De estar en lo más alto, a lo más bajo. Justin Roiland es sin duda un tipo que ha causado una interesante ruptura en la animación en los últimos años con la llegada de la asombrosa serie Rick & Morty. El derroche de imaginación y el humor constante y sin límites es algo que se ha ganado millones de seguidores y que quiso plasmar también en el videojuego a través de Squanch Games, cuyo último título, High On Life, ha pegado fuerte en todas las plataformas.
Pero parece que la denuncia por malos tratos domésticos que recibió en 2020 ha salido a la luz cuando se le ha podido ver a Roiland asistiendo a ese juicio. La polémica ha sido tal, que ha salpicado con la misma fuerza a todos los productos en los que Roiland ha puesto la mano, provocando que el mismo renunciase tanto a su trabajo en la productora de Rick & Morty, como en Squanch Games, la cual ha comunicado que el pasado 16 de enero recibió la renuncia por parte de Justin.
— Squanch Games (@SquanchGames) January 25, 2023
High On Life queda manchado injustamente por uno de sus creadores
Y es que el espíritu de Roiland impregnaba todo lo que tocaba, casi como si un sello de calidad se tratase. Por eso, a pesar de las palabras de Squanch Games en el que aseguran que continuarán mejorando High On Life y desarrollando juegos, nos costaría mucho ver que alcanzan ese mismo nivel de irreverencia. Por supuesto, que los asuntos personales de Roiland no tienen nada que ver con el devenir de un estudio, pero hace bien en apartarse para que su relación no influya en la opinión pública, que debería estar dirigida solamente al cómico.
Estaremos atentos a nuevas noticias sobre Squanch Games y las posibles actualizaciones de High On Life, que rompió records con Xbox Game Pass en su lanzamiento, al calificarse directamente como el mejor estreno en el servicio de todo 2022.
