Con la idea de hacer que los jugadores mantengan el interés en sus juegos durante más tiempo, Ubisoft abandonará las experiencias con final definido.
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A todas luces se perciben los cambios en Ubisoft, una de las compañías más potentes en la industria del videojuego. Atrás queda su mala fama de lanzar títulos descontroladamente, plagados de bugs, y con agresivas campañas de marketing que vendían experiencias que finalmente no resultaban ser tan excitantes. A veces hace falta mirar atrás para volver a hacerlo hacia adelante, y eso fue lo que hicieron con Assassin’s Creed: Origins, un juego excelente y sobretodo enorme, cuyo éxito fue producto de realizar las cosas con calma y dedicación.
De las bases sentadas en Egipto nos beneficiaremos en Grecia a partir del 5 de octubre con Assassin’s Creed: Odyssey, que contará con un mapa más amplio, y muchas más opciones de juego y desarrollo, alargando aún más su duración, y por tanto su experiencia. Lionel Raynaud, Vicepresidente Creativo de Ubisoft Montréal, explicó en el blog oficial de Ubisoft que el objetivo prioritario de la compañía es hacer que los jugadores mantengan el interés por sus títulos de forma prolongada, alejándose de las experiencias con un final definido para ofrecer títulos basados en narrativas con contextos más amplios, es decir, abandonar el concepto del juego tradicional para centrarse en él como servicio. El estudio tiene la sensación de que los jugadores sienten que una vez terminado el juego no tienen nada más que hacer, y eso es precisamente lo que desean cambiar, creando experiencias ricas y asentadas que inviten a los usuarios a seguir, pase el tiempo que pase desde su finalización.
Este cambio lo impulsó la voluntad de no ofrecer experiencias finitas. La idea era la existencia de un conflicto y una solución, después todo había terminado, el malo había muerto. Creamos un gran némesis y el objetivo del juego es eliminarlo o liberar el país, lo hemos hecho algunas veces en nuestro juegos. Pero cuando has cumplido la misión debes dejar el juego porque no hay nada más que hacer. El objetivo es romper esto y hacer que seas el héroe de una región o población muchas veces, no solo una. Si te deshaces del dictador pasará algo más en el mundo y tendrás un nuevo objetivo.
Ubisoft lleva ya unos años viendo que es más rentable y da mejor imagen crear juegos y mantenerlos en el tiempo a través de actualizaciones y pases de temporada, que proporcionar nuevas entregas quemando sus franquicias. Para los jugadores también, ya que es mejor comprar un juego y más adelante un pase de temporada, que dos juegos dentro de un mismo año. Lo ha hecho con The Division, For Honor, Rainbow Six, Far Cry o Ghost Recon Wildlands, sin embargo, su niño mimado siempre será Assassin’s Creed, así que esperemos que la próxima entrega sea al menos tan buena como la anterior.