Tras haberlo hecho Nintendo, parece que las consolas actuales son menos sociales, pero no es por su culpa.
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Desde que Elon Musk se hizo con el poder de Twitter, el cambio de rebranding a X y todo lo que ha conllevado desde entonces, como ese par de días en el que limitaba la cantidad de tweets leídos, ha sido un carrusel que muchos usuarios no han aguantado. Ya es una red social que claramente ha empeorado desde entonces, y desde el lado empresarial han decidido prescindir en parte de sus servicios. A día de hoy, ni Microsoft, ni Sony, ni Nintendo tienen integración en sus consolas con X.
La última actualización de Nintendo Switch, que ha eliminado la posibilidad de integrar la cuenta de X de cada usuario con la consola, ha sido el golpe definitivo para el uso de la red por parte de los gamers. Hasta hace poco, era muy habitual ver capturas o trozos de gameplay compartidos por los usuarios en Twitter, pero desde que X es así, han desaparecido, pues en 2023, tanto Xbox como PlayStation también quitaron el soporte. ¿El motivo? Pues parece ser que no solo es económico.
El coste de la API para los fabricantes no es asumible
Primero fue Microsoft en abril de 2023, posteriormente Sony en noviembre y ahora Nintendo. El uso de la API de X es gratuito para los primeros 1.500 tweets del mes, pero en el nivel empresarial, el coste para un acceso a baja escala (nada parecido al uso en consolas), puede salir por casi 42.000$ al mes. Imaginaos extrapolar esas cifras al nivel de uso de, por ejemplo, PlayStation con sus PS4 y PS5. Pero, por supuesto, no es el único problema.
Por lo visto, la propia API interfiere en el resto de sistemas dando errores, algo de lo que, particularmente, podemos dar fe hoy en día, con algo tan simple como WordPress, requiriendo un coste que no compensa ni en rendimiento (pues X ha bajado su cuota desde estos cambios). Los días de oro de Twitter se han acabado y como muchos vaticinaban, es posible que Elon Musk acabe con ella tarde o temprano. Su principal alternativa, Threads, de Meta, ya ha alcanzado los 100 millones de usuarios.