Ubisoft vuelve a traer la franquicia Ghost Recon con Breakpoint al mercado. ¿Estará el título a la altura?
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Ya hace varios años desde que pudimos probar el anterior juego de la franquicia Ghost Recon, Wildlands. En una época marcada por un gigante que cobraba fuerza en la compañía – Far Cry-, Wildlands atrajo al público con un mundo plagado de misiones en un exótico mapa y con un líder enemigo carismático. Si bien, la fórmula funcionó, Ubisoft ha querido renovar muchos de los aspectos de Tom Clancy’s Ghost Recon, no solo en el gameplay, sino en su historia y forma de contarla, así como en aspectos clave que dirigen mucho el cómo jugar al título.
Breakpoint sin duda es un punto de inflexión en la saga y en este análisis indagaremos en lo que creemos que Ghost Recon: Breakpoint nos puede aportar como juego en su conjunto, su evolución y resultado final.
Tras el ataque repentino a nuestro helicóptero, tendremos que adentrarnos en las siniestras sombras de los bosques y parajes de Auroa, con el fin de poder escapar de la isla, encontrar qué es lo que está pasando y ayudar a sus habitantes, y por si fuera poco, estaremos más solos que nunca.
Nada de carismáticos enemigos, en Breakpoint somos nosotros contra el mundo en misiones donde hasta la investigación lidiará con el curso de la historia, donde hordas y hordas de enemigos nos harán la vida imposible para conseguir su propósito. En esta ocasión, aunque vayamos bien acompañados, la guerra será difícil por todos los costados. ¿Preparados para adentrarnos? ¡Vamos allá!
Apartado Técnico
Queremos decir, antes de comenzar a analizar el juego en su apartado técnico, que llevamos probando el juego desde antes de su lanzamiento inicial, en el periodo previo. El juego se lanzó con algunos fallos importantes que quebraron la experiencia del juego, y además creemos que no hacen justicia a la finalidad del título, y no nos hemos equivocado en absoluto. Y es que semanas después y con un nuevo parche, el juego es totalmente nuevo a la experiencia que vivimos en primera instancia, que os comentaremos de igual manera para que podáis ver la evolución.
Hemos probado Ghost Recon BreakPoint en dos consolas Xbox One, en una FAT y en Xbox One S. La experiencia gráfica ha cambiado mucho entre ambas y aquí comentamos los detalles. Está claro que Breakpoint es un título exigente gráficamente; su mapa es enorme y las grandes bandejas de carga se notan indudablemente en los chunks, pero estas cargas no deberían verse reflejadas al jugador. En Xbox One FAT, sí se notan. Vemos cómo se van cargando a lo lejos las distintas partes del mapa, la distancia de carga no es la más óptima (haciendo casi imposible un juego estilo sigilo con sniper, por ejemplo). El popping y tiring están presentes en cualquiera de los elementos que conforman el mapa, incluso popping en enemigos -sí, nos han salido de la nada y en frente nuestra en alguna ocasión-. Los pixeles bastante notables en nuestro personaje, con una calidad gráfica menos comparable con otros títulos de Ubisoft de este mismo año – como The Division 2 o hasta Far Car: New Dawn-. Podemos decir que la experiencia con la Xbox One FAT no es ni de lejos la más recomendable para jugar a este Ghost Recon Breakpoint.
Dadas las circunstancias, fue momento de cambiar a Xbox One S, donde la mayoría de estos problemas se solventaron o al menos se difuminaron. El cambio entre ambas consolas es notable: el popping de personajes y enemigos desapareció, la distancia de carga es mucho más amigable y hasta gráficamente tiene un boost bastante recomendable. Es por ello, que recomendamos Breakpoint en Xbox One a partir de la gama S para disfrutar al máximo de los distintos parajes que nos ofrece, que son una auténtica joya en la que perderse.
Ubisoft ha cuidado con formalidad la forma de crear los bosques y océanos. Cada punto del mapa es un auténtico pueblo en el que recoger loot sin problema y a la vez disfrutar de tu paradisíaca aventura isleña y tropical – aunque algo movidita dadas las circunstancias-. Un trabajo de fondo en crear ese ambiente estilo australiano, con carreteras vacías que dan la sensación de estar en un auténtico apocalipsis, que de alguna manera, lo es.
Al comenzar el juego, durante la primera semana, el título lucía diferentes problemas ligados a la optimización. Cargas infinitas y bugs que han hecho en alguna ocasión imposible jugar. En una de las ocasiones, tuvimos que reiniciar una misión entera por que la IA detectó a un enemigo fuera del rango de misión como un enemigo a batir, lo que hizo imposible trasladarnos hasta allí ya que no existía. Quedarnos atascados en algún elemento del mapa, motos que desaparecen mientras la estábamos montando… ocurrió de todo que hacía que experiencia no fuese la ideal.
Como hemos comentado, Ubisoft ha querido arreglar el juego con notable resultado, y gracias a los diferentes parches, el título ya no sufre de estos problemas de optimización y estos errores desaparecieron, haciendo justicia a lo que Ubisoft quería desde el primer momento.
En cuanto al apartado sonoro, estamos posiblemente ante uno de los que más nos ha llenado en efectos de sonido. Sí hay un valle, el eco de los rifles francotirador retumban hasta darnos escalofríos. Un auténtico gustazo poder jugar con auriculares y disfrutar al máximo de las pisadas de tus compañeros, las tuyas propias y hasta del enemigo más cercano.
Jugabilidad
Como un buen Ghost Recon, la jugabilidad del título es infinita. Esta vez, más aún que la anterior ocasión, el modo RPG está mucho más marcado en el gameplay. Vamos por pasos: Desde el primer momento del juego, tendremos que ir eligiendo habilidades y desbloquearlas mediante puntos de habilidad (como ya viene siendo habitual). Estas habilidades son diversas, pero tienen cuatro focos principales: Francotirador, Pantera, Asalto y Médico de Campo. No es difícil intentar saber de qué van cada una de las clases, pero sí es cierto que cobran vital importancia, ya que según qué clase tengamos, afectará al rol que adoptaremos en el modo PvP, Ghost War, del que hablaremos un poco más adelante.
Como viene siendo habitual en los juegos de Ubisoft, el gunplay es más que agradable. Un buen shooter en tercera persona, heredado de los tantos títulos de la saga Tom Clancy’s, que sin duda su llegada a los Esports con Rainbow Six: Siege, ha hecho mella a la hora de mejorar este gunplay.
Cuando vagamos por las diferentes tierras de Auroa, no tendremos otro remedio que pararnos en las miles y miles de localizaciones que hacen que el mundo de Ghost Recon: Breakpoint esté vivo. Cuevas, grietas, ríos, pueblos enteros, torres de alta tensión, senderos, fogatas… todo puede aparecerse por delante de tu camino. Y es que dentro de Breakpoint, como viene siendo habitual en la saga, encontraremos multitud de formas de transportarnos por el mundo: motos, coches todo-terreno, barcos, helicópteros y mucho más que nos harán la vida más fácil… o más difícil. Y ahí es donde llegamos a otro punto importante a analizar: La IA.
La inteligencia artificial de los títulos de Ubisoft en los últimos años, ha dado un tremendo cambio para bien. Una IA complicada y astuta que es un reto para cualquiera de los jugadores de todo tipo que puedan pasarse por delante. ¿Qué ocurre con la IA en Ghost Recon: Breakpoint? Que abunda demasiado. Las cantidades son buenas en su justa medida, pero si estás jugando solo, la imposibilidad de dar una pequeña vuelta de reconocimiento o recorrer unos metros en la carretera se hace mella en todo el juego, a veces, lo hace asfixiante, ya que aparecen enemigos de un momento a otro con ganas de darnos fiesta. Si bien, entendemos que las grandes bases del juego como las misiones deben de estar repletas de enemigos y sus utensilios (drones inteligentes, por ejemplo), vemos innecesaria la cantidad tan enorme de enemigos que pueblan el mapa. Es por ello que los jugadores han decidido desde el comienzo, utilizar el helicóptero como método principal de transporte.
Y es que Ubisoft ha querido en este Breakpoint, intentar centrar más el juego a un gameplay transversal, entre los jugadores que prefieren disfrutar del cooperativo y los que prefieren la experiencia solo. La franquicia es conocida por su cooperativo, y entendemos que la base del juego siga siendo esa, pero, a pesar de los intentos de Ubisoft de crear un juego centrado también en Un Jugador, el objetivo no se ha visto plasmado y seguimos recomendando encarecidamente que el título se juegue con amigos, compañeros de squad o creando las squads desde el propio matchmaking del juego.
Aún así, la atmósfera que nos trae es muy atractiva para el jugador que le gusta disfrutarlo en Single Player. El añadido de los campamentos – unas fogatas que encontramos en ciertos puntos de mapa y que también nos sirven como coleccionables- hace que la experiencia Single Player sea algo más rolera, ya que nos servirá para prepararnos antes de las misiones, dándonos un boost que queramos, así como mejorar armas entre otras opciones.
Modo PvP: Ghost War
Uno de los añadidos más esperados de este Ghost Recon: Breakpoint, era su modo PvP, que ya pudimos probar en Wildlands. Podremos jugarlo desde que nos adentremos en la base de operaciones del juego -que no spoilearemos en este análisis-, y allí tendremos un mundo nuevo a nuestro alcance.
Antes de entrar en materia, hay que decir que las bases de las misiones de Breakpoint se divide en cuatro ejes importantes: las misiones de facción, las misiones de historia, los objetivos y las operaciones especiales. En el ámbito de estas operaciones especiales se encuentra el modo Ghost War. Hay que agradecer la forma en que Ubisoft ha metido este modo, y es que o ha sido a calzador. La propia historia del juego nos comenta la delicada situación de los Ghost en este título, lo que hace trascendente este modo de juego.
En resumidas cuentas, este PvP es un modo muy táctico de jugar a Ghost Recon Breakpoint. La dificultad se eleva a la enésima potencia cuando nuestros roles que hemos escogido en la partida normal, se plasman en los distintos modos de juego que ofrece.
El más jugado, sin duda, es el que debemos defender o capturar varios puntos de una base, tal cual el funcionamiento de Counter Strike. Si bien, Ubisoft ha tomado buenas referencias con Rainbow Six: Siege, es indudable que ha bebido del título a la hora de confeccionar los modos de juego, aunque distan mucho de los claustrofóbicos mapas del título de 2015 con parejes mucho más abiertos y que hacen que la experiencia luzca distinta, aunque los modos de juego sean muy parecidos.
Duración
Como siempre, Ghost Recon puede ofrecerte las horas que tú mismo quieras echarle. La mayoría de las misiones pueden realizarse tanto en cooperativo como en solitario, así que tan solo con pasarse las misiones de historia en ambos modos, ya tenemos unas 20 horas de juego.
A eso, le sumamos la cantidad infinita de loot que podemos tener si nos gusta jugar en modo coleccionista (más la que vendrá en el futuro), las diferentes localizaciones tan pequeñas que existen y que explorar, las armas exclusivas y hasta el modo PvP, y ya tenemos con nosotros un título al que le echaremos horas y horas de diversión incalculable.
Sin duda, el PvP lo hace más atractivo aún, y recordemos que vendrá más contenido al título, ya que Ubisoft tiene planes de seguir llenando de contenido al juego. Si piensas que Ghost Recon es un juego de jugar y tirar, olvídalo, es inmenso en todas sus características.
Conclusión
En definitiva, Tom Clancy’s Ghost Recon Breakpoint es un buen juego, no podemos negarlo. Su llegada fue bastante a traspies, los bugs iniciales del juego hacían imposible disfrutar de la experiencia. Si bien, hemos querido esperar a que estos bugs se arreglasen, hay ciertas cosas del título que no lo hacen perfecto ni cuanto menos.
La cantidad de cosas que hacer, la casi imposibilidad de jugarlo en Single Player, lo desequilibradas que están las misiones y un apartado técnico que es bastante mejorable, hacen de puntos flacos del título. Eso no quita los grandes puntos buenos que cuenta este Ghost Recon: Breakpoint.
Y es que por fin se han podido apartar un poco de la fórmula Far Cry, con una historia bastante potente que nos enclaustrará en una isla en la que nos sentiremos los menos poderosos del lugar, a pesar de ser Ghost. Una ambientación de lujo, con un toque RPG bastante bien logrado, con una cantidad de loot enorme – que puede a veces ser un arma de doble filo- y sin duda el modo PvP que nos mantendrá horas y horas probando las distintas partidas tácticas.
Ubisoft ha sabido con Breakpoint diferenciar una franquicia una vez más y hacerla propia.
*Gracias a Ubisoft por proporcionarnos el material para la review.