Analizamos Wasteland 3, título desarrollado por InXile Entertainment que nos llevará de nuevo a un mundo post-apocalíptico con cientos de cosas por hacer.
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Si hablamos de mundos post-apocalípticos en los videojuegos es más que probable que tu cabeza se vaya directamente a la saga Fallout, y es que aunque esta saga desarrolla una historia magistral lo cierto es que no fue el primer videojuego en explotar de forma fantástica este tipo de ambientación. El primero en hacerlo fue el Wasteland original y pese a ser lanzado en 1988 aún es recordado con mucho cariño por jugadores «de la vieja escuela» al llevar la experiencia del rol de mesa a los videojuegos de manera genial.
32 años después recibimos Wasteland 3, la 3ª entrega de esta saga desarrollada por InXile Entertainment y dirigida por Brian Fargo. Esta nueva entrega cambia el característico aspecto desértico que ha protagonizado las 2 entregas anteriores por un páramo helado igual de peligroso. La historia nos lleva a trabajar para El Patriarca, un despiadado líder que promete al grupo de Rangers recursos a cambio de ayudarle en la peligrosa misión de dar con sus 3 hijos, los cuales buscan acabar con él para hacerse con el trono.
Wasteland 3 sigue en la línea de sus entregas anteriores, apostando por una narrativa muy profunda, un sistema de desarrollo de personajes muy similar a los juegos de rol de mesa, un combate por turnos al más puro estilo X-COM y una continua toma de decisiones que afectará notablemente a la partida de cada jugador. ¿Conseguirá este Wasteland 3 convertirse en todo un referente del rol más clásico? Vamos a descubrirlo.
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Apartado técnico
Pese a que Inxile Entertainment forma ahora parte de Xbox Game Studios, Wasteland 3 comenzó a tomar forma gracias a una exitosa campaña de crowfunding que llegó a recaudar la impresionante cifra de 2,75 millones de dólares en apenas 3 días. Este hecho se hace patente especialmente en el apartado técnico del juego, y aunque esto no quiere decir ni mucho menos que flojee al respecto, sin duda hace que el juego pueda no entrar por la vista.
El modelado de los personajes es bastante correcto, y lo cierto es que el diseño de la gran multitud de armas y armaduras, así como de los enemigos y PNJ está realizado con bastante mimo. Sin embargo no podemos decir lo mismo de las animaciones de los personajes, y es que estas dan la sensación de ser demasiado robóticas e incluso llegan a fallar en algunas ocasiones, especialmente cuando colocamos a un personaje en una zona donde recibe cobertura de dos elementos a la vez.
Sin embargo, el principal y mayor problema que tiene Wasteland 3 es su rendimiento. Hemos tenido algunos problemas a la hora de jugar nuestra partida para realizar este análisis, entre los que destaca especialmente varios crasheos que nos han hecho perder incluso más de 30 minutos de partida. Además el juego sufre algunas ralentizaciones en zonas especialmente concurridas, o en algunos combates donde hay varios enemigos y PNJ en pantalla. No nos podemos olvidar por supuesto de las pantallas de carga, y es que estas son tremendamente largas y muy numerosas.
Por supuesto no todo es malo dentro del apartado técnico de Wasteland 3, y es que sus escenarios nos han encantado. Especialmente destaca su diseño artístico, y es que tanto las zonas exteriores que visitaremos con nuestro imponente vehículo, como las zonas habitadas por PNJ o las distintas zonas de combate tienen multitud de detalles, y cuentan con una que harán que no nos cansemos de explorarlos.
Otro punto que nos parece superlativo se encuentra en la narrativa, y es que es apabullante la cantidad de líneas de diálogo que tiene el juego. Pese a tener únicamente disponibles las voces en inglés, el juego se encuentra totalmente traducido al castellano, algo que como os decimos siempre es de agradecer. Por supuesto no nos podemos olvidar de su banda sonora de Wasteland 3, que acompaña de manera soberbia la experiencia de juego, tanto en las zonas más tranquilas como en los combates.
Jugabilidad
Si habéis llegado leyendo hasta aquí podréis estar pensando que el juego tiene más sombras que luces, pero nada más lejos de la realidad. Wasteland 3 llega para convertirse por méritos propios en todo un exponente del rol más tradicional, y es que llegados a este punto no podemos encontrar muchos más defectos en el juego.
Como ya os hemos dicho anteriormente, Wasteland 3 sigue la senda de sus anteriores entregas, y se aprovecha de una soberbia narrativa y una jugabilidad clásica para ofrecernos una experiencia que disfrutar poco a poco y sin ninguna prisa. Puede que el juego peque de ser un tanto continuista en este aspecto, y es que no posee grandes novedades. Sin embargo esto no es nada malo, y es que pese a que se siga valiendo de la misma base y los mismos elementos lo hace de una manera tan sobresaliente que difícilmente podremos ponerle alguna pega al respecto.
Detente Ranger, piensa bien lo que haces
Para analizar bien la jugabilidad de este título es conveniente separarla en los 3 pilares sobre los que se sustenta: gestión, toma de decisiones y combate. Si no eres un gran fan de este tipo de juegos puede que pienses que la gestión no será tan importante, pero si pretendes sobrevivir en el páramo helado de Wasteland 3 tendrás que pasar varias horas configurando y gestionando tu grupo, especialmente si decides jugar en el nivel más alto de dificultad de los 4 disponibles. Por supuesto no nos referimos solo a gestionar personajes, y es que controlar nuestro inventario será igual de importante ya que en cualquier momento nos podremos quedar sin munición y ser presa fácil.
Al comenzar el juego tendremos que elegir una pareja de personajes de entre una serie de predeterminados, o por el contrario crearlos desde cero. En este punto será donde empezaremos a darnos cuenta de lo importante que será construir nuestro grupo con cabeza, y es que deberemos llevar siempre personajes con habilidades y características que se complementen. Podremos llegar a llevar a 6 personajes a la vez, tanto creados como ciertos personajes de la historia que podrán acompañarnos si así lo queremos. Es interesante este elemento ya que ciertos PNJ reaccionarán de una forma u otra si llevamos a este tipo de compañeros en nuestra aventura.
Una de las mayores virtudes que posee Wasteland 3 reside en la posibilidad de afrontar la mayoría de situaciones de muchas formas distintas, y en gran parte es posible gracias a las diferentes habilidades que tendremos disponibles. Por poner un par de ejemplos, la habilidad Apertura nos permitirá abrir ciertas puertas que nos permitirán colarnos por la retaguardia de los enemigos, así como la habilidad Lameculos conseguirá que los PNJ se crean cualquier bobada que se nos ocurra contarles y hará que se posicionen de nuestro lado.
Sobrevive en el Yermo disparando y hablando a partes iguales
Fuera ya de su completo menú de gestión y personalización de personajes tendremos que movernos por un Colorado donde la exploración la haremos a pie la mayoría de niveles, aunque el juego cuenta con un amplio mapa por el que nos moveremos con nuestro vehículo. El título cuenta con varias facciones, a la cual más extraña y peculiar, y aunque de entrada habrá algunas que quieran matarnos nada más vernos y otras que serán bastante amables puedes estar tranquilo, y es que si algún grupo quiere tu cabeza y no te apetece acabar con ellos tendrás la posibilidad de establecer una alianza. Si tienes la suficiente labia o estás dispuesto a ensuciarte las manos, claro.
Aquí es donde entra en juego la toma de decisiones, y es que esta tiene mucho peso dentro de Wasteland 3. Nos encontraremos en multitud de situaciones donde nuestras acciones o palabras afectarán a como nos ven las diferentes facciones, pudiendo llegar a conseguir que un grupo que inicialmente nos pedía ayuda acabe poniendo precio por nuestro cadáver. En este sentido la narrativa funciona perfectamente, y es que lejos de ofrecernos decisiones donde todo sea negro y blanco solo encontraremos grises por todos lados que harán que pensemos muy bien que hacer.
Por supuesto no todo será hablar, y es que si así lo queremos podremos resolver todas las situaciones a base de tiros y tortazos. El sistema de combate funciona de manera muy similar al de la saga X-COM, lo que quiere decir que estamos ante un sistema de combate estratégico por turnos limitados a nuestros Puntos de Acción, y donde un movimiento mal calculado puede hacer que uno de nuestros personajes caiga en combate rápidamente, y más teniendo en cuenta si activamos su modo permadeath, el cual llegará próximamente. En este sentido funcionan muy bien las distintas clases de armas que tendremos disponibles, por lo que será importante que dentro de nuestro equipo tengamos por ejemplo un francotirador o un experto en armas pesadas.
No podemos terminar de hablar de la jugabilidad sin contaros que el juego dispone de un modo cooperativo donde podremos crear una sala pública o invitar a un amigo para completar todo el juego si así lo queremos. El equipo de personajes al completo se dividirá en dos subgrupos de 3, y será responsabilidad de cada jugador su control y configuración. Este modo es bastante interesante y aunque de inicio puede parecer que no le sienta bien a un videojuego de este tipo lo cierto es que funciona muy bien y es un añadido muy a tener en cuenta.
Duración
El propio Brian Fargo afirmaba una semanas antes del lanzamiento de Wasteland 3 que este tendría «un tamaño épico«, y no exageraba. El título sigue el esquema tradicional de los juegos de rol, por lo que contiene una misión principal bastante marcada que se complemente a la perfección de un gran número de misiones secundarias. Estas últimas no solo las recibiremos de personajes importantes, y es que en ocasiones una conversación con un personaje al azar que nos encontremos en un asentamiento nos puede llevar a una misión secundaria totalmente inesperada.
Sin entrar en spoilers, desde el comienzo del juego tendremos la posibilidad de ir a por la misión principal entera, aunque por supuesto esto sería todo un suicidio. El juego nos invita de esta manera a que vayamos explorando y completando misiones para lograr subir de nivel y mejorar a nuestros personajes para así enfrentarnos a los retos que nos aguardan en las misiones importantes. Es por ello que para completar Wasteland 3 puedas necesitar en torno a las 60-70 horas de juego.
Si esta cantidad de horas puede parecer abrumadora estamos hablando de una duración bastante normal, jugando en su nivel de dificultad normal y dejándote atrás misiones secundarias y zonas por explorar. Si decidimos optar por una experiencia más difícil o completa no es descabellado decir que Wasteland 3 puede durar más de 100 horas, cifra que no está al alcance de demasiados títulos.
Conclusión
Llegados a este punto nos gustaría decir que Wasteland 3 es el juego de rol tradicional definitivo, y desde luego argumentos para ello no nos faltarían. Su narrativa es de lo mejor que hemos visto en un videojuego, y conseguirá que estemos pendientes de cada palabra y cada línea de texto que aparezca en pantalla puesto que su historia está desarrollada para engancharnos desde el primer minuto de juego. La distancia que toma el juego de decisiones morales muy marcadas es simplemente genial, y es que como en la vida real nos encontraremos con malos que no son tan malos.
A esta le acompañará un sistema de gestión y personalización de personajes que, si bien es cierto no innova nada que se haya hecho antes, nos permitirá configurar nuestra experiencia de muchas formas distintas y que funciona a la perfección. El combate es muy divertido y entretenido, y su experiencia pausada no se hará aburrida en ningún momento ya que la variedad de enemigos, escenarios y situaciones harán de cada combate todo un desafío para nuestros cerebros. Su apartado técnico es de una calidad bastante loable, encontrando en el juego algunas zonas que son bastante bonitas y cargadas de detalles.
Sin embargo el juego adolece de algunos problemas técnicos y de rendimiento que lastran la experiencia de juego. Las pantallas de carga son terriblemente largas, y en ocasiones deberemos sufrir 2 o 3 casi seguidas para completar una misión que puede no durar tanto. Además, algunos fallos en las animaciones o incluso crasheos pueden aparecer frecuentemente y molestarnos bastante. Es de esperar que estos errores sean solucionados (o al menos, reducidos) con el paso del tiempo gracias a los diferentes parches que vaya recibiendo el título.
En definitiva estamos ante un juego sobresaliente recomendado para todos los amantes del rol clásico o para aquellos jugadores que no habiéndose enfrentado nunca a un juego de este tipo quieran iniciarse en ello, más aún teniendo en cuenta que es gratis para todos aquellos que dispongan de una suscripción de Xbox Game Pass.