Vivimos en los tiempos de la hipercomunicación y de los memes, en los que es fácil convertirse en objeto de burla y chanza del mundo entero. Seamos francos, el cine nunca se ha tomado demasiado en serio las adaptaciones de videojuegos, y sobre todo en los noventa se premiaba o castigaba a los jugadores con auténticas astracanadas como la película de Super Mario Brothers (!?), o el Street Fighter de Jean Claude Van Dame y una despistada Kylie Minogue. Hasta ahora Sonic parecía haberse librado.
La mascota de Sonic ha disfrutado sobre todo de adaptaciones para la pequeña pantalla, desde la original de animación tradicional que todos recordaremos, o las más modernas en 3D y que están más apegadas al lore de la franquicia. Hasta que llegó el momento de que Sonic tuviera su película, y casi desde el principio la cosa hizo levantar las cejas de impresión a casi todo el mundo.
Sonic volverá rediseñado en febrero de 2020
Lo primero que pudimos ver de la adaptación del erizo azul fue una silueta que parecía adivinar algo así como un Sonic hiper realista, que se confirmó con el primer trailer y fotos promocionales. Al instante, la película se convirtió en el hazmerreir de unas redes que no existían cuando John Leguizamo encarnase a Luigi, en su lucha junto a Bob Hoskins, contra unos lagartos microcéfalos. Hace unas semanas la productora del filme se rindió, y prometió rediseñar a Sonic para su debut cinematográfico.
Aunque en un primer momento la fecha de estreno de la película, fijada en noviembre de este año, no se alteró, hace un rato hemos sabido que la misma se pospone hasta el 14 febrero de 2017 de forma oficial. Veremos cual es el resultado de dicho rediseño, pero los que esperábamos ver un auténtico festival de la barrabasada, con un Jim Carrey que, a no ser que sea también modificado digitalmente, prometía darnos verdadera fantasía, no estamos de enhorabuena.
