El actual CEO de Playstation se mostró confiado en que los reguladores bloqueasen la fusión, tanto que decidió no renovar ninguna prórroga.
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Siguen saliendo detalles a la luz sobre el triángulo no tan amoroso entre la FTC, Microsoft y Sony. Sí, porque los japoneses están siendo el único argumento y parte perjudicada en el proceso. Sobre la compañía nipona está saliendo demasiada información que hubiéramos preferido no saber, aunque Microsoft tampoco se queda atrás.
El caso es que hoy tenemos información relevante, una que podría ser perjudicial para la imagen del propio Jim Ryan con la gestión de Playstation. Porque esto afecta no solo al proceso relacionado con Microsoft, sino a parte del futuro de la compañía.
«Espero que los reguladores hagan su trabajo y bloqueen la compra»
Hoy se han liberado nuevos documentos que a priori eran confidenciales, pero que ya podemos leer sin problemas. En uno de ellos, la propia Microsoft reconoce que fue el propio Jim Ryan el que denegó la posibilidad de extender el acuerdo de Call of Duty más allá de lo estipulado inicialmente con Activision. Recuerdo que Sony y Activision pactaron acuerdos de marketing exclusivos hasta el 2024.
El bueno de Ryan se mostraba excesivamente confiado, siempre según Microsoft. Los americanos aseguran que Bobby Kotick intentó negociar una prórroga, pero el directivo se mostró reacio a ello.
Sony también se niega a prorrogar su acuerdo de comercialización conjunta de Call of Duty con Activision, que expira en 2024. El consejero delegado de Activision, Bobby Kotick, ha intentado hablar de una prórroga de dicho acuerdo con los dirigentes de Sony, a saber, Kenichiro Yoshida, consejero delegado de Sony, y Jim Ryan, consejero delegado de PlayStation. Sin embargo, el Sr. Ryan rechazó la oferta, diciendo que «esperaba que los reguladores hicieran su trabajo y bloquearan» el acuerdo.
Sea como fuere, Phil Spencer se comprometió bajo juramento a seguir entregando Call of Duty en Playstation 5, por lo que parece que en parte no le salió mal la jugada a Ryan. Aunque eso sí, se queda sin ventajas que podrían haberle venido bien.
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