Descubre en nuestro análisis por qué es uno de los juegos del año y probablemente el mejor Battlefield hasta la fecha.
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Pues ya tenemos aquí el primero de los 3 shooters en primera persona que van a dominar el mercado estas navidades, junto a Titanfall 2 y a Call of Duty: Infinite Warfare, este año si que tenemos una auténtica bestia de juego dirigido por la desarrolladora que ya se puede decir que es sinónimo de garantía de DICE. Desde principios de año llevamos con los rumores de que tendríamos un Battlefield, pero a pesar de que todo indicaba que se volvería a las guerras del pasado, no fue hasta una exclusiva presentación dedicada sólo al título, la que finalmente revelaría que no solo volvían al pasado, si no que el conflicto esta vez se enmarcaba en la Primera Guerra Mundial, algo casi desconocido hasta ahora en el mundo de los shooters multijugador.
Y no podían haber acertado mejor. Después de unos años de saturación de 2ª Guerra mundial (Brothers in Arms, Call of Duty, Battlefield 1942 y derivados), pasaron a la época actual y futura, pero igualmente tanta nueva tecnología, empezaba a agobiar al personal: los robots, drones y pistolas futuristas, comenzaban a aparecer con tanta frecuencia en las franquicias anuales, que daba la sensación que se copiaban incluso entre ellas mismas.
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Hablando de la temática en la que se engloba, la Primera Guerra Mundial fué una auténtica locura en relación a los números. Prácticamente todas las potencias mundiales participaron en ella, aportando un total de 70 millones de soldados. Aunque se llamó mundial, prácticamente se desarrolló en su totalidad en Europa y tenía dos grandes bandos diferenciados: La Triple Alianza, que comprendía el Imperio Alemán y el Austro-Húngaro y El Triple Entente, formado por Francia, Rusia y Reino Unido. Tanto un bando como otro arrastraron a múltiples aliados ajenos a la guerra, y por ejemplo, el Imperio Otomano apoyaba a los primeros y Estados Unidos, Australia y prácticamente todas las colonias de Reino Unido apoyaban al Triple Entente.
La conocida como Gran Guerra, o la “Guerra que acabaría con todas las guerras“, duró casi 4 años, desde el 1914 hasta el 1918 y los casi 9 millones de muertos cambiaron totalmente la historia de la humanidad. Alejándonos un poco de la historia puramente dicha, parece que Battlefield 1 coge prestadas algunas concesiones para situar armamento y vehículos que no eran muy comunes en la época, sobre todo, modelos que se generaron a causa de aquella guerra, que sirvió como ejemplo de que crear nuevas armas cada vez más mortíferas era algo necesario. La potencia de fuego daba la victoria.
El apartado multijugador masivo con hasta 64 jugadores en la misma partida es la gran baza de Battlefield, y de hecho, para los que busquen una campaña completa, bien hilada y desarrollada, no se van la van a encontrar aquí. Sin embargo, no decimos que las misiones del modo historia sean malas, todo lo contrario, son 6 misiones situadas en varios de los frentes del conflicto llamadas “Historias de guerra”, que nos presentan situaciones absolutamente espectaculares y a pesar de ser cortas, nos muestran historias muy intensas, bien hiladas y que muestran el aspecto más triste, crudo y amargo de la guerra, queriendo hacer un claro énfasis en que la fatalidad de la misma es superior a la espectacularidad que proclama Electronics Arts en sus trailers.
En definitiva, el modo campaña se podría resumir como una excelente introducción al conflicto y una manera de situar al jugador, de hacerle entender que esta guerra no tenía nada de divertido y espectacular, a pesar del gran alarde técnico que pasaremos a nombraros a continuación.
Apartado Técnico
A pesar de lo fácil que debería ser empezar a hablar del tremendo apartado artístico usado en el juego, el detalle de los escenarios, las construcciones, los tonos de color tristes, siempre con esa sensación de estar en el barro, es evidente que el culpable de todo esto es el increíble resultado del motor gráfico Frostbite en esta generación. A pesar de su pequeña pelea con Xbox One y los 720p, esta vez, al fin se ha conseguido un excelente equilibrio entre imágenes por segundo, resolución y calidad.
Hablando de números y con el respaldo de los análisis técnicos de Digital Foundry, el juego usa resolución dinámica que oscila entre los 720p y los 900p que nos alejan de Battlefield 4 y los bordes de sierra, todo a 60 fps, tanto en campaña como en el multijugador, donde si que rasca mucho bajando incluso a menos de 40 fps en las partidas masivas con grandes efectos en pantalla. La lluvia, humo, explosiones, todo al mismo tiempo, es algo que puede suceder con relativa facilidad. El escenario puede cambiar totalmente y la mayoría de edificios ir derrumbándose conforme les vayan cayendo los explosivos. En estos casos la jugabilidad se resiente un poco, pero la espectacularidad nunca decae.
Si juegas con amigos en patrulla, el modo Operaciones te dejará boquiabierto - ¡Comparte!
Esta puesta en escena nos deja lo que tranquilamente podemos decir que es uno de los mejores juegos gráficamente de la consola y donde nos comenzamos a preguntar si realmente llegaron al límite de Xbox One y hasta donde llegaremos. Cuando pensamos que Star Wars: Battlefront era la panacea gráfica de los shooters, llega Battlefield 1 y nos revienta el concepto. ¿Quién quiere una Scorpio con maravillas como esta? Bueno, lo mismo para que carguen más rápido los mapas, porque le falta muy poco para llegar a niveles ReCore pre-parche, comprensible, pero inaceptable de igual manera.
En el tema sonido que siempre ponemos en segundo plano con respecto a los gráficos, Battlefield 1 raya la perfección. Se nos ponen los pelos de punta al recordar como el disparo de un simple fusil se extiende en los sitios abiertos y te estalla en los oidos en interiores. Incluso cuando pasamos por las trincheras, oiremos los chasquidos de nuestro soldado pasando por los charcos. Algunas situaciones que proporciona usar esta ambientación en relación al apartado sonoro nos han dado momentazos como el sonido que hace el avión al hacer el picado, la reverberación metálica al disparar desde cañones fijos…
Y todo esto sin hablar de la banda sonora que provoca que se te pongan los pelos de punta literalmente hablando. La música de la campaña de Lawrence de Arabia, es sencillamente sublime, pero si nos fijamos en ese momento paloma, o en la épica aguantando el fuerte en la misión de El Mensajero, vemos la calidad que mantiene durante cualquiera de las historias. Si a eso le sumamos que de vez en cuando nos meten el clásico fragmento “Battlefield” con el cha-chan-chan-chan-nan-nan, pues nos tienen ganado el corazoncito.
Jugabilidad
Para esta nueva generación de jugadores, un FPS con rifles de cerrojo y ametralladoras en las que tardas más en recargar una vez que en vaciar 3 cargadores, puede resultar algo extraño. Por eso, a pesar de esta antigua tecnología, no hay que temer nada. DICE ha conseguido mantener un ritmo rápido de juego, a veces incluso por encima del de Battlefield 4, que pongamos que es la mejor referencia, porque Hardline, siendo de la franquicia, era de Visceral Games y se aleja más del prototipo que ha perfeccionado el estudio creador del Battlefield original.
Battlefield 1 es una bestia técnica, arrasa con todos sus rivales - ¡Comparte!
Lo primero que nos llamaba la atención de un conflicto tan antiguo es la capacidad de las armas usadas, incluso en el primer trailer no se veían muchas armas automáticas y parecía que la bayoneta tendría más protagonismo, pero finalmente no es así. Aparte de la campaña, en la que cada historia nos armará dependiendo de cada situación y las armas que encontraremos son acordes al bando al que pertenezcamos, en cualquiera de los modos multijugador empezaremos con una selección de armas automáticas que hace que el concepto de guerra antigua, lo tiremos por encima del hombre para olvidarse.
Con 4 clases seleccionables: Asalto, Médico, Apoyo y Explorador, solamente tendremos 4 armas principales disponibles desde el principio. Excepto el francotirador, el resto no conseguirá armas tipo cerrojo hasta niveles más avanzados, un tema que a alguien con experiencia le escama bastante. Luchar con la oportunidad que da un rifle de cerrojo que da para una sola bala cada 2 segundos si hubiera sido un desafío real acorde a la nula tecnología de entonces. Por suerte, el gunplay resulta igualmente divertido, cada vez que acertemos al rival, la mirilla nos lo indicará junto a un texto con el daño que hemos hecho, un detalle en el que pocos se fijan y hay que darle mucha más importancia de la que tiene.
Nuestro soldado podrá ir obteniendo experiencia que nos hará subir un nivel general y otro nivel para cada clase, que nos irá desbloqueando más armas. Pero no solo hace falta desbloquearla, aquí es distinto, tendremos que comprarla con moneda del juego que obtendremos al subir de nivel. Y hay que tener cuidado, porque es bastante escasa y cuesta bastante ganar experiencia. Os aseguramos que tendréis que echar muchas horas o ser muy buen jugador para poder avanzar. Es muy recomendable centrarse en subir una clase en concreto. Resulta en parte satisfactorio ver como no se sube tan fácilmente como en otros juegos, lo que hace que aprecies mucho más ese dinero obtenido.
Aparte, seguiremos con los famosos Battlepacks, que nos ofrecerán posibilidad de obtener nuevas skins para las armas o incluso potenciadores, al más puro estilo Call of Duty (¿hemos dicho Call of Duty 2 veces en la review de Battlefield? Pues sí), incluso con varios niveles, en plan raro, especial y legendario. Estos Battlepacks se obtendrán por conseguir determinados logros en cada batalla y si estamos entre los elegidos, se añadirán a nuestra cuenta. Si queremos comprarlos nosotros mismos, tendremos que hacerlos con Fragmentos, otra moneda algo más especial. Aunque nos haya pillado algo de imprevisto, no vemos que haya manera de comprar Fragmentos al estilo “micropagos”, lo cual no descartamos y la única manera de obtenerlos será desmontando lo que hayamos ganado en los Battlepacks. Esto nos hará ser mucho más selectivos.
Por lo demás, en el modo Conquista o Dominación tendremos posibilidad de coger vehículos, también identificativos de la saga, aunque menos variados que en anteriores entregas, primero por la época y segundo porque la disponibilidad parece estar mucho más limitada, por una sencilla razón: son extremadamente poderosos y desequilibrantes. Coger un tanque e ir a alguno de los puntos de captura es sencillamente sinónimo de éxito. Por algo muy simple, lo que si que no había entonces eran lanzacohetes. Siguiendo con los vehículos, los aviones cuestan manejarlos mucho, aunque si que están mucho más equilibrados que en anteriores entregas y para limitar el respawn de estos, si pillamos libre alguno, se nos permitirá elegir el tipo que queremos sacar.
Hay 3 tipos de vehículos: Transporte rápido (caballo, moto), Transporte pesado (tanque ligero, tanque pesado, Camión de transporte) y Aéreo (Caza, Bombardero y Avión de ataque). Estos slots solo se podrán usar desde la base o en el caso de grandes mapas, desde algunas estaciones avanzadas, que deberemos controlar previamente. Y si en Battlefield 4 teníamos los Levolution que cambiaban por completo el mapa, en esta ocasión tendremos como evento especial los Behemoth, vehículos gigantescos que aparecerán para ayudar al equipo que se encuentre en ese momento en desventaja.
Coge tu fusil y apúntate en la guerra más cruenta y espectacular del momento - ¡Comparte!
Dependiendo del mapa en el que nos encontremos aparecerá un Dirigible gigantesco armado con múltiples torretas, un Acorazado de batalla que descargará una tormenta de mortero sobre el campo de batalla o un Tren blindado con una capacidad de destrucción que da miedo. Serán dificiles de derribar, pero conviene que el equipo contrario se centre en evitarlos o eliminarlos lo antes posible, para que esa ventaja no permita desviarse del auténtico objetivo, dominar los puntos de control.
Duración
Lamentablemente, como hemos plasmado al principio del análisis, si estáis buscando sólo un modo campaña, probablemente Battlefield 1 no sea vuestro juego. Es demasiado corta, y en un asalto de 5 horas o menos, os la podréis terminar en dificultad normal. De todas formas, su calidad está fuera de toda duda, y el contenido multijugador es el fuerte del título. Pero esperad, todavía queda una importante opción que los jugadores más solitarios disfrutarán especialmente: El modo Operaciones.
En este modo, que en realidad es multijugador, nos llevará de manera guiada a cada uno de los conflictos representados por cada uno de los mapas disponibles del modo Asalto, que ya aprovecharemos para explicar diciendo que es de los más entretenidos, ya que tendremos que ir asegurando puntos de control para seguir avanzando y que el enemigo retroceda hasta llegar su base. En Operaciones, el modo Asalto tendrá una pequeña introducción narrada que nos pondrá en situación, poniéndonos en un lado del conflicto, cuya conclusión dependerá de nuestro resultado en la batalla, todo esto lo envuelve de un halo de “modo campaña encubierto” que bien podrían haber usado y ahorrarse las Historias de Guerra. Menos mal que al final tenemos todo.
Si sumamos todos los modos multijugador existentes: Conquista, Dominación, Asalto, Palomas de Guerra y TCT por equipos, tenemos variedad de sobra para entretenernos en combate. Mención especial a este último, que es el modo más clásico y nos aisla en mapas más reducidos donde el equipo que más muertes consiga, gana. Normalmente es el modo que acaba siendo el oficial en las competiciones.
Conclusión
Battlefield 1 es la recreación de guerra más espectacular que hemos visto hasta la fecha. En eso no tiene discusión. Es una bestia técnica a todos los niveles, rayando la excelencia en prácticamente todos los apartados posibles. Se podría decir que ahora mismo no hay mejor juego para recomendar estas navidades, aunque para gustos están los colores y si no te apetece coger armas de cerrojo o hacerte muchos kilómetros corriendo por grandes escenarios, piénsatelo bien.
Xbox One por fin parece tirar bien con Frostbite, y la verdad es que no encontramos mejor título para que empezara a hacerlo. Para comprar el juego, no hace falta que te leas esta review. Estamos seguros que a cualquier amigo al que le preguntes no dudará en decirte que estás tardando en comprártelo. Sin duda, es de los que te dejan la boca abierta.
¿Quién quiere una Scorpio con maravillas como ésta? - ¡Comparte!
La manufactura de un producto de estas características se agradece, con una traducción completa al castellano, incluso de los gritos que oiremos en el multijugador. Esa sensación de que te has gastado 70€ que realmente lo merecen, es muy válida para Battlefield 1. De hecho, nos ponemos a pensar en las polémicas con los DLC’s y descargables cuando miramos un producto de esta índole. Con tanto contenido disponible a tan alto nivel, ¿realmente merece la pena seguir ampliándolo?
Espero que no obliguen a los jugadores a optar por el Pase Premium, que cuesta lo mismo que el juego y que no recomendamos a nadie. Con el extenso catálogo actual y lo que tiene que venir, invertir en un juego sin saber si te va a satisfacer es tirar el dinero.
Pros | Contras |
* Técnicamente excelente en Gráficos y sonido | * Largos tiempos de carga |
* Derrocha espectacularidad por los cuatro costados | * Nos hemos encontrado más bug de los que deberíamos |
* La Primera Guerra mundial al fin tiene un juego de referencia AAA | * Los frames se resienten muchísimo en las escenas cargadas de acción |
* Online estable a 64 jugadores con buen Matchmaking | * 12 mapas multijugador pueden quedarse cortos muy pronto |
*Gracias a Electronics Arts España por habernos proporcionado el material para la review.