Metal Gear Rising mejora considerablemente los framerates en la versión retrocompatible en Xbox One respecto a la versión nativa de Xbox 360. Volver a disfrutar más y mejor.
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La retrocompatibilidad ha sido una de las funcionalidades que han marcado esta generación de Xbox porque no solo la marca Xbox ha establecido un vínculo más fuerte con sus usuarios al escuchar sus demandas y complacerlas, sino que además a través de ella nos ha permitido volver a disfrutar de grandes títulos que no podríamos volverlos a rejugar (o jugar por primera vez para algunos) y con un rendimiento mucho mayor a lo que se esperaba.
Ya os hemos mostrado en varias ocasiones algunos vídeos de otros títulos de cómo la versión retrocompatible tenía algunos mejoras respecto a la versión de Xbox 360, siendo el más notable la mejora y estabilidad de los framerates. En Metal Gear Rising no es una excepción. En este título y gracias a un vídeo comparativo compartido por VG Tech podemos observar como la versión retrocompatible en Xbox One se mantiene la mayor parte del tiempo en los 60 framerates estables a diferencia que la versión de Xbox 360 que pasa de 50/55 FPS con una inestabilidad continua.
En los momentos de mayor estress, estos son los de combates contra varios enemigos simultáneamente y cuando se utilizan habilidades que despliegan un mayor número de objetos y partículas en pantalla, la versión en Xbox One mantiene hasta una media de 20/25 FPS por encima de la versión de Xbox 360, con una mayor estabilidad en los framerates durante los combates más exigentes. Una vez más la retrocompatibilidad no solo nos brinda la oportunidad de volver a disfrutar de grandes títulos de la generación pasada, sino con un mejor rendimiento.
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