Por fin, el esperado análisis técnico de la versión de Xbox One de Hellblade por parte de Digital Foundry. Os contamos todo sobre la gran versión que podemos disfrutar en las consolas de Microsoft
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Que Hellblade era una maravilla técnica ya lo sabíamos incluso cuando salió solo PS4 y PC, pero con la llegada de Xbox One X, el juego de Ninja Theory ha tocado un nuevo techo en consolas. Aunque haya tardado casi un año en llegar a las plataformas de Microsoft, muchos son los usuarios que han celebrado su llegada. No en vano, en menos de una semana ha vendido 50.000 copias, las requeridas para donar 25.000$ a las asociaciones que ayudan a las personas con problemas mentales, un hecho que les honra y que engrandece el lanzamiento.
Pero a pesar de la calidad que el estudio pretende que vivamos a través de su sonido binaural o a través de su trama, que tratamos en profundidad en nuestro análisis, el que más llama la atención a primera vista es su impresionante aspecto gráfico que luce también genial tanto en Xbox One como en Xbox One X. Hemos tenido que esperar casi dos semanas para este análisis, pero los premios Bafta y los 5 galardones que se ha llevado el juego lo han mantenido vivo en las redes dentro de la actualidad.
En este caso, Digital Foundry es la que firma este nuevo análisis técnico, que ya hicieron en su momento para las versiones de PS4 y PC, pero centrada en las versiones de Xbox One. Precisamente, la versión para One y One S, se sostiene perfectamente, con una resolución de 900p dinámica, pero que consigue mantener los 30fps constantes, asegurando el disfrute a la mayoría de usuarios de la plataforma. En el mismo vídeo podéis ver la comparativa, en las que no existen diferencias que impacten en la experiencia de juego.
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Pero es en Xbox One X donde está la mayor novedad, que ya hemos comentado en nuestro análisis. Y es que de un modo cada vez más similar a lo que ofrece el PC, podremos seleccionar 3 modos gráficos: El modo framerate, el modo resolución y el modo gráficos enriquecidos. Digital Foundry nos proporciona por fin una serie de cifras en términos de resolución, que al ser dinámica en todos sus modos, resulta bastante complicado de averiguar. Y ciertamente, una vez más, la versión de PS4 Pro flaquea en este aspecto, ya que incluso el modo que más resolución alcanza, se queda muy corto con los de Xbox One X, llegando como máximo a los 1440p.
Y la verdad es que podemos afirmar que tanto el modo resolución como el modo gráficos, alcanzan buenas resoluciones, como han aclarado Digital Foundry. Siendo ambos dinámicos y tomando una de las escenas iniciales de referencia, el primer modo alcanza los 1872p. un 88% de lo que sería una resolución 4K, mientras el de gráficos, baja a los 1728p. un 80%, sin embargo, en este último, la calidad gráfica en general sube, lo que lo hace el modo más recomendable. En el modo Framerate, podremos jugar a Hellblade a 60fps clavados en Xbox One X y aún así, la resolución se mueve entre los 1260p y los 1080p, con bajones muy raros a 720p, diferente a la versión de PS4 Pro, que se mueve en los 900p de media para alcanzar esa velocidad de imágenes por segundo.
Si aún estáis dudando si adquirir o no Hellblade por los gráficos os lo decimos ya: no esperéis más, es de lo más potente que se puede ver en vuestra consola. El típico juego que enseñas a alguien cuando viene a casa solo para demostrar como se ve tu consola.
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