Analizamos Zapling Bygone, un título indie con mucho futuro para los amantes de los metroidvanias y para quienes recién lleguen al género.
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Es innegable que en los últimos años hemos tenido un resurgimiento de este género conocido más en tiempos modernos como “metroidvania” con grandes exponentes por doquier de algunos estudios grandes, sí, pero también con muy buenos trabajos de estudios indies que de forma positiva podría decirse que se adueñaron de este tipo de producciones para darles una impronta única.
Uno de estos casos es Zapling Bygone, cuyo nombre difícil de recordar quizás no le haga mucha justicia a un título que promete mucho. Desarrollado únicamente por Stevis Andrea en su estudio 9Finger Games, el juego se inspira claramente en títulos como Hollow Knight y nos cuenta la historia de un extraterrestre que se ve forzado a irse de su propio planeta para contener una infección que corrompe todo lo que toca, una infección que forma parte, también, de su propio organismo, por extraño que parezca.
Acompañame a utilizar los cráneos de nuestros enemigos como defensa en una linda historia que tiene condimentos de sobra para convertirse en una obra de culto para los fans de las plataformas y de la acción constante.
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Apartado técnico
Puede que inicialmente el juego parezca carecer de un aspecto gráfico logrado, pero al ver la fluidez de los movimientos del personaje con su silueta amorfa se entiende que la animación es realmente muy buena, más teniendo en cuenta que todo fue realizado por una sola persona. Con el pixel art como formato elegido, los gráficos me recordaron mucho a Carrion, un título al que en su momento destacamos justamente por este aspecto, aunque en el caso de Zapling Bygone los diseños sean un poco más simples.
De cualquier forma, abundan los detalles en expresiones pixeladas que pueden llegar a trasmitir humor o tristeza en los momentos indicados. Incluso, prestando cierta atención, veremos algunos elementos de cultura pop, como una especie de balón que se asemeja mucho a Wilson en la película “El Naufrago” de Tom Hanks. Los escenarios son bastante oscuros y transmiten esa atmosfera lúgubre, aunque están bastante vacíos en su mayoría.
En lo que a sonido se refiere, aquí sí considero que hay muchos elementos a mejorar. Las melodías de cada uno de los escenarios no transmiten mucho y los personajes no tienen voces, solo una suerte de gruñidos cuando aparecen los textos en pantalla y una estática en el caso de que los interlocutores sean robots, que me pareció bastante desacertada y cacofónica para el juego.
El título presenta poco texto en pantalla y la historia se cuenta a través de fragmentos de recuerdos y pinturas que forman páginas de cómics que nos permiten conocer el trasfondo de las historias que vemos en pantalla y algunos datos más de nuestro personaje y su origen. Lamentablemente, el juego está exclusivamente en inglés y no fue localizado a nuestro idioma.
A nivel rendimiento, Zapling Bygone se ejecuta de forma perfectamente fluida y no existen los tiempos de carga, al menos, esa fue mi experiencia con mi Xbox Series S.
Jugabilidad
Como suele suceder en estos títulos, la aventura comienza con nuestro protagonista en posesión de habilidades muy básicas como moverse saltar y golpear, pero a medida que se desarrolle la historia iremos encontrando cráneos de distintos personajes que ya han muerto, o que lo hicieron por obra y gracia nuestra, que permitirán aumentar el arsenal de movimientos que tendremos a disposición.
Sumado a esto están algunos modificadores (generalmente en lugares poco accesibles u ocultos) que permiten potenciar ciertos aspectos del alien en detrimento de otros, lo bueno es que todo se puede modificar a voluntad en altares para encarar una zona u otra.
Hallar habilidades como el doble salto, el impulso, la posibilidad de trepar por las paredes o disparar una suerte de láser no demora mucho en el título y los movimientos nos brindan la posibilidad de acceder a otras zonas que estaban vetadas anteriormente. El mapa, al que se puede acceder con el botón del menú, detalla las zonas exploradas siempre y cuando ya se haya derrotado al jefe del sector, de lo contrario solo se podrán ver los altares en donde, a cambio de una materia verde muy similar al ectoplasma que sirve como moneda para comprar en las tiendas que encontraremos esparcidas por los mapas y para llenar puntos de guardado y pozos de teletransportación.
Como dice el manual de todo lo correcto en este tipo de juegos, los controles son precisos y los comandos, fáciles de recordar con botones dedicados a salto, curar heridas, impulsarse o golpear, Zapling Bygone invita a que incluso los menos acostumbrados al género puedan disfrutar el título sin querer atravesar la TV lanzando el mando en un ataque de furia.
Aquellos que estén pensando en la dificultad del título, desde ya os digo que no estamos ante un Aeterna Noctis en ese aspecto, pero que sí nos visitará la muerte en muchísimas ocasiones.
Los jefes, aunque duros, no resultan tan frustrantes o imposibles como los que podemos encontrar en otras producciones y con unos cuántos intentos se pueden determinar sus patrones de ataque para proceder de la mejor forma, de hecho, en algunos casos no hay ni que atacarlos, solo resistir sus embates o escapar hasta que cedan.
Duración
El juego es corto, pero no un mal sentido, es decir, dura el tiempo justo para no repetirse a sí mismo y continuar entreteniendo al jugador. La aventura se puede concluir en unas 6 horas aproximadamente, diría casi 5 más si se quieren obtener todos los objetos coleccionables y las modificaciones de habilidad, que son muchas, por cierto.
Conclusión
Zapling Bygone es un título que cumple con todos los requisitos de un buen juego: es divertido, cuenta una buena historia, propone desafíos e invita a que el jugador se supere. Sin ser una revolución técnica ni deslumbrar en el aspecto gráfico, el juego de 9FingerGames acentúa aún más esa aseveración que indica que para hacer un buen juego, no hace falta una cantidad ingente de dinero.
Si eres fan de los metroidvania, ni lo pienses, este título es para ti y por el precio al que está, es un regalo. En cambio, si temes adentrarte en el género por todo lo que puedes llegar a padecer a nivel dificultad, te animo a que pruebes Zapling Bygone, que es mucho más accesible que otras producciones del mismo nivel en este aspecto.
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Aspecto técnico70/100
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Jugabilidad80/100
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Duración75/100
Lo bueno
- Se nota el cuidado de las animaciones en pixel art
- La forma en que está narrada la historia
- El juego entretiene desde el primer momento y atrapa desde ese instante
Lo malo
- El apartado sonoro
- No está localizado al español