Hablamos sobre el porqué debe ser nombrado como juego del año la nueva IP de Atlus por encima del resto de gigantes nominados.
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2024 ha sido un gran año en cuanto a lanzamiento. Algo que se demuestra en la lista de nominados al GOTY que, polémicas habituales y anuales aparte, reúnen a lo mejor de estos doce meses. Y eso que a Indiana Jones no le dio tiempo a entrar en las nominaciones.
Pero como todos los años, el debate está servido. Que si Wukong tiene menos media en Metacritic que otros juegos no nominados, el enésimo ninguneo a Xbox, que si ahora pueden entrar DLC’s… Todo un debate que arde en redes sociales y del que poco podemos añadir, salvo esperar al resultado final la próxima madrugada del 13 de diciembre en España.
Pero entre todos los nombres candidatos, el que escribe estas líneas tiene un claro favorito: Metaphor: ReFantazio. Desde que Atlus anunció esta nueva IP en internet se generó una ola de entusiasmo y curiosidad por ver que podrían crear los padres de Persona. Un nuevo equipo que quería aprovechar todo lo aprendido en la saga para crear algo nuevo y que se alejase del ambiente estudiantil. Algo más maduro.
Con todo esto sobre la mesa, Metaphor: ReFantazio llegó a nuestras consolas con unas líneas e ideas muy claras: reinventar el género de los JRPG mientras mantenía la esencia narrativa y personal de sus juegos. Algo que consiguió con creces, con un juego muy redondo que cumple todas esas promesas y mucho más, elevando de nuevo a los JRPG al olimpo gamer.
Ya solo con eso debería bastar para ser ganador del GOTY, no lo neguemos. De los nominados, el único que puedo afirmar esos conceptos es la obra de Atlus. Pero por si os sabéis a poco, tengo más argumentos a su favor.
Un mundo que invita a soñar y a explorar
Uno de los mayores logros de Atlus con su nueva IP es, sin duda, su mundo. Alejado de la modernidad actual y de los entornos más japoneses, la compañía recrea un mundo medieval único, rico en detalles y que invita a conocer más sobre él. Inspirado en la fantasía más clásica, cada región del mapa se siente única y está repleta de detalles que cuentan historias propias. La arquitectura, la flora y fauna hasta los NPC que nos encontramos en nuestro viaje tienen algo que contar. Todo ello motiva al jugador a querer seguir explorando y descubriendo todo acerca de este mundo.
Además, Metaphor: ReFantazio recompensa esa curiosidad con misiones secundarias que se alejan de lo común y plantean historias secundarias ricamente escritas o secretos que descubrir. Con todo ello y un apartado visual impresionante consigue que cada rincón del mapa se sienta vivo y significativo.
Un combate que combina lo clásico y lo moderno
La experiencia de Metaphor se sustenta principalmente en tres pilares fundamentales. El primero ya lo hemos detallado, mientras que el segundo es, sin ninguna duda, su jugabilidad, donde Atlus ha conseguido el equilibrio perfecto entre lo clásico y lo moderno. La estrategia más pura de los JRPG con la fluidez y dinamismo de títulos más actuales. Una combinación que dan como resultado una jugabilidad desafiante y muy entretenida.
Además, cuenta con el nivel de profundidad y personalización adecuada gracias a los Arquetipos, una evolución de los famosos trabajos de Dragon Quest. Un sistema de personalización que nos permite adaptar a nuestro grupo de héroes a diversas situaciones y, sobre todo, a nuestro estilo de juego. Una idea fácil de comprender, pero que dominarla nos llevará tiempo, dando una profundidad sin igual a su jugabilidad.
Y todo ello lo pondremos en práctica ante enemigos bien diseñados y equilibrados, con una variedad adecuada y, sobre todo, que presentan retos significativos. No habrá caminos fáciles, estrategias que sirvan siempre, sino que el juego nos invita a innovar y buscar la mejor manera de enfrentarse a los combates en cada momento.
Una narrativa poderosa con personajes que dejan huella
El tercer pila del que hablábamos es, sin duda, su poderosa narrativa. Porque Metaphor: ReFantazio trata temas que pocos juegos se han atrevido, como el racismo o la exclusión social. No solo es el bien contra el mal, sino la aceptación de todos por igual, dando igual tu lugar de nacimiento o posicional social. Temas que Atlus trata de una manera brillante, con mensajes cargados de significado.
Además, todo está sustentado por un grupo de personajes que dejan huella, con grandes arcos narrativos que exploran estos temas y otros como la identidad, el sacrificio o el dese de trascendencia. Según nos adentramos en sus historias personales, iremos conectando más con ellos, no solo jugablemente, sino de un modo personal, consiguiendo que nos impliquemos.
Con todo, Metaphor: ReFantazio cuenta con una de las narrativas más poderosas que recordamos, consiguiendo que la narración sea el medio de un todo.
Sin duda, 2024 presenta una lista de candidatos al GOTY impresionante y el favorito de muchos es Shadow of the Erdtree, el DLC de Elden Ring. Y nadie, ni yo, duda de su calidad como juego o expansión y seguramente trae mucho más contenido que juegos de nuevo lanzamiento. Pero al final, sigue siendo una expansión que necesita del juego original para ser disfrutado y que no aporta nada nuevo per se.
Pero más allá de estos contendientes impresionantes, Metaphor: ReFantazio sobresale por su increíble mundo, su narrativa y una jugabilidad única que sabe mezclar lo mejor de dos mundos. Todo ello permite establecer un nuevo estándar en el género de los JRPG, hecho que ningún otro candidato puede afirmar en sus respectivos géneros. Un argumento más que sólido para ser el GOTY del 2024, por significar un antes y un después.
Es una obra que celebra lo mejor de los videojuegos y que, además, demuestra su capacidad para inspirar, desafiar y emocionar. Un juego que trata temas tan actuales como la segregación social o la discriminación. Un título que sabe mostrar lo bueno y lo malo de la sociedad a través de unos personajes que tratan temas tan personales y actuales como la propia identidad, el sentir que no sirves para algo o que no tienes un destino.
Por todo ello, Matephor: ReFantazio debería ser el GOTY 2024.
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