El género de las aventuras conversacionales tiene un nuevo miembro. Knee Deep es un juego de investigación en el que tendrás que descubrir al culpable de una serie de asesinatos.

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Dicen que nunca hay que juzgar un libro por su portada. Es curioso, porque nunca he oído que se aplique dicha afirmación a otras ramas del ocio que no sean la literaria. ¿Os imagináis a alguien en un cine sermoneando a su acompañante respecto a que no hay que dejarse llevar por el cartel a la hora de elegir la película? Visito tiendas de videojuegos con bastante frecuencia y nunca he oído a ningún comprador preguntándose por si sería mejor compra el juego que tiene una portada espectacular o el que la tiene coloreada con tonos pastel pero que acumula mejores notas en prensa, según los titulares que adornan las esquinas de la carátula.

Algo extraño está pasando en Crypress Knee y tendremos que averiguarlo. El caso es que este veterano jugador que redacta estas líneas, se encontró el otro día protagonizando una situación similar. Nuestro venerado y admirado administrador me asignó un juego cuyo título no me sonaba. Al comenzar la descarga en la consola me fijé en la imagen que aparecía en el menú de juegos del interfaz y mi mente gritó «What the fuck?». Tuve que restregarme los ojos para asegurarme de que la imagen que captaban mis retinas era real. Incluso miré el calendario, ya que por un momento temí haberme retrotraído al día de los inocentes.

Y claro, al abordar el análisis de cualquier obra lo ideal es hacerlo de un modo casi virginal. A pesar de conocer hasta el último detalle del desarrollo del juego, de haber visto todos los trailers y de haber leído hasta el último de los artículos, lo lógico es abrirse a él y dejarte llevar por sus entresijos de un modo objetivo y transparente, sin prejuicios. Solo que… esa portada… ¡Madre mía!

Luego está el título, Knee Deep, que tampoco es que augure una experiencia trepidante. Por suerte, la sinopsis sí que parecía estar a la altura, advirtiéndonos que encarnaremos a Romana Teague, una descarada blogger, a Jack Bellet, el periodista local, y a K.C. Gaddis, un detective privado.

El peculiar trío trabajará investigará las causas del aparente suicidio de un actor fracasado residente en un bucólico y apacible pueblo de Florida, Cypress Knee. Todo esto, y según la sinopsis, en clave de thriller y con una puesta en escena que homenajea las grandes superproducciones teatrales americanas.

Resumiendo: Un título discreto, una sinopsis interesante, una propuesta original y una portada que haría vomitar a la protagonista del Goat Simulator. Extraña mezcla que puede originar un producto digno y espectacular o que puede resultar ser el desastre que mi intuición me dijo que sería al ver la imagen de portada. Vente con nosotros a Cypress Knee y averigüemos juntos si eso de juzgar un juego por su carátula es inapropiado o si es un indicador a tener en cuenta sobre la buena o mala calidad que depara una obra.

Knee Deep es una aventura conversacional de lo más peculiar. - ¡Comparte!    

Apartado Técnico
Desde el primer momento el juego muestra un aspecto visual que recuerda a la generación pasada, tanto por el deficiente grado de detalle que muestran escenarios, personajes y elementos como por las acartonadas expresiones faciales de los personajes. Son los escenarios los que salen peor parados, ya que permanecen en penumbra porque los focos de la obra de teatro que estamos representando se centra siempre en los elementos principales y en los personajes que participan en la conversación. No obstante, tanto caracteres principales como secundarios pueden presumir de fluidas animaciones.

Y es que el hecho de que el juego nos meta en el papel de personajes que a su vez son actores que están participando en un montaje teatral, enrarece el conjunto de tal modo que incluso puede llegar a crear confusión. Los personajes caminan de una localización a otra dentro de un mismo escenario, pero en ocasiones la historia nos lleva a zonas más apartadas y es entonces cuando el protagonista camina hacia una plataforma que le transporta mecánicamente hasta un nuevo entorno.

Tampoco busquéis espectacularidad en ninguna de las situaciones, ya que las pocas escenas de acción que hay transcurren tal y como se plasmaría en un teatro. Las poleas y los tramoyistas virtuales irán moviendo decorados de cartón piedra que simulan fuego, pantallas que giran en un torno pintadas con paisajes para generar el efecto de que un coche está en movimiento y decorados que se desplazan sobre raíles sirven para recrear una persecución por unos tejados. De este modo, el resultado final acaba siendo así de lo más artificioso.

En lo que respecta a la banda sonora las piezas recaban ese espíritu country y lugareño de este tipo de ciudades americanas, y acompañan la acción de un modo bastante discreto. Los efectos sonoros tampoco se van a llevar a un premio y encima, aun tratándose de una aventura conversacional, el estudio ha decidido no doblar al castellano el juego y también ha descartado traducir los subtítulos. Si no dominas el inglés te vas a aburrir como una ostra.
Jugabilidad
Todo se reduce a elegir la línea de diálogo que mejor se adapte al tipo de rol que prefieras asumir con cada personaje. En ningún momento controlarás a los protagonistas y olvídate de moverte por los escenarios. Todo el recorrido está guiado y guionizado. Cero libertad vas a tener a lo largo de tu recorrido por Cypress Knee, lo que realmente consigue que nos sintamos como meros espectadores de la historia que el estudio ha decidido contarnos. Así pues, como obra de teatro no está mal, pero como videojuego deja mucho que desear.

Lo que podemos destacar es que todos los diálogos están muy bien tratados. Puedes actuar como una excéntrica blogger como Romana, como un insolente reportero en el rol de Jack y como un cínico investigador con K.C.. Cada uno tiene siempre una opción de diálogo especial e ideal para exasperar a los habitantes del pueblo. Esto generará situaciones de lo más rocamboléscas y casi siempre desembocarán en conflictos que se resolverán de un modo cómico o surrealista. No obstante hay que recordar que el juego pretende tomarse en serio a sí mismo, y esta comicidad está demasiado reñida con el tono de novela negra que ofrece en otras ocasiones.

Este contraste es muy negativo, ya que lo ideal podría haber sido que el estudio definiese mejor el camino que quería seguir con la historia que nos cuenta. Lo decimos porque este mix de investigación, muertes, humor a lo Aterriza como puedas e incluso ciencia ficción y serie B es desconcertante y bastante molesto. Otra parte molesta, extraña y aburrida es cuando tomamos el control del coro o voz del pueblo. Estos pasajes acaban siendo irritantes, ridículos, reiterantes y totalmente prescindibles.

Knee Deep es entre un juego y una obra de teatro. - ¡Comparte!    

Además de conversar también tendrás que resolver algún que otro rompecabezas, pero todos son sencillos hasta el extremo. De simples que son, incluso un par de ellos podrían considerarse insultantes a la inteligencia del jugador. El ejemplo más descarado es el puzzle en el que debemos abrir un candado para acceder a las instalaciones de la emisora de radio local introduciendo una combinación alfabética. El juego te pregunta «¿Cuál es el nombre de la emisora de radio del pueblo?», y grabado sobre el candado podemos leer el nombre de dicha emisora…
Duración
El juego no ofrece ningún reto al jugador. Respondas lo que respondas y hagas lo que hagas la historia siempre fluirá hacia adelante. Solo podrías llegar a quedarte atascado en alguno de los rompecabezas, pero si esto sucede respira hondo, no te agobies y vuelve a intentarlo. Como ya decíamos los rompecabezas no tienen ninguna dificultad.

Una vez terminado el juego (no debería llevarte más de tres o cuatro horas) pocas ganas deberían quedarte para dar empezar una segunda partida. La historia es tan bizarra y simple que no invita a repetirla salvo que quieras echarte unas risas con los colegas con algunas de las situaciones absurdas que transcurren durante la investigación, cuyo premio a la absurdidez se lo lleva la parte en la que un perro conduce una excavadora para detener los malvados planes de los villanos de la función. Sí, habéis leído bien: un perro conduciendo una excavadora…
Conclusión
El género de las aventuras conversacionales tiene un nuevo miembro. Knee Deep es un juego de investigación en el que tendrás que descubrir al culpable de una serie de asesinatos. Es probable que sus creadores pensasen que sería bueno aprovechar el tirón de los juegos de Telltale Games, pero el que nos ocupa se queda a años luz de las aventuras conversaciones de los de Telltale. De Knee Deep no puede aprovecharse casi nada. La historia no deja de dar bandazos hacia un género u otro mientras pierde interés a cada nueva escena. La jugabilidad y la dificultad brillan por su ausencia, técnicamente es flojo y encima lo puedes terminar en una tarde.

El precio sí que parece hacerle justicia, con unos 14,99 € que lo convierten en un título asequible para todos los bolsillos. A pesar del cúmulo de desaciertos, debemos remarcar que Knee Deep no es una basura, ya que tiene dos o tres de puntos positivos. El problema es que quedan eclipsados por el resto de despropósitos que acumula. Quizás no sea tan descabellado juzgar un juego por su portada después de todo. En este caso no íbamos mal desencaminados.