Analizamos Two Point Hospital, un título de gestión de hospitales que coge la herencia de Theme Hospital y nos ofrece una experiencia completa y muy divertida.
Echa un vistazo a estos otros análisis
- Análisis de Call of Duty: Black Ops 6 – El mejor título de la franquicia en años
- Análisis de Sword Art Online Fractured Daydream
- Análisis de Empire of the Ants – Estrategia en el peligroso mundo de los insectos
No te pierdas nada y ¡Síguenos en Google News! |
En 1997 llegó al mercado Theme Hospital, juego de gestión económica que generó gran éxito en su momento. Este juego nos llevaba a controlar varios hospitales en los que debíamos de completar una serie de objetivos cada vez más exigentes para poder seguir avanzando y tomar el control de otros centros más grandes y con metas más ambiciosas aún si cabe. Además de esto una de sus mejores bazas era sin duda el gran sentido del humor absurdo que tiene el juego, toda una maravilla.
Tras este juego no tuvimos más noticias de una secuela, pero por suerte hoy tenemos disponible en nuestras Xbox One Two Point Hospital, juego desarrollado por Two Point Studios y publicado por Sega. Este fantástico juego coge esta herencia de Theme Hospital y nos ofrece una experiencia de gestión que, pese a lo que pueda parecer, es muy exigente. ¿Cumplirá las expectativas generadas esté Two Point Hospital? Continúa leyendo para descubrirlo.
Suscríbete al canal de GX en Youtube
Apartado técnico
Gráficamente Two Point Hospital puede parecer un tanto simplón, pero lo cierto es que funciona muy bien y nos trasmite una nostalgia enorme. Todos sus personajes están modelados con un estilo de plastilina que puede recordar en más de una ocasión a los conocidos Wallace & Gromit, y aunque sin demasiado nivel de detalle las habitaciones y demás tipos de salas lucen de una manera mucho más que correcta.
El juego mantiene una tasa de fps constante que no sufre ningún tipo de caída, ni siquiera en aquellas ocasiones en las que tomemos el control de los hospitales más grande y los tengamos llenos de pacientes. Hablando de pacientes aquí es donde más variedad de modelados podremos ver, y es que cada enfermedad inventada tendrá sus propias características visuales y de movimiento, lo que es de agradecer.
Como veremos más adelante no todos los hospitales son iguales, y es que el Two Point County es enorme. Tendremos zonas de montaña y de playa muy bien diferenciadas, y como es lógico habrá dolencias y enfermos propios de cada lugar. El juego tiene muy pocos tiempos de carga, y es que solo nos presentará un tiempo de carga un poco extenso al empezar cada hospital pero luego no tendremos ninguno más hasta que volvamos a cambiar de hospital.
En lo que respecta al apartado sonoro, Two Point Hospital viene con una serie de melodías que actúan más como música de fondo que otra cosa. Estas son un poco anecdóticas, y es que es un elemento que pasa totalmente desapercibido. Todas las voces que escucharemos en el juego están en inglés, aunque el título llega totalmente traducido al español, y lo hace de manera sobresaliente en lo que a nombres de enfermedades y dolencias se refiere.
Jugabilidad
Antes de entrar a hablar a fondo sobre la jugabilidad de este Two Point Hospital hay que dejar una cosa muy clara: estamos ante un juego difícil. Esta aclaración es necesaria puesto que las primeras horas de juego pueden ser un tanto engañosas, y es que las podremos superar prácticamente con los ojos cerrados.
El modo en el que funciona el juego se puede resumir así: cada nivel será en si mismo un hospital diferente del resto, y tendremos que cumplir una serie de requisitos para la obtención de una estrella (de tres posibles) para tener la opción de avanzar a otro centro o de continuar en el mismo para poder cumplir más de esos objetivos. Cada estrella que obtengamos nos dará una moneda llamada kudos que nos permitirá ir desbloqueando artículos para instalar en cualquiera de nuestros hospitales.
La gestión de cada centro, una aventura
Entrando a analizar la jugabilidad más detenidamente, Two Point Hospital nos ofrece la posibilidad de controlar cada aspecto de nuestro centro. Cuando decimos cada aspecto no exageramos, y es que seremos responsables de la construcción de la estructura de nuestro hospital, recepción, salas de consulta, enfermería, salas de personal, salas de tratamientos especiales, aseos, máquinas expendedoras, máquinas de calor o frío según la necesidad… etc.
No solo de la construcción o distribución deberemos preocuparnos, y es que también podremos decorar cada sala o elegir si queremos mejorar nuestro equipamiento. Por supuesto también deberemos preocuparnos de la contratación de personal, faceta muy importante. En la mayoría de ocasiones tendremos la opción de contratar personal con más habilidades y experiencia o por el contrario hacernos con los servicios de trabajadores menos experimentados aunque mucho más económicos.
Por supuesto aquí entra en juego otro elemento esencial y que no puede faltar en un juego de gestión: el dinero. Como os hemos comentado anteriormente en las primeras fases del juego este no será un problema, y es que tendremos de sobra. Sin embargo una vez avanzamos en el condado deberemos medir muy bien nuestros gastos, y es que un paso en falso en este sentido nos puede llevar fácilmente a la bancarrota.
Deberemos controlar muy bien nuestro balance de coste/beneficios, y para ello podremos modificar una serie de parámetros. En este sentido podremos subir o bajar el precio de los tratamientos, solicitar préstamos (con varias opciones y distintos tipos de interés), despedir personal, subir el sueldo de nuestros empleados para que su moral suba, etc.
Esto puede sonar un tanto abrumador pero lo cierto es que la primera curva de dificultad del juego está muy bien introducida y desde un comienzo se irán introduciendo cada vez más mecánicas para que el jugador vaya conociendo el funcionamiento de cada sala y cada funcionalidad poco a poco. Sin embargo llegado a cierto punto de la aventura la curva de dificultad no está demasiado bien ajustada, y es que empezaremos a subir en ella saltando escalones enormes, especialmente con ciertos desafíos que deberemos cumplir de manera obligatoria.
Enfermedades y control adaptado al mando
Como no puede ser de otra manera las grandes protagonistas de este Two Point Hospital son sin duda sus enfermedades, llenas de humor absurdo y bastante originales todas. Tendremos una gran cantidad de ellas y cada una deberá se tratada de manera totalmente diferente, lo que nos obligará a estar siempre al día de salas especializadas y maquinaria.
Tendremos una enfermedad que hará a las personas creerse que son el mismísimo Freddie Mercury, otra donde en lugar de cabeza sus sufridores tendrán una bombilla o un cazo, otras donde los pacientes estarán afectados de un payasísmo extremo, y así un largo etcétera. Habrá una serie de enfermedades que nos aparecerán de manera regular en todos los hospitales, pero otras solo nos aparecerán según en la zona en la que estemos del condado. En zonas de nieve y frío veremos fracturas ocasionadas en la montaña, pero en otras de playa y calor veremos algunas más tropicales.
Como decimos será muy importante tener cada tratamiento listo cuando aparezcan pacientes con las enfermedades, pero esto no es lo único. Si el personal que trata la enfermedad no tiene la experiencia necesaria o una moral alta, si la maquinaria no está en perfecto estado o si tardamos demasiado en tratarlo el paciente puede morir, algo que será bastante común si no tenemos cuidado. Cuando esto ocurre su fantasma empezará a atormentar al hospital entero de una manera desternillante por lo que necesitaremos a nuestro propio cazafantasmas que será un bedel con esa habilidad.
En lo que se refiere al manejo del juego, Two Point Hospital es un juego que se diseño originalmente para ser controlado con un ratón, pero lo cierto es que su adaptación al mando es impecable. El manejo de la cámara, la distribución de habitaciones y mobiliario y personal está bastante bien resuelto y en ninguna ocasión hemos sentido que el control falle o parezca torpe.
En ciertas ocasiones se nos amontonarán muchas situaciones que necesiten de nuestra atención a la vez, y esto puede agobiar al jugador más inexperto. Por suerte disponemos de un selector de velocidad que nos permitirá parar la acción en cualquier momento, así como establecer velocidad lenta, normal y rápida, por lo que como decimos manejarnos por este Two Point Hospital con nuestro mando será una delicia.
Duración
Two Point Hospital es de esos juegos a los que comienzas a jugar y sin darte cuenta has estado a los mandos un par de horas. Cada hospital nos propondrá una serie de retos para obtener estrellas, y aunque no será necesario obtenerlas todas para avanzar si que será muy satisfactorio. En una partida normal donde intentemos llegar al último de los hospitales fácilmente invertiremos 35-40 horas de juego, dependiendo de nuestra pericia de gestión.
Por supuesto esta duración se refiere solo al juego base, y es que la versión que llega a Xbox One lo hace con las dos expansiones que ha recibido el título hasta la fecha: Bigfoot y Pebberley Island. Por si esto fuera poco en este mismo mes recibiremos totalmente gratis los modos Sandbox y The Superbug Initiative, por lo que estas horas se podrán multiplicar por dos muy fácil, dando lugar a un juego con el que tendremos diversión para varios meses.
Conclusión
Lo podemos decir alto y claro: Two Point Hospital es uno de los mejores juegos de gestión a los que nos hemos enfrentado. Lejos de coger la esencia de Theme Hospital y replicarla con gráficos en HD, se basa en ella para ofrecernos una experiencia totalmente nueva y que nos obligará a estar pendiente de cientos de detalles si queremos salir airosos de la gestión de cada centro.
El juego pertenece a un género que quizás puede no ser del gusto de todos, pero lo cierto es que es de esos juegos que te anima a seguir jugando y a ir superando todos los desafíos que te va poniendo en el camino. Juego totalmente recomendado, y más teniendo en cuenta que podéis disfrutar de el totalmente gratis gracias a Xbox Game Pass.
*Gracias a Cosmocover por habernos proporcionado el material para la review.