Xbox One: La ley del "todo vale"
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Que Xbox ONE no dio sus primeros pasos como todo el mundo que nos gustan los videojuegos nos habría gustado es algo más que evidente, algo que no creo que deje lugar a dudas cuando una vez presentada la consola las opiniones fueron tan poco unánimes y jugadores de todo el mundo intentaban ingerir la apuesta tan diferenciadora y arriesgada que presento Microsoft con su sistema, hubo gente que acepto los requisitos que presentaba el sistema básicamente porque no les impedía el poder disfrutar de sus juegos favoritos y veían en la consola un avance en cuanto a la infraestructura que teóricamente introducía con el sistema de intercambio y compartir juegos de manera digital y el poder prestar tu biblioteca personal entre 10 amigos diferentes sin importar el parentesco que tuvieran contigo entre otras novedades no tan populares.
Todo eso quedo en el tintero porque pocas semanas después Microsoft ademas de quitar ese requisito también prescindió de la conexión cada 24 horas obligada que presentaba el sistema y todo lo que estuviera asociado con esta característica, incluso permitió que Xbox ONE fuera totalmente región «free» y de esta manera liberó que usuarios de todos los países en los que no hubiera Xbox LIVE de lanzamiento pudieran adquirir el sistema de otro territorio para usarlo como habían hecho en la generación presente con Xbox360. Después de esto llego la «calma», pues no, desde el cambio de políticas la tendencia fue muy parecida, si bien hubieron usuarios que estaban indecisos y que los cambios les vinieron muy bien para decantarse por la plataforma, otros muchos siguieron con el «piñón fijo» u el «sota, caballo y rey», repitiendo y reiterando las mismas teorías haciendo la pelota más grande y tergiversando todo lo que pudiera rodear una buena noticia alrededor de la consola. Las «malas» noticias se convertían en «muy muy malas» las «normales» se convertían en «malas» y las «buenas» se convertían en «sin más», ¿todo vale según con qué?, si, y ademas sin cuestionarlo un instante, ya que la campaña de desprestigio movida por toda la red apoyada por bastantes medios intentado pescar en mareas revueltas el «click» rápido con cualquier titular condicionado u «orientado» hacía la misma senda hacían pensar que algo extraño estaba pasando.
Intentar buscar respuestas a todo lo que hemos podido leer ver y oír en los últimos meses sería imposible y no llevaría hacía ningún sitio, porque pensamos que una decisión como es la de comprar una nueva consola no creemos que necesite de tantos «alicientes» extras condicionantes como para intentar hacer olvidar una «Line-Up» para el primer año como nunca antes tuvo una consola de Microsoft, cosa que estamos seguros que los aficionados a los videojuegos están contentos por ver que este año ademas del sistema de Sony (Play Station 4) también estará en la fiesta Xbox ONE presentando competencia para que cada uno en su libre decisión elija con que compañía se siente más identificado (o que elijan las dos como muchos usuarios hicieron en esta generación).
Siempre sin olvidarnos de Nintendo, que llego el año pasado con su prometedora WII-U, y que viniendo de una generación como es la actual en la que los tres sistemas (Xbox360, PS3 y WII) han superado los 60 millones de sistemas vendidos y que gracias a estas ventas tenemos nuevos sistemas en breves, no sabemos realmente que puede impulsar para que hayan «jugadores» que parece que no quieren que haya competencia con la que «tu» sistema pueda competir y mejorar para que al final los que salgamos beneficiados seamos nosotros, los que religiosamente pagamos nuestra consola esperando que nos satisfaga en los siguientes años y que la empresa por la que hemos «apostado» siempre tenga que estar pendiente de lo que hace el vecino para que no se duerma en los laureles, e intentar buscar siempre el beneficio colectivo y no el de uno mismo, buscando que nuestro ocio y entretenimiento este en auge para que dentro de ocho años podamos haber disfrutado de la misma manera que lo hemos y estamos haciendo en los ocho anteriores.