El propio Phil Spencer lo ha reconocido a The Washington Post. Los gigantes tecnológicos son los que ve como enemigos peligrosos.
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Mientras en Twitter y algunos foros residuales de videojuegos se libra la Console War 2022 Edition, el mundo real se mueve a otro ritmo. Y es que para muchos la compra de Activision Blizzard o Bethesda se hizo para apagar a Sony o restar protagonismo a Nintendo. Desde luego les afecta, pero el fondo de Microsoft es precisamente otro.
Cuando Google lanzó su servicio Stadia, el máximo responsable de la división de juegos de Microsoft envió un mail a todos sus empleados indicando la importancia de ese anuncio y lo que supone para ellos que un gigante tecnológico entre en el tablero de juego. Esta es la principal preocupación para Spencer y su equipo.
Phil Spencer tiene marcados a los gigantes tecnológicos como sus principales enemigos
En una reciente entrevista con el medio The Washington Post, Phil Spencer reconoció que pese a que también son competidores, Sony y Microsoft no le quitan el sueño. Es decir, sabe que ese es su negocio principal y no harían nada para dañarlo o prostituirlo.
Con Amazon, Facebook o Google ‘la cosa cambia’, como decía El Cigala. Y es que estos gigantes están presentes en otros mercados de consumo masivo que podrían migrarse a los videojuegos y distorsionar la imagen general de como los conocemos hoy día.
Tienen una larga historia en los videojuegos… Nintendo no va a hacer nada que dañe los juegos a largo plazo porque ese es el negocio en el que se encuentran. Sony es lo mismo, y confío en ellos. … Valve actua de la misma manera. Cuando miramos a los otros grandes competidores tecnológicos para Microsoft: Google tiene búsqueda y Chrome, Amazon tiene compras, Facebook tiene redes sociales, todas estas empresas de consumo a gran escala. … Hemos tenido una discusión internamente sobre esto, esas cosas son importantes para esas otras compañías de tecnología por la cantidad de consumidores a los que llegan, los juegos pueden ser eso para nosotros.
Creo que tenemos un punto de vista único, que no se trata de cómo tiene que funcionar todo en un solo dispositivo o plataforma. Ese ha sido el verdadero punto de inflexión para nosotros al ver los juegos como una oportunidad para el consumidor que podría tener un impacto similar en Microsoft al que algunos de esos otros negocios de consumo a escala lo hacen para otros grandes competidores tecnológicos. Y ha sido genial ver el apoyo que hemos tenido de la compañía y la junta directiva.
Estas compras han sido la manera que ha tenido Microsoft para asegurarse que estos monstruos con miles de millones euros en su caja, se hagan con franquicias míticas y emblemáticas para acabar destrozándolas y robando terreno a actores clásicos como Nintendo, Valve, Sony o la propia Microsoft.