Del fracaso al éxito en tiempo record, bienvenida Xbox One
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Hacemos hoy un breve recorrido por los acontecimientos que han acompañado el devenir de Xbox One en honor a su aniversario.
Todos recordamos con cierta tristeza los acontecimientos que precedieron al Reveal de Xbox One hace más de un año. Por aquella época un desorientado Don Mattrick nos intentaba convencer de que Microsoft iba a revolucionar el mundo del videojuego con su nuevo sistema de entretenimiento al cual decidieron nombrar Xbox One en honor al renacimiento de una nueva era, Xbox One era la primera en su género pese a tener dos hermanas mayores.
Esta consola era distinta, iba a ofrecer todo el entretenimiento en un solo lugar y venía cargada de novedades y bondades para el usuario. Solo había un problema que sortear y ese era el intentar explicar al mundo como querías revolucionar la industria. La atenta mirada del público se posaba sobre la consola de Microsoft, solo era cuestión de argumentar que podía ofrecernos pero por algún motivo los de Redmond no supieron vendernos a todos la misma idea. Hay quien habla de conspiraciones, yo prefiero centrar la culpabilidad en una falta de argumentación del producto; en Microsoft no supieron trasladarnos su idea y la competencia supo aprovechar esa ventaja.
Tras numerosas y desafortunadas declaraciones por parte de la cabeza responsable, los fans de la marca decidieron alzar su voz y condenar de manera precisa los acontecimientos. Los trolls de internet ayudaron y mucho al renacimiento de Xbox One sin duda ya que han supuesto un argumento más para no quedarse atrás con respecto a la competencia.
Pero lo cierto es que la idea inicial seguía latente y es por eso que en Microsoft decidieron quemar un último cartucho. Este era sin duda el recurso de Phil Spencer el cual tomó las riendas en Marzo de 2014 y desde entonces no ha parado de hacer cosas; y no ha parado de hacer cosas bien hechas como por ejemplo revocar algunas políticas confusas que aún no estaban definidas de cara al usuario final.
La idea de un «gamer» al frente de una división de videojuegos es algo que se debería haber tomado en consideración desde la concepción de esta. Tras la llegada de Spencer al frente, el panorama empezó a cambiar; hay quien piensa que la propia deriva de la industria ha sido la que ha propiciado este ascenso, pero nosotros creemos que los fuertes de Spencer al mando han sido los siguientes:
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- Prioridad en la mejora de los kits de desarrollo.
- Mejora continua del flujo de actualizaciones y feedback del usuario.
- Apertura y flexibilidad de las políticas para los desarrolladores independientes así como los incentivos para estos.
- Catalogo creciente de juegos first y third party.
- Flexibilidad en la opción a compra relegando a Kinect a un complemento.
- Abrir la posibilidad a comprar en otros bazares.
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Seguro que se nos escapan muchas directrices más pero como podéis observar la senda de cambios junto con los ya heredados por la etapa Mattrick han sido beneficiosos para el usuario final, compartir la cuenta Gold con todos los miembros de una misma consola, regalar dos juegos al mes como veníamos disfrutando en Xbox 360 o simplemente dando valor a las membresias Gold para justificar su compra como los servidores dedicados en los juegos; algo que no ha sabido aprovechar su competencia.
Y es que es aquí donde ser miembro de Xbox Live empieza a cobrar sentido; ahora y mirando en retrospectiva es un valor profundamente diferenciador con respecto al resto de competidores. La sinergia entre consola, PC , web y smartphone hacen que estar conectado sea una experiencia constante por ejemplo. Compartir tu cuenta, compartir juegos, recibir dos juegos al año y tenerlos en propiedad para siempre o sencillamente el poder utilizar servicios añadidos como EA Access dotan al servicio de mucha salud. La seguridad de nuestros datos sigue siendo un factor importante y por el momento el servicio se mantiene férreo.
Todos estos factores han hecho que Xbox One haya pasado de una muerte anunciada a todo un éxito; al menos así lo aseguran sus cifras de ventas que no paran de crecer y las numerosas declaraciones de socios como Electronics Arts así lo respaldan. Es por ello que desde mi humilde opinión deseo que el cambio siga su curso.