Editorial: La ausencia de Forza Horizon 5 en los GOTY deja a los TGA en evidencia

Los nominados al GOTY de los The Game Awards se han anunciado y la ausencia de Forza Horizon 5 es absolutamente escandalosa.

Más historias en la categoría Editorial

• Cuidado al canjear muchas tarjetas de regalo de Xbox: varios usuarios reportan bloqueos de cuenta
• ¿Nunca has jugado Assassin’s Creed? Este es el que deberías probar primero en Xbox Game Pass
• 20 años de Xbox 360: aniversario de una consola histórica

No te pierdas nada y ¡Síguenos en Google News!

---

La lista de nominados a cualquier premio siempre es motivo de discusión. Las diferencias entre gustos de público y crítica suelen estar presentes en este tipo de decisiones, pero a veces estas pasan algunas líneas que no hacen más que reflejar una tendencia de la industria que por mantenerse fieles a lo que siempre funciona, se alejan mucho de la evidente realidad. El resultado, es que unos premios que deberían ser una celebración, una alegría para cada usuario representado por sus juegos favoritos, se convierte en una auténtica decepción y las evidentes preguntas: ¿Para quién son estos premios? ¿A quien tienen en cuenta? ¿Realmente son representativos de la realidad?

Y es que la industria a veces no deja de dar la sensación que por mucho que se esfuercen algunos desarrolladores, no hay sitio para ellos. La corriente siempre lleva el mismo agua: Los juegos más esperados son siempre los mismos, el director más laureado es siempre el mismo y solo los afortunados indies que la crítica ha elevado pueden entrar en este cupo que permanece cerrado… también casi siempre para los mismos.

La industria no deja de dar la sensación de que siempre deben estar los mismos

No comprendemos por qué extraño motivo un juego, normalmente con historia, buenos gráficos, y generalmente para un solo jugador suele tener más peso en estos premios, y en general para la industria. Directamente explica el porqué se generaliza que una sola entrega de God of War vale más que un Sea of Thieves, un State of Decay 2 y un Forza Horizon 4, un caso real de lo que sucedió en 2018 y que al recordarlo hoy en día sabiendo la progresión de unos y otros, sabe incluso peor. Y ya se ha discutido en otros años, pero sigue resultando extraña la insistente opacidad de los que eligen estas nominaciones de los The Game Awards, las cuales, sinceramente, cada vez van perdiendo más y más importancia en la comunidad. ¿Cómo puede ser que uno de los mejores juegos del año haya sido nominado solo por accesibilidad y su sonido?

Forza Horizon 5 es el más valorado y el más jugado ¿Que más hace falta?

Por esta misma cuestión que expongo, cuando analicé Forza Horizon 5, lo primero que pensé es que no sólo es el mejor juego de coches que había probado, si no que fácilmente es el mejor juego del año, o como mínimo, está entre los 5 mejores. Pero, después de más de un lustro siguiendo la actualidad, me pregunté: ¿Un juego exclusivo de Xbox y PC entre los mejores? No lo flipes. Y encima «de coches». Pero es que tras ver sus resultados, sus reviews y las opiniones, los números están ahí: No sólo vale la opinión casi unánime de la crítica, es que realmente es uno de los más valorados del año en Metacritic. Más de 1 millón de jugadores antes incluso del lanzamiento oficial. Más de 8 millones en la primera semana. Y probablemente esta cifra gane un dígito más antes de que termine el año. LOS NUMEROS ESTÁN AHÍ.

Que Forza Horizon 5 no aparezca entre los nominados a mejor juego del año es tan extraño que parece casi intencionado. Hace sólo unos pocos días que salió. Y entra dentro del límite que tienen en cuenta para confeccionar la lista, algo para lo que evidentemente, Halo Infinite se ha quedado fuera, pero en los The Game Awards o hay algo que no funciona bien, o hay algo que no huele bien. De hecho, esta selección la hace un Jurado entre los que están los medios, críticos e influencers más importantes, cuya lista completa no se desvela para que no se coarte a nadie. Es el primer escalón de opacidad, casi hasta cierto punto comprensible. Pero lo peor no está ahí. Es que tras estos nominados, el peso de la votación vuelve a recaer en ellos en un 90% y sólo un 10% para lo que elijamos en la web de los TGA los usuarios, lo que de nuevo no sólo pone en cuestión el criterio de selección, si no también el de los ganadores.

¿Un juego exclusivo de Xbox y encima de carreras? Descartado.

Todas estas sin razones se ven alimentadas por una constante necesidad de Geoff Keighley de mostrar exagerada efusividad con todo lo que venga de Sony o de Kojima. No nos entendáis mal, cada uno con sus gustos, pero también es cierto que es algo más que evidente si lo seguís en redes como casi ofrece reverencia ante el creador de Death Stranding. También sabemos que él mismo asegura y perjura que solo se encarga de la organización y que no interviene para nada en este tema de la selección de candidatos, pero no deja de ofrecer continuamente una «pantalla» en la que solo aparecen… los mismos de siempre.

Y es que en un evento de estas características intervienen muchas manos que ayudan económicamente a levantarlo, algo que agradecemos con sinceridad a la organización y al propio Keighley porque sin él, probablemente no habría nadie que intentara mover tal cantidad de nombres, organizaciones y personas para ofrecernos un auténtico espectáculo del cual estoy seguro que nadie quiere dejar de verlo.

Pero, recapitulemos: Un juego, de los mejores puntuados del año, en el que la inmensa mayoría de medios que participan en esta votación también lo han valorado como ‘excelente’, un juego al que probablemente la mayoría de ellos, estarán jugando. ¿De verdad solo merece una mención en las categorías de mejor audio y mejor accesibilidad? La representación de méxico, la belleza de sus escenarios, la maestría de su diseño jugable, la enorme cantidad de jugadores en solo una semana, la opinión de la mayoría de los críticos, la adoración de muchos influencers… ¿QUE HACE FALTA PARA QUE ESTÉ NOMINADO AL GOTY? ¿Ustedes lo entienden? Yo no lo entiendo. Por eso la gente, comienza a hablar del tema. Y no cosas buenas.