Interesante spin-off de The Escapists, que más que un DLC o un MOD parece otro juego nuevo.

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Para saber si algo está de moda o no, es suficiente con echar un vistazo a las diferentes vertientes del ocio. Si ese algo está presiente en varias ramas de entretenimiento, o en todas, ya tienes la respuesta: sí, está de moda. Para muestra un botón. Haced el ejercicio de preguntaros si el género zombie (o subgénero para muchos amantes del terror) está de moda. Pues bien, salvo que os hayáis pasado los últimos diez años incomunicados y encerrados en una cueva, o si fuisteis víctima de un naufragio y habéis estado sobreviviendo hasta ahora en una isla desierta, todos sabréis que aún anda dando coletazos la segunda etapa de esplendor que «viven» los zombies desde mediados de la década pasada.

Desde entonces hemos visto pulular por la pantalla de nuestros televisores a hordas y hordas de purulentos cadáveres andantes protagonizando diversas series de televisión, cada una con mayor o menor éxito de crítica y público. En las salas de cine también han acaparado una importante cifra de recaudación, así como una cuota significativa de estrenos. También han extendido su infección en el mundo del cómic y, como no podía ser de otro modo, en el campo que más nos toca la patata, el de los videojuegos.

A pesar de que algunas noticias y análisis de novedades se resienten, en ocasiones, con comentarios de los usuarios tales como «¿Otro juego más de zombies? Yo paso», las buenas ventas que consiguen, justifica que los estudios de desarrollo y las distribuidoras estén siempre a la caza de nuevos proyectos en los que el usuario medio pueda desahogarse machacando los cráneos de los podridos que nos salgan al paso.

Pero ojo, no siempre estos juegos suelen ser propuestas de acción. Como en todas las cosas que se ponen de moda, la oferta y la demanda es tan grande que puedes encontrar ideas para todos los gustos y de todos los colores. Ahí están obras galardonadas como las dos temporadas de The Walking Dead de Telltale Games (en las que las relaciones, las decisiones y los lazos sentimentales son el motor del juego), así como existen propuestas de marcado cariz estratégico como Plague Inc.

Pues bien, dentro de ese grupo de títulos en los que la acción directa no forma parte de sus mecánicas de juego, nos llega este The Escapists: The Walking Dead. ¿Esto quiere decir que aquí no vamos a tener ocasión de reventar cerebros a balazos o a base de jarabe de palo? Pues no del todo y quienes hayan probado el The Escapists original pueden hacerse una idea de esto mismo. Pero no adelantemos acontecimientos y entremos de lleno en el universo The Walking Dead como no lo habías visto hasta ahora.

Apartado técnico

The Escapists vio la luz, en nuestras Xbox One, durante el primer trimestre de este mismo año. Bajo una estética retro pura y dura, encarnábamos a un recluso cuya misión era escapar de la prisión en la que había sido encerrado. Tanto el entorno como los personajes, estaban recreados de modo que eran el vivo reflejo de muchos de los juegos que se lanzaron en la era de los 8 bits y, en esta nueva versión, el apartado visual sigue siendo el mismo, solo que adaptado al universo postapocalítico que creo Robert Kirkman en su serie de cómics sobre muertos vivientes. No apreciamos ninguna mejora ni ningún cambio drástico en este punto, más allá de la propia adaptación que han hecho en este nuevo contexto respecto del juego original.

A nivel sonoro no brilla tampoco demasiado, algo comprensible, por otro lado, ya que, no tanto por las melodías como por los efectos, sigue pasando por un juego de tiempos pasados. Está claro que se ha optado por componer unas piezas acordes con los gráficos que muestra, y no creemos que sea inapropiado, aunque no deja de ser llamativo e induce a pensar que muchos estudios están aprovechando este reflote de lo retro para abaratar costes de producción.

A pesar de ser muy simple a nivel técnico, es de justicia remarcar que los escenarios están llenos de detalles y es muy completo en cuanto a número de personajes, acciones, opciones del menú y misiones. Solo se le puede achacar que cuesta distinguir a algunos personajes de otros, precisamente por su escasa definición. Un último punto a favor es que los textos están completamente traducidos al español. Se les han colado algunas erratas, pero en conjunto se entiende todo a la perfección y no llegas a perder el hilo de las conversaciones en ningún momento salvo cuando se solapan algunos bocadillos.

Jugabilidad

The Escapists: The Walking Dead es, de primeras, un juego complicado. No es apto para todos los públicos pero no por restricción de edad, sino por lo complejas que resultan algunas acciones y mecánicas. También peca de un problema de herencia respecto al juego que le dio origen, ya que hay demasiadas misiones que han sido porteadas descaradamente de The Escapists, como por ejemplo los recuentos a determinadas franjas horarias, los desayunos, las comidas y las cenas así como otras tareas que han sido sospechosamente “rescatadas” para este “nuevo” juego.

Por este motivo te ves asaltado constantemente por la sensación de que estás jugando a una expansión de The Escapists con zombies, salvo que no hayas probado el juego original, claro está. Además, algunas de estas misiones no terminan de cuadrar con el contexto del apocalipsis. Y es que cuesta meterse en la piel de un Rick Grimes (el protagonista) que tiene que hacer la colada y fregar habitaciones para mantener a salvo su guarida y a su grupo de supervivientes. Lo peor es que estas anodinas tareas son las que consiguen que el nivel de amenaza zombie no suba. Parece que los muertos vivientes de este juego son bastante tiquismiquis y como no seas un superviviente puntual, pulcro y hacendoso se enfurecerán y vendrán a darse un buen festín con tus higadillas.

En The Escapists: The Walking Dead, craftear es la base del juego, lo que nos permitirá avanzar, abrir nuevas zonas y ser más eficientes en el combate. Este es otro aspecto heredado, punto por punto, de The Escapists. Los chicos de Team 17 son los creadores de la saga Worms y, tal y como hemos visto en algunas entregas de los simpáticos y bélicos gusanitos, los programadores de este estudio parecen estar acostumbrados a eso de reciclar fórmulas y material, algo que es justificable y legítimo, pero que resta coherencia y lastra un poco la experiencia en este caso. Pesa a todo, hay cosas que se han perdido en esta versión, como por ejemplo las opciones de personalización de los personajes y la posibilidad de ponerles el nombre que quieras, ya que aquí asumes el rol de Rick Grimes y el resto de personajes que aparecerán serán los mismos y con los mismos nombres que en la serie de cómics.

En cuanto a los cinco diferentes niveles disponibles, habría que restar el primero, ya que resulta ser un sencillo y corto tutorial, en el que se nos explican algunos conceptos básicos, aunque no todos. Para aprender a jugar tendrás que empezar el siguiente nivel y tener bastante paciencia. Una vez metidos en vereda, todo se resume a aprovechar al máximo el poco tiempo que te dejan para explorar (entre cada una de las misiones rutinarias) para craftear, explorar, hacer misiones secundarias, leer y entrenar a Rick para mejorar sus estadísticas.

Duración

Partiendo de la base de que ninguno de los cuatro niveles tiene preestablecido un tiempo límite para completarlos, la duración será muy variable, dependiendo del modo de jugar de cada persona que se ponga a los mandos. Los que gusten de la exploración, quienes disfruten con el crafteo y los que quieran desbloquear todos los logros, se verán recompensados con más de una decena de horas de juego. También pueden ver alargadas las horas los jugadores menos experimentados en este género.

La dificultad varía de un escenario a otro, pero con constancia e ingenio no deberías tener demasiados problemas para progresar. Hay que tener en cuentas que algunas situaciones pueden resolverse de maneras diferentes y puede que alguno de los personajes muera por una mala decisión o por un combate fallido, así que los que disfruten de una primera pasada, puede que acaben por iniciar una segunda vuelta.

Visto de otro modo, puede darse el caso de que algunos jugadores no terminen de encontrar afinidad con el juego y abandonen poco después de terminar, ya que, como comentábamos al principio, su estética es simple pero la fórmula jugable no lo es en absoluto. Para más inri, no podemos obviar que algunas misiones resultan monótonas e innecesarias.

Conclusiones

Podemos decir que Team 17 ha sido demasiado autocomplaciente con The Escapists: The Walking Dead y lo que han demostrado es que lo que algo te funciona una vez, no tiene por qué mantener el nivel a la segunda con solo adaptar la fórmula tal cual pero a un nuevo contexto.

El juego no es malo, pero con un sistema de combate más pulido y con unas misiones y unas mecánicas mejor adaptadas al universo de The Walking Dead, el resultado habría mantenido el mismo nivel o incluso habría superado el nivel de su antecesor. En esta nueva entrega pocas han sido las mejoras introducidas y se han visto recortados el número de niveles. Aun así, Team 17 ha sabido exprimir bastante bien la licencia de cómics de muertos vivientes más famosa de la historia.

The Escapists: The Walking Dead acaba siendo un título más recomendable para los nostálgicos de los juegos retro de exploración y crafteo que para los seguidores de la serie. Aunque puede darse el caso de que muchos de los fieles lectores de las desventuras de Rick Grimes y su grupo de supervivientes, sean también fans de este tipo de juegos. En ese caso, no lo dudéis ni un segundo y haceos con él cuanto antes.

*Gracias a Xbox y Team 17 por habernos proporcionado la copia para la review.