Microsoft podría ofrecer a la CMA un acuerdo para que la saga de Call of Duty perdure 10 años más en todas las plataformas.
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Ante las quejas desmedidas de Sony acerca de la adquisición de Activision Blizzard por parte de Microsoft, la CMA, regulador Europeo, ha decidido analizar a detalle la negociación con motivo de buscar evidencias de un posible monopolio. Debido a esto, Phil Spencer ya habría ofrecido a PlayStation un acuerdo para que Call of Duty, juego de la discordia, se mantenga por varios años; acuerdo que obviamente rechazaron.
Lo que parece que Microsoft hará es volver a la carga para demostrar a los reguladores que su intención no es monopolizar la industria, sino expandirla. Con este movimiento, lo que se espera lograr es que los reguladores como la CMA o la FTC redirijan sus miradas a lo que sería un modelo de competencia justa.
Sony, como líder de la industria, dice que está preocupado por Call of Duty, pero hemos dicho que estamos comprometidos a hacer que el mismo juego esté disponible el mismo día tanto en Xbox como en PlayStation”, dijo un portavoz de Microsoft a Reuters. “Queremos que la gente tenga más acceso a los juegos, no menos
Microsoft continúa insistiendo sobre Call of Duty y su modelo multiplataforma
Parece que estos argumentos no son suficientes, y es que parece que a Sony le molesta que Microsoft tenga una oferta digital más destacada, dejando de lado a los competidores por no haberse adaptado a las nuevas tendencias. Con todo esto, parece que la estrategia de Microsoft será demostrar qué hará con Call of Duty y si su modelo de negocio, dando libertad a Sony de seguir lucrándose de un tercero como Activision, más no ofreciendo mejores precios en sus juegos.
Ahora bien, tal y como lo propuso Microsoft, Sony podría ofrecer servicios de calidad sin necesidad de un gran esfuerzo orientándose en sus videojuegos exclusivos. De esta manera, las respuestas ante la negociación parecen dividirse por dos caminos, siendo el victimismo de Sony y la resiliencia de Microsoft.
Falta por verse cuál será la respuesta de los reguladores, pero a la espera de un comunicado oficial de la CMA, todo indica a que el trato contará con más problemas a futuro que retrasaran la compra hasta marzo del próximo año.