El canal de Youtube Digital Foundry realiza un análisis técnico del rendimiento de PUBG, tanto en Xbox One S como en la nueva Xbox One X.
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Esta noche en muchos hogares se cenará pollo, PUBG ha llegado por fin a Game Preview, y los fans de Xbox se han lanzado a probarlo en sus consolas. Aunque se han incluido de salida algunas cosas que tardaron en llegar en la versión de Steam, como unas animaciones más naturales, la versión es aún temprana y necesita muchos ajustes. Aún con todo Digital Foundry ha querido analizar esta primera aproximación de PUBG en consolas, para contar a los compradores qué pueden encontrar hoy en el juego de BlueHole.
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Lo que se encuentran es lo esperable, texturas que tardan en cargar, un framerate que tarda en alcanzar los 30fps, y un juego en general de rendimiento irregular, que además no luce demasiado bien, a pesar de alcanzar los 1080p en Xbox One S y los 4k en X. Los propios chicos de Digital Foundry reconocen que PUBG nunca ha sido una experiencia muy optimizada en PC, y haber visto casos peores, en cuanto a rendimiento, cuando la versión de Steam estaba en una fase más temprana.
Obviamente la versión de Xbox One X se mantiene casi siempre por encima de la de su hermana pequeña, con diferencias entre los 6 y 10 fps, texturas que cargan más rápido, y por supuesto la resolución. Es destacable que el soporte para HDR esté implementado ya desde la salida del juego. Digital Foundry ha detectado también que por algún motivo el modo espectador, que te brinda la posibilidad de ver las acciones de un compañero si tu personaje ha muerto, muestra un rendimiento peor que si manejásemos nosotros al personaje, lo que denota que gran parte de los problemas de rendimiento son achacables a la optimización.
Curiosamente, tal y como muestra el vídeo, en algunos momentos de repente el juego empieza a rendir a los 30fps prometidos en ambas consolas sin razón aparente, señal de que ambas consolas no tienen ningún impedimento de potencia para no ejecutar decentemente en PUBG. Volvemos a recordar que estamos en una primera versión, en un estado aún temprano, y que si bien es plenamente jugable aún necesita bastante maduración para ser un producto pulido.