La comunidad debate cómo afectará el precio “premium” anunciado por Sarah Bond a la futura consola de Microsoft.
Más historias en la categoría Noticias
- Suda51 desata la locura: brutal gameplay y fecha de lanzamiento de «Romeo is a Deadman»
- Los jugadores pierden la paciencia: la actualización gratuita de Red Dead Redemption no llega a la mayoría en Xbox
- Todos los juegos anunciados para Xbox en el PC Gaming Show
| No te pierdas nada y ¡Síguenos en Google News! |
Desde que Sarah Bond, presidenta de Xbox, afirmó que la próxima generación será una experiencia “muy premium y de gama alta”, la comunidad no ha dejado de preguntarse algo muy concreto: ¿habrá una opción asequible para quienes no puedan (o no quieran) pagar una consola de más de 800 o incluso 1000 euros?
Las palabras de Bond, sumadas a los recientes aumentos de precio en Xbox Series X, Game Pass y los devkits, han hecho que muchos jugadores vean venir una transición generacional más cara que nunca.
En foros y redes, el debate se ha vuelto intenso en los últimos días. Algunos usuarios opinan que la era de las consolas económicas, como la Xbox Series S, podría haber llegado a su fin, mientras otros creen que Microsoft apostará por una estrategia más flexible, en la que la nube y los dispositivos asociados a Windows sean la puerta de entrada más barata al ecosistema Xbox.
¿Hacia un futuro sin consolas baratas?
Varios jugadores plantean que el modelo actual de “todo es una Xbox” puede dar paso a diferentes niveles de acceso. Por ejemplo, una consola de gama alta (heredera de la Series X) junto a soluciones más económicas basadas en Xbox Cloud Gaming o hardware portátil, como la actual ROG Xbox Ally X. Otros sugieren que la nueva generación podría tener tres o cuatro modelos distintos, cubriendo desde el juego en streaming hasta la experiencia de máxima potencia en 4K y trazado de rayos avanzado.
Aun así, entre los comentarios más repetidos hay uno que destaca: muchos jugadores prefieren conservar sus actuales Series S o X y apostar por la nube como alternativa de bajo coste. Las televisiones con app integrada, los móviles y los sticks HDMI ya permiten acceder al servicio sin hardware adicional, algo que podría convertirse en la nueva “consola económica” de Xbox.
Por ahora, todo apunta a que la próxima generación buscará diversificar el acceso más que abaratarlo. Si la nueva consola de Microsoft realmente apunta a ser un dispositivo de gama alta cercano a los 1000 euros, la opción más asequible podría no ser una consola, sino una suscripción.

