La COVID parece haber cambiado un poco la manera de pensar de los estudios, y Remedy busca crecer con un nuevo estudio en Suecia.
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Remedy es uno de esos estudios muy especiales, y siempre consiguen mantener cierta expectación cada vez que anuncian un juego nuevo. Sus últimas IPs, Quantum Break y Control, son dos muy buenos juegos con historias bastante originales y que consiguen mantener al jugador pegado al mando desde el primer minuto. Sin embargo, y quizás a título personal, hay otro juego de Remedy por encima de estos: Alan Wake.
Mientras que el estudio «se niega» a hablar claramente sobre una secuela, parece que en sus planes entra una expansión que les lleve a ser un estudio más grande y completo. Para ello Remedy abrirá el próximo año un nuevo estudio en Estocolmo, donde podría haber hasta 25 trabajadores.
¿Remedy hablará pronto sobre Alan Wake 2?
La idea de crear este estudio es principalmente que los trabajadores tengan un espacio para reunirse puntualmente, y es que tras la COVID Remedy ha instaurado un modelo híbrido remoto y presencial que se adapta mejor a estos tiempos. En palabras de James Salt, uno de los directores de juego de Remedy:
Entendemos que cada uno es diferente, y tiene diferentes necesidades, en diferentes días. Algunos días se pasan mejor enfocados, con los auriculares puestos, trabajando en algo genial, mientras que otros días, como cuando los equipos están trabajando en la planificación, tal vez se beneficiarían del tiempo de cara en persona. El modelo híbrido consiste en permitir que las personas elijan el método que mejor funcione para ellos, en un día determinado.
Una excelente medida por parte de Remedy que muchas otras empresas deberían empezar a adoptar (y no solo en los videojuegos).