El futuro de la monetización en los juegos
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Reflexionamos hoy sobre el futuro de los videojuegos en los nuevos formatos que han visto la luz en medios digitales. ¿Cual será el modelo de monetización más eficiente y beneficioso para el usuario?
En ocasiones un servidor se pregunta sobre el futuro real sobre los videojuegos en cuanto a modelos de negocio. Me refiero a cómo vamos a concebir los juegos dentro de poco tiempo; y es que hay varios modelos de negocio que están pegando muy fuerte y penalizan seriamente a juegos de alto presupuesto convencionales.
No hace mucho era complicado aceptar que el formato digital estaría entre nosotros y que llegaría para quedarse por mucho tiempo. De hecho, ha sido en esta última generación de consolas cuando el gran público ha empezado a aceptar sus bondades. Lo mismo podríamos decir del modelo free to play que a día de hoy sigue siendo un camino muy explotable y desconocido para algunas empresas del sector.
Porque el modelo free to play se segmenta en varias ramas y cada una lleva a cabo una práctica diferente. Algunos juegos son bastante intrusivos con sus pagos y prácticamente obligan a pagar para que puedas seguir jugando; mientras tanto, otros se limitan a ofrecerte ventajas sin interferir demasiado en tu aventura. Encontrar el equilibrio entre ambas versiones de free top lay es complicado y de hecho pocos juegos se acogen a la segunda opción.
A veces, el hecho de ofrecerte ventajas pagando entorpece mucho a aquellos jugadores que no quieren desembolsar dinero por artículos extra. Siempre encontrarás lugares o jugadores que no podrás superar por lo que lo ideal sería por ejemplo limitar por zonas este tipo de juegos y así no mezclar a los jugadores Premium de los jugadores convencionales. De esta manera incentivas al que paga y no penalizas al que no lo hace, es más, le estarías dando un motivo real para que quiera adquirir la versión completa.
Pero el free to play no es el único modelo de negocio que aflora hoy día, tenemos un género muy efervescente como el de los juegos independientes. En teoría muchos de estos juegos nacen bajo la premisa de ser desarrollados con un modesto presupuesto y un equipo reducido de personas; esto permite que el precio del juego no sea excesivamente elevado y a su vez no les limitan los plazos estrictos de entrega por lo que suelen ofrecer propuestas jugables más arriesgadas.
Lo triste es que no siempre se cumplen estas premisas y hay juegos bastante bien escondidos bajo la piel de “independiente” que realmente no lo son. Lo preocupante no es que provengan de una gran compañía como por ejemplo el majestuoso Child Of Light del que ya os hicimos un completo análisis; lo malo es que a veces llegan con un precio inflado o no cumplen unas mínimas expectativas.
Pero sin duda, el principal problema que existe en facilitar la llegada de este tipo de juegos es el incremento de juegos de baja calidad. Ahora las nuevas consolas están en horas bajas respecto a catálogo y necesitan crecer rápidamente, este tipo de juegos son el caldo perfecto para ello pero tienen el agravante de que por volumen es complicado encontrar juegos con la calidad esperada.
Así pues estas dos grandes opciones pueden suponer una brecha tanto positiva como negativa en cuanto al futuro de los videojuegos y pese a los beneficios que pudieran aportar también hay que mirar los puntos negativos que no son precisamente pocos.
¿Qué opináis? ¿Free to plays o juegos independientes? ¿Quién tiene la batalla ganada?