Presentamos Xbox Union, la alianza de contenidos de algunas de las mejores webs de Xbox en castellano, hoy junto a Comunidad Xbox haremos un repaso por la historia de Xbox One.
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Hoy queremos presentaros una nueva iniciativa junto a nuestros compañeros de Comunidad Xbox. Se trata de Xbox Union, un proyecto que aglutina la colaboración entre varias webs y comunidades de Xbox comprometidas que trabajan de manera independiente. De esta manera intercambiaremos opiniones entre redactores de ambos sitios a modo de artículos, colaboraciones en medios audiovisuales…etc.
Hoy queríamos estrenar sección haciendo un repaso sobre la evolución que hemos vivido con respecto a la marca Xbox. Sí, cierto es que ya se han escrito ríos de tinta sobre este tema en la red, e incluso es posible que en ambas páginas nos hayáis leído sobre el tema. Pero hoy mis queridos amigos, hoy es momento de sentirse más orgulloso que nunca de ser fan de Xbox y todo lo que representa. Primero pongámonos en perspectiva y viajemos un poco al pasado.
Estamos a 21 de Mayo de 2013 en plena conferencia de Microsoft creada para presentar la que será la sucesora de Xbox 360, la consola que tantas alegrías nos había dado y nos sigue dando a día de hoy. Don Mattrick se subía al escenario para intentar vendernos la que sería la máquina multimedia definitiva, pero un error en la transmisión del mensaje y la ayuda de Internet arrojó la consola hacia lo que parecía un pozo sin fondo. A partir de aquí y como comenta Antonio Sánchez en Comunidad Xbox el cambio ha sido radical.
Los que me hayáis escuchado en el podcast o leído en artículos de opinión en Solo Xbox One, sabréis de sobra que siempre he defendido parte de la labor de Mattrik, a fin de cuentas Ryse, Dead Rising 3, Sunset Overdrive, Halo 5: Guardians o Forza Motorsport 5 nacieron bajo su mandato. El problema fue cómo se transmitieron las capacidades de la consola y su planteamiento. A eso hay que sumar la imposición de Kinect, un periférico que finalmente no ha acabado como los de Redmond esperaban.
Tras las numerosas críticas y las bajas reservas iniciales de Xbox One, Microsoft decide prescindir del directivo, sería la primera cabeza de turco en caer y el relevo lo tomaba un enérgico Phil Spencer que había captado el mensaje de la comunidad rápidamente: “Lo multimedia mola, pero queremos juegos, juegos y más juegos”.
Dicho y hecho, el E3 de 2014 se abrió con un montón de juegos presentados, algunos de ellos ya se habían filtrado con anterioridad restando así la emoción al ser mostrados al núcleo duro de jugadores, otros como Phantom Dust aún permanecen en el limbo. No obstante hay que reconocer a Microsoft que luchó por mostrar un gran lineup, sin duda el mejor de la feria ese año. Además y como suele decirse, los indies “volvieron a casa por navidad”, nunca antes habíamos visto un volumen tan elevado de juegos auto-publicados como ahora, y eso que aún no hemos alcanzado los tres años de vida de la consola.
Tras la calma y asentamiento de la marca con algunas medidas urgentes de mejora, como por ejemplo los packs de consola sin Kinect y la re-estructuración de algunos estudios internos, llegaba el momento de ir sacando a aquellos directivos que no tenían cabida en la división, aunque ya os hemos hablado de este tema con anterioridad nunca viene mal recordarlo. De esta manera y como si de fichas de dominó se tratasen, los siguientes responsables eran destituidos o eliminados del mapa poco a poco entre 2014 y 2015.
Phil Harrison: Abandonó Microsoft tras meses después de la presentación de Rise of the Tomb Raider en la Gamescom 2014. Un anunció tan importante debería de haber sido entusiasta y en contra de eso tuvimos a un Harrison insípido y desganado. Se rumorea que él fue uno de los responsables de cerrar esta exclusiva temporal.
Marc Whitten: Abandonó Microsoft para unirse a Sonos y en el que actualmente regenta el cargo de vicepresidente de producto.
Nancy Tellem: Tras ocupar el cargo de vicepresidenta de Xbox Entertainment Studios, abandona la división junto al desmantelamiento de esta.
Jordan Levin: Junto con la partida de Nancy Tellem, el ejecutivo de Xbox Entertainment Studios también abandona.
Boyd Multered: El que fuera creador del servicio Xbox Live también se despide de la compañía para fundar su propio proyecto aún desconocido.
Chris Lewis: La marcha de Lewis supuso no solo el abandono de un ejecutivo si no parte de la re-estructuración de Xbox Europa. El directivo abandonó totalmente la compañía para centrarse en sus propios proyectos empresariales.
Yusuf Mehdi: El que fuera jefe de marketing de la división fue re-ubicado hacia la posición de Vice Presidente Corporativo de dispositivos Microsoft.
Takashi Sensui: La marcha de Takashi de la división se traduce en el desmantelamiento casi total de la filial japonesa de Xbox en Japón. Hemos visto muy poco apoyo por parte de Microsoft a Japón. Ahora Sensui regenta la posición de Manager General de Microsoft en Japón pero no dirige Xbox.
Todo ello casaba a la perfección con la estrategia de Phil Spencer de poner en standby al mercado europeo y japonés para recuperar América, el territorio más relevante en la escena de los videojuegos a día de hoy. Empezaba así una andadura por conquistar a este público que tras el pasado 2014 y parte del actual 2015 comenzaba a ver con mejores ojos a la máquina de Microsoft. Prueba de ello ha sido el comienzo de 2015 en el que pese a una escasez de títulos en el primer semestre del año, Xbox One aumentaba exponencialmente sus ventas mes a mes con respecto a años anteriores.
Pasado el éxtasis de recuperar la confianza americana llegaba el segundo tramo del año, momento en el que Phil Spencer volvería a centrarse en Europa con varias promesas, pero no sin antes presentarnos un E3 2015 apoteósico con momentos que quedarán para la memoria de los jugadores como el anuncio, por fin, de la retrocompatibilidad. Por segunda vez Microsoft volvía a intentar meter en una consola compatibilidad por software de su anterior hardware. Y parece que esta es la definitiva.
El mensaje “juegos, juegos y más juegos” ya se asocia hoy gracias a este E3 a Xbox, es el mantra que se respira en Redmond tras deleitarnos con anuncios como el de Sea of Thieves, la Rare resurgida de sus cenizas, ReCore, lo nuevo de Keiji Inafune o Ashen un desarrollo independiente que aspira a ser uno de los grandes juegos de 2016. Y es que los juegos, señores, son los protagonistas de Xbox que ahora también se ha expandido al PC para que sea más fácil que nunca continuar la experiencia de juego allá donde estemos, Windows 10 llega para traernos una expansión del ecosistema.
La andadura de un Spencer consolidado nos trajo algún trato mal llevado como Rise of the Tomb Raider y algunas decisiones que no han terminado de gustar a algunos jugadores como la unificación de plataformas y la llegada de juegos de Xbox al PC. Sin embargo, ha demostrado que Xbox es la mejor plataforma para jugar y que tiene mejor salud que nunca. Jamás antes la marca tuvo tantos lanzamientos exclusivos y desarrollos propios.
Pero faltaba la guinda final, la Gamescom 2015 ha sido sin duda la fiesta de Xbox, ya tuvimos ración de títulos que llegarían en 2015 pero faltaba por ver los preparados para 2016. Ahí estaba Quantum Break que se ha convertido en un proyecto mucho más ambicioso de lo que se nos presentó en su día, por cierto, un proyecto cerrado bajo el sello de Don Mattrick. También vimos por primera vez en movimiento al prometedor Scalebound, la fuerte apuesta de Phil Spencer y Crackdown 3 demostraba al mundo gamer que la computación en la nube no era una quimera.
A esto hay que sumar las bajadas de precio, los packs de juegos y ofertas, el servicio EA Access, nuevos periféricos como mandos profesionales y chatpads y un rediseño de interfaz más rápido y lleno de funcionalidades. El futuro pinta prometedor y estamos seguros de que Xbox seguirá cosechando éxitos pero hay que seguir siendo exigentes.
Aún nos falta por ver una mayor apuesta por Kinect, la llegada de Windows 10 a la consola y con ello las aplicaciones, para mi gusto, una rebaja o mejora del servicio Xbox Live Gold no estaría mal. Por otra parte, empezar a mirar a Japón con mejores ojos supondría una buena noticia, aunque ya han dado un primer paso. Mientras todo esto ocurre, no olvidar el mensaje: “ juegos, juegos y más juegos.”