Epic Games sigue luchando por el crossplay entre Xbox y PlayStation

Donald Mustard, director creativo de Epic Games, confiesa que están haciendo todo lo posible para conseguir el crossplay entre Xbox y PlayStation.

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Epic Games estuvo presente en The Games Award esta pasada madrugada para presentar el nuevo modo 50 vs 5o de su título multijugador masivo Fortnite, pero también hubo tiempo para reivindicar el reclamado crossplay entre Xbox Live! y PlayStation Network, una funcionalidad que sabemos que existe pero que no está activa debido a las reticencias de Sony por permitir que sus videojuegos puedan ser crossplay con las plataformas de la competencia.

El pasado septiembre, Epic Games activó por error el crossplay online entre Playstation 4 y Xbox One en su recién estrenado Fortnite. Para tristeza de todos, los desarrolladores tuvieron que desactivarlo en cuanto Sony se enteró de la jugada, ya que están totalmente en contra del crossplay online entre plataformas, algo que no es exclusivo de Xbox Live!, ya que también se han negado a que Rocket League pueda tener crossplay con Nintendo Switch, una funcionalidad que solo comparten con PC y las consolas de Microsoft, quienes siempre han sido partidarios de esta propuesta.

Pero esto no significa que Epic Games haya dejado de luchar por incluirla. Y es que esta misma madrugada, Geoff Keighley, presentador y creador de The Game Awards sorprendía a Donald Mustard, director creativo de Epic Games con una pregunta que muchos esperábamos: ¿Cuándo veremos el crossplay entre consolas para Fortnite? Haciendo una pausa, Mustard contestaba de forma muy emotiva que Fornite es un título que mejora cuando lo juegas con tus amigos, y debido a ciertas restricciones de plataforma, hay jugadores que no pueden hacerlo. «Los jugadores quieren el crossplay», ha espetado, «Y Epic Games está comprometida a hacer lo que sea necesario para conseguirlo. Los jugadores se lo merecen».

¿Hasta cuánto durará la reticencia de Sony? En la compañía japonesa deben pensar que el crossplay supondría menos ventas para su consola, forzando a los usuarios a comprarse una PlayStation 4 si quieren jugar con sus amigos a ciertos títulos multiplataformas. Esta es una decisión muy proteccionista que no casa para nada con las estrategias de las otras dos jugadoras en la guerra consolera, Nintendo y Microsoft, que siempre han estado dispuestas a permitir dicho crossplay. De hecho, no hace mucho, el propio Aaron Greenberg expresó que se sentía optimista de cara a un cambio de rumbo por parte de Sony. ¿Llegaremos a verlo en esta generación? ¿Vosotros qué creéis?