Un nuevo juego para toda la familia llega a Xbox One, os dejamos con nuestro análisis de Ginger: Beyond the Crystal.

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Ginger: Beyond The Crystal es un juego de plataformas y aventuras en el cual unos cristales poderosos forman parte de un poblado, estos cristales le dan vida y protección a todas las criaturas. Durante años todo ha estado en paz y tranquilidad, los aldeanos le proporcionaban a la diosa alimentos y ofrendas para que esta siguiera protegiendo su pequeño mundo.

Unos cristales azules enormes controlan todo el poblado dándoles vida pero un día alguien pone un cristal rojo cerca de ellos y es entonces cuando se genera una catástrofe. El cristal gigante se apaga y la diosa crea a Ginger una simpática criatura que tendrá que reconstruir el mundo, purificar los cristales rojos y traer de vuelta a todos los aldeanos que han sido secuestrados.

Ginger tendrá que hablar con los 3 ancianos del lugar, ellos están llenos de sabiduría y le enseñaran las técnicas de combate y los mejores trucos de habilidad para superar cualquier obstáculo en el juego. Tendremos que descubrir todas las sorpresas que nos guardan los 3 enormes mundos del juego, crear casas y hacer unas misiones secundarias que nos proporcionarán los aldeanos.

Apartado Técnico
Ginger: Beyond The Crystal es un juego en 3D que cuenta con unos gráficos muy coloridos y bien definidos. La pega más grande del juego es que en muchas ocasiones sufrimos de unos pequeños freezes, digamos que estamos en algún planeta del juego y la pantalla se congela durante una décima de segundo y sigue.

Ginger tiene una misión devolverle toda la luz a los cristales y rescatar a los aldeanos - ¡Comparte!    

Este fallo sucede en prácticamente todo el juego, da igual que nos encontremos muchos elementos en pantalla o pocos. Por otro lado el framerate es muy estable -exceptuando esos momentos-, el juego tampoco es que tenga que cargar muchos elementos en pantalla pero se mantiene siempre estable incluso cuando nos encontramos con varios enemigos o varios gingerianos en pantalla.

El punto fuerte sin duda es la BSO, ya que es una música muy alegre y tranquila por momentos que acompaña a la perfección a Ginger en su gran aventura. También ponen música de tensión cuando nos enfrentamos a un jefe final o por ejemplo el mundo 2 que está dedicado por completo a Halloween o a películas de terror.

De hecho, la Banda Sonora me ha recordado por momentos a la del mítico Banjoo Kazooie, ya que al menos una de sus canciones está en Ginger: Beyond The Crystal. No es ningún problema, al revés, pero no deja de resultar curioso cuando estás en plena partida y escuchas esa melodía.

Jugabilidad
Eres Ginger y tienes a tú disposición 3 fantásticos mundos para explorar, pero ojo esto no es un picnic o una aventura más, aquí se libra una guerra en la cual somos los protagonistas y tenemos que salvar a todos los gingerianos secuestrados y devolverle la luz al cristal.

En cada uno de los mundos nos encontraremos a gingerianos que nos piden favores o nos proponen que hagamos algunos retos, por ejemplo nos piden 3 manzanas o bien tenemos que hacer un recorrido lo más rápido posible para después poder ganar una suculenta recompensa.

Nada más llegar a un mundo, hablamos con el gingeriano que está al cargo y nos proporciona un mapa, muy útil para localizar todas las misiones, los portales o los elementos para construir las casas de los gingerianos. Para conseguir abrir todos los portales espejo necesitamos rescatar a los aldeanos, esto se consigue con los cristales que hayamos recogido durante nuestra aventura. Nos dirigimos a los cristales de poder que suelen estar en el centro del mundo y vamos rescatando uno a uno, esto hará que suba nuestro medidor que nos indica cuanto porcentaje del mundo hemos completado.

Un juego de plataformas original donde los gingerianos son los protagonistas. - ¡Comparte!    

Una vez que tengamos suficientes, se nos abrirá el siguiente portal, a veces es necesario construir casas para que se desbloqueen. Es muy sencillo, tan solo tenemos que recoger madera, piedra y elementos especiales para poder construir las casas. Pueden ser pequeñas, normales o incluso el mismísimo Ayuntamiento. Cuando rescatamos a todos los gingerianos o construimos un número elevado de casas se nos dará un logro y es muy atractivo.

Cada portal nos lleva a una nueva aventura diferente, podemos encontrarnos cualquier cosa siempre claro esta de la temática que vaya el mundo en concreto. El juego es plataformeo puro y duro pero también nos da la opción de explorar por sus niveles y encontrar más materiales para construir las casas o tesoros entre otras cosas. También en cada uno de estos niveles encontraremos a un gingeriano secuestrado, cuando lo liberamos nos dará un traje específico.

Por ejemplo, tenemos el de juglar con el que tenemos que tocar una alegre melodía al más puro estilo Zelda para que se nos desbloquee el paso y poder seguir avanzando en nuestra aventura. A su vez, contamos con el ratón que puede acceder a zonas inaccesibles reduciendo su tamaño y consiguiendo así una suculenta recompensa o bien entrar en una zona secreta del nivel.

No os contaremos más sobre los disfraces para que vosotros lo podáis descubrir en vuestra aventura, de hecho, son muy importantes y en un mismo nivel nos puede obligar a utilizar varios de ellos para seguir avanzando, lo que le proporciona una mayor variedad y diversión extra al juego.

En cada mundo tenemos un jefe final que tendremos que derrotar, no os preocupéis mucho ya que tienen unas mecánicas bastante sencillas y son fáciles de superar. Al superar cualquiera de los niveles, conseguimos llevar un cristal rojo al mundo principal, ahora tenemos dos opciones: entrar en él y purificarlo o bien dejarlo allí. Digamos que no tenemos que purificarlo a la fuerza para seguir avanzando.

En el interior de cada cristal rojo tenemos un nivel de plataformeo para los más exigentes donde tendremos que conseguir un número de cristales rojos, cuando lo consigamos habremos superado el desafío y habremos conseguido purificar el cristal. Os recomendamos hacerlos por la sencilla razón de que en ellos hay desperdigados muchos y pequeños diamantes azules los cuales nos sirven luego para rescatar aldeanos.

Al principio veréis piedras gigantes con caras sonrientes que nos cortan el paso, telarañas o bien muchos cofres desperdigados por cada mundo. Todo tiene una explicación y va directamente relacionada con los trajes que puede usar Ginger en su aventura y con la habilidad que cada uno nos ofrece. Por cierto, para purificar los diamantes rojos solo lo podremos hacer con la apariencia original.

En todos los niveles disponemos de puntos de guardado, la vida de Ginger está formada por unas hojas que van desapareciendo según el daño que este vaya recibiendo. Si acaban con todas pues el juego nos devolverá al último punto de guardado. No tenemos pociones o comida para subir la vida. Simplemente cuando reaparecemos en un punto de guardado tenemos la vida al completo. Es un buen sistema ya que hay muchos puntos de guardado desperdigados por los niveles, nunca nos quedaremos lejos de nuestro objetivo a no ser que seamos muy cazurros y no hayamos guardado en ninguno de estos puntos.
Duración
Depende un poco si lo queremos completar entero con todos sus secretos o bien ir a por su aventura principal, digamos que el juego nos puede llegar a durar 7-8 horas si nos centramos en terminar los 3 mundos y todos sus niveles. Ya si nos ponemos a purificar todos los diamantes y descubrir todos sus secretos pues puede llegar perfectamente a las 10 horas.

Para ser un juego indie la duración es más que aceptable, de hecho tiene mucha variedad en sus niveles tanto estéticamente como en el reto que supone pasarlos.

Conclusiones

Ginger: Beyond the Crystal es un juego para toda la familia, es muy sencillo y accesible lo que le hace un juego perfecto para que cualquiera pueda coger el mando y disfrutar de esta gran aventura. El plataformeo es sencillo y en ocasiones exigente sobre todo cuando vamos a purificar alguno de los cristales rojos.

El juego está doblado en sus cinemáticas pero como el idioma que hablan en el juego es el gingeriano pues estas partes no están dobladas, eso si nos aparecen unos textos bastante grandes para enterarnos de todo. Digamos que los gingerianos emiten unos ruidos raros y no digamos ya sus animales de compañía.

Aparte del plataformeo, el juego nos obliga a explorar si queremos sacarle todo el jugo y además de eso nos hace que usemos cada uno de los trajes que encontramos en nuestra aventura cada uno con sus habilidades propias para acceder a zonas que de otra forma serían imposibles. Eso está muy bien ya que le otorgan al juego una originalidad bastante sorprendente.

La variedad de enemigos y situaciones es la seña de identidad de Ginger: Beyond The Crystal - ¡Comparte!    

Digamos que si te gusto Banjo Kazooie este juego te encantará ya que bebe de muchas de sus premisas jugables. En Banjoo eran transformaciones y en este son los disfraces los que nos dan habilidades y situaciones jugables diferentes.

Los enemigos también son bastante variados y depende del mundo donde estemos, van desde ranas sanguinarias, pasando por Frankensteins rabiosos o extraterrestres con muy mala leche. Podemos acabar con ellos de formas muy diferentes, saltando sobre ellos y cayendo con fuerza, con un puñetazo normal o con uno cargado. Algunos tienen más vida que otros y tendremos que darle más golpes, pero tampoco es que suponga un reto muy difícil acabar con ellos ya que la IA es limitada y sigue unos patrones bastante predecibles.

En definitiva, si buscas salir de la rutina de tanto shooter y quieres un juego de plataformas divertido, con buenos gráficos, una gran BSO y original este es tú juego. Sus niveles están diseñados con mimo, tienen alguna que otra sorpresa la mar de simpática pero nada que no se pueda superar usando un poco la cabeza.

Pros	Contras
* Variedad en sus niveles	* Algunos microcortes
* Los disfraces son TOP	* IA limitada y predecible
* Fantástica BSO
* Plataformeo para toda la familia
* La exploración

*Gracias a Badland Games por habernos proporcionado el material para la review.