, el 3vs3 es más divertido, ya que le da ese toque de caos a cada partido que se pierde al tener más jugadores en campo.
- Porque en modos con menos jugadores tienes que estar más dispuesto a cambiar de jugador de campo a portero y viceversa. El cambio es rápido y sutil, basta con ser el último jugador de tu equipo y estar dentro del área. Con eso, nos convertiremos en el portero, con toda la responsabilidad que conlleva.
En cuanto al sistema de juego, al ser de estilo Arcade, no tenemos más de cinco botones con los que hacemos todo. Una rutina muy sencilla de aprender, ya que la esencia es la misma de cualquier otro juego de futbol: pasar, regatear, correr y chutar a puerta. Pero aunque la esencia sea la misma, cualquier jugador, por veterano que sea en juegos deportivos de fútbol, tendrá que aprender de cero.
Porque su sencillez es solo la primera capa. Dominarlo es todo un desafío, ya que, por ejemplo, no valdrá solo con pulsar el botón de chutar, sino que tendremos que apuntar a portería. Claro, si vamos corriendo hacia ella será sencillo, pero si el balón nos viene de una banda centrada o de un pase… girar la cámara a la vez que chutamos no es sencillo. Pero la curva de aprendizaje es bastante buena y tras un par de partidos consigues empezar a comprender los conceptos básicos. Será fundamental jugar los totorales, muy completos y profundos, que te introducen de lleno en la jugabilidad de Rematch.
Los partidos son pura adrenalina. Rápidos, no duran más de seis minutos (si no hay tiempo e añadido) y salvo goleada por una gran descompensación de nivel, los partidos son muy ajustados. Las alternativas en el marcador son comunes y es raro que un partido acabe con una goleada. Todo nos da partidos muy divertidos y frenéticos.
Editor y más allá
Más allá de la jugabilidad, donde echamos de menos algún modo de juego más (veremos si de lanzamiento o posteriormente llegan más), el juego se centra en la personalización. Los jugadores son todos iguales, con las mismas stats. No hay roles de portero o delantero, por lo que todos parten de la misma base, y la diferencia radica en la personalización. El editor es amplio y nos dejará elegir multitud de opciones. Por ejemplo, el género, tipo de cabello y voz, entre otros aspectos. Todo ello nos permitirá optar por un personaje más normal y discreto o por otro que llame la atención en cada partido.
Rematch es una propuesta curiosa y un soplo de aire fresco dentro del género. Alejado de la seriedad de otros juegos de fútbol, propone un estilo sencillo y desenfadado, pero que tiene una gran capa de jugabilidad que es difícil de dominar.
Con un aspecto visual bastante colorido y diferente, promete ser una de las apuestas de este año. Tiene cosas que mejorar (como un mejor matchmaking o la inclusión de poder remapear los botones), pero solo probamos una versión preliminar y son cosas sencillas de introducir.
Con todo, estamos ante una propuesta diferente y divertida que debemos seguirle la pista.
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