Analizamos NBA 2K21 para Xbox Series, una nueva versión de la última entrega del simulador de baloncesto por excelencia.
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Los últimos años han demostrado que los simuladores deportivos están al alza, y cada vez son más los deportes que cuentan con ellos. Eso si, si hablamos de simuladores lo cierto es que la mayoría se encuentran muy por debajo de lo que nos ofrece NBA 2K, y en concreto su última entrega, NBA 2K21. Pese a ser en la actualidad el único juego de baloncesto que tenemos disponible (una pena lo de NBA Live), su apartado técnico y modos de juego lo hacen un juego deportivo de lo más completo.
El título de este año es muy especial, y es que se trata de un lanzamiento intergeneracional, al igual que está ocurriendo con un gran número de títulos de todo tipo, como por ejemplo FIFA 21 o Assassin’s Creed: Valhalla, por poner dos ejemplos. Sin embargo, este nuevo NBA 2K21 no se limita a ser una versión mejorada con un apartado gráfico más pulido, sino que realmente se siente como un nuevo título, gracias sobre todo a algunos cambios que veremos más adelante.
En este texto nos vamos a limitar a contaros las novedades de esta versión next-gen, por lo que si te recomendamos que si no lo hiciste en su día leas primero nuestro análisis de la versión de Xbox One. Hemos podido disfrutar de la nueva experiencia NBA en una Xbox Series X, donde el resultado es sencillamente espectacular, y esta nueva edición tiene tablas para sentar lo que serán las próximas entregas de nueva generación de NBA 2K. Sin más, vamos a saltar a la cancha para ver que tal se mueve en ella 2K21.
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Apartado técnico
Uno de los primeros títulos que pudimos disfrutar con nuestras Xbox One en su lanzamiento fue NBA 2K14, y por aquel entonces era posiblemente el que mejor apartado técnico mostraba. Ahora, siete años después, un nuevo NBA 2K vuelve a acompañarnos en el estreno de la generación, y por supuesto el resultado sigue siendo el mismo. De la primera hornada de juegos disponibles en Xbox Series, NBA 2K21 muestra posiblemente el mejor apartado técnico de todos.
Un simulador deportivo va a tener siempre el objetivo primordial de hacernos sentir dentro de él, y sin duda este lo consigue de lleno. Ahora las pistas se sienten mucho más vivas, en especial gracias sobre todo al público. A ellos les ha sentado el cambio de generación estupendamente, y veremos mucha más variedad de espectadores, sintiendo que cada uno de ellos no se limita a ser un mero decorado más. A esto debemos sumarle la nueva cámara disponible y que tendremos activa por defecto. Esta se llama “cámara de raíl“, y si viste baloncesto en la “burbuja” de Orlando veras el juego como una retransmisión más.
La iluminación es otro de los elementos que más ha mejorado en esta nueva versión de NBA 2K21. El reflejo de la luz en el parque o en los jugadores es de lo más realista que he podido ver en un videojuego, y si nos ponemos a disfrutar de primeros planos durante nuestra partida apreciaremos a la perfección lo bien tratado que está este elemento. Otro factor en el que apreciaremos mucha evolución será en la Ciudad, que dejando atrás lo que ahora parece un limitado barrio (que ojo, no lo era para nada) nos ofrece un escenario enorme repleto de cosas por hacer.
Por supuesto me he dejado para el final de este apartado lo mejor, que son los jugadores. Sin andarme demasiado por las ramas puedo decir que tienen los mejores modelados que he visto en un juego deportivo, y eso es decir mucho teniendo en cuenta el alto nivel que ya tenían en los anteriores 2K de Xbox One. Los tatuajes, el sudor, las animaciones…los jugadores nos parecerán auténticos calcos de la realidad, haciendo de esta manera que la experiencia sea aun más inmersiva. No puedo terminar de hablar del apartado técnico sin hacer una pequeña mención a los tiempos de carga, y es que casi no existen, toda una maravilla.
Jugabilidad
Desde el punto de vista de la jugabilidad, los últimos NBA 2K habían evolucionado, pero dando muy pequeños pasos que llegados a NBA 2K21 eran demasiados pequeños. Al igual que ocurre con otras muchas sagas, esta llevaba pidiendo a gritos un par de años el salto de generación, y ahora que por fin ha llegado no tardaremos demasiado en darnos cuenta de lo necesario que era. La jugabilidad de esta versión de NBA 2K21 no es aun el salto evolutivo que quizás necesita, pero es un salto muy grande que agradeceremos enormemente.
Si hemos jugado a la versión de Xbox One, nos sentiremos muy cómodos y es que los cambios más grandes en la jugabilidad no modifican en exceso la experiencia. A nuestra disposición tendremos un nuevo medidor de tiro que en lo personal me ha gustado bastante más que el anterior, ya que tenemos la referencia del tiro perfecto mucho más clara. Además, los cambios hechos a la hora de hacer bandejas (ahora mucho más ‘manuales’) y otros movimientos como cambios de mano mejoran un control que ya de por sí era bastante preciso.
NBA 2K21 le da a la WNBA la importancia que se merece
Los cambios más grandes dentro de NBA 2K21 los encontraremos en sus modos de juego, empezando por la WNBA. La mejor liga de baloncesto femenina del mundo ya lleva teniendo cierto protagonismo en la saga NBA 2K, pero no ha sido hasta la llegada de la nueva generación donde han dado el salto definitivo. Los 12 equipos que conforman esta liga están recreados a un nivel altísimo, y lejos de limitarse a la misma jugabilidad genérica de la NBA disponen de animaciones y otros movimientos únicos.
Para esta liga tendremos disponibles dos modos de juego principalmente. Por un lado, estará Mi WNBA, un modo manager que se asemeja mucho al disponible para la liga masculina y que permite tomar el control de un buen número de detalles como son la contratación de personal, el draft o por supuesto los traspasos. Por otro lado, tenemos mi favorito sin duda, que es el llamado La W. Este modo viene a ser la versión femenina de Mi Carrera, en la que nos crearemos una jugadora y la iremos mejorando. Lo mejor que tiene este modo es que no está monetizado, por lo que las mejoras las iremos desbloqueando solo a base de jugar, aunque por ponerle un pero a este modo es que no dispone de esa narrativa cinematográfica que si tiene Mi Carrera.
La Ciudad deja al Barrio a la altura del betún
El otro gran cambio, y que quizás es el que más llamará la atención de los fans de la saga, es la llegada de la Ciudad. El Barrio fue en su momento todo una revolución, siendo uno de los motivos principales del gran éxito de la franquicia NBA 2K. La Ciudad llega para reemplazarla, y creedme cuando os digo que la deja al barrio a la altura del betún. Visual Conceps ha creado un escenario enorme dividido en cuatro distritos que nos llevará varios minutos recorrer desde una punta a otra, y donde encontraremos un buen puñado de canchas para batirnos con otros jugadores.
La Ciudad no estará para nada vacía, y es que en ella encontraremos a muchos NPC que nos irán dando misiones para obtener VC y así mejorar a nuestro jugador (o ponerlo más pintón). Sin embargo, este modo no es perfecto y por desgracia sigue teniendo un par de problemas a los que no se les ha dado solución. El primero de ellos es la gran ventaja que tienen aquí los micro-pagos. Nada más empezad deberemos disputar unos partidos en unos muelles (para así tener acceso a la Ciudad) y en mi partida me toco jugar con varias personas que tenían personajes con más de 15 puntos de valoración por encima del mío. El otro son los servidores, que si bien es cierto he notado una leve mejoría a la hora de jugar siguen sin ofrecer la respuesta que deberían.
Duración
Como siempre me gusta decir cuando analizo un juego deportivo, NBA 2K21 nos dará tantas horas de diversión como queramos dedicarle. Pese a que no he hablado de ellos por estar ya incluidos en la versión de Xbox One, modos como MyGM y Playoffs y Temporadas suponen por si mismos una gran variedad para no estar simplemente jugando partidos. A estos debemos sumarles el modo Mi Equipo, que este año introduce varias novedades interesantes como por ejemplo el sistema de transferencias o la elección de estadísticas a la hora de evolucionar una carta.
A esta gran oferta de modos debemos sumarles las novedades que ofrecen los modos específicos de la WNBA y la Ciudad, que por si sola ya casi ofrece horas de juego como para poder venderse por si sola como un videojuego aparte. En este sentido, si utilizamos micro-pagos para comprar VC nuestra experiencia será muy diferente, y es que ese progreso que iremos realizando en la Ciudad no será tan satisfactorio, aunque desde luego si que será muy rápido.
Conclusión
Justo antes de comprarnos una nueva consola, suele haber una pregunta que se convierte en muy recurrente. Esta pregunta es: ¿con cual juego estreno mi máquina?. Obviamente la respuesta va a ser en todos los casos muy subjetiva, y es que evidentemente no todos los jugadores tenemos los mismos gustos. Eso si, cuando nos compramos una consola lo que queremos sobre todo son juegos que exploten sus nuevas características (especialmente en lo que a gráficos se refiere), y este NBA 2K21 lo hace.
Tras haber podido disfrutar de las dos versiones de NBA 2K21 puedo decir que estamos ante un excelente simulador deportivo, y que no se limita a una simple actualización gráfica en su versión para Xbox Series. Los nuevos añadidos le sientan genial, especialmente la Ciudad, le sientan como un guante, y una vez que los probemos no concebiremos un nuevo NBA 2K sin ella. El verdadero problema que tiene esta edición es que el juego no dispone de Smart Delivery, por lo que para jugar en nuestras Xbox Series tenemos que comprar la edición propia (o haber comprado la Mamba Edition, que incluía ambas versiones).
Para mi, este NBA 2K21 es un juego imprescindible para todos los amantes del baloncesto y el deporte en general, siendo una de las mejores elecciones del mercado para estrenar nuestras Xbox Series.
Agradecemos a 2K Games el material ofrecido para poder realizar este análisis.