El estudio españo Numantian Games triunfa con su título They Are Billions, que mezcla a la perfección los conceptos de tower defense y estrategia en tiempo real. Analizamos su versión para Xbox One.
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They Are Billions ha sido uno de los grandes triunfadores en la escena independiente de los últimos años. El título desarrollado por el estudio español Numantian Games fue lanzado con acceso anticipado a principios de 2018 en Steam, cosechando grandes elogios por parte de todos los jugadores y llevándose puntuaciones muy altas desde entonces.
Ahora, el popular juego que mezcla la estrategia en tiempo real y el tower defense llega por fin a consolas, mostrando así la buena salud con la que cuenta un título que se ha decidido a dar el salto desde PC.
En They Are Billions tendremos que construir un refugio en el que deberemos sobrevivir a las oleadas de zombis que irán apareciendo a lo largo de la partida, gestionando la defensa de nuestro fuerte y organizando tanto los recursos como la expansión de nuestras fronteras.
Vamos a ver con más detalle qué nos podemos encontrar en They Are Billions los usuarios de Xbox One.
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Apartado Técnico
Lo más llamativo en They Are Billions es lo cuidado que está estéticamente. Los mapas son detallistas y bien trabajados, así como el apartado artístico de cada una de las partes, incluyendo edificios y personajes. Con una estética que mezcla el steampunk con un mundo postapocalíptico y devastado, consigue que nos olvidemos de un apartado gráfico sin grandes alardes pero que cumple a la perfección.
Técnicamente el juego cumple sobradamente, no encontramos tirones de ningún tipo y en general, la partida se desarrolla de forma fluida pese a las grandes oleadas de zombies que pueden llegar a juntarse, a las que hay que sumar nuestras propias unidades de defensa. En cualquier caso, como decimos, técnicamente cumple a la perfección y no se puede achacar ningún problema al juego en este sentido.
En cuanto a su apartado sonoro, cumple con una banda sonora que pasa demasiado desapercibida, pero con un sonido ambiental bien conseguido en general.
Jugabilidad
They Are Billions tiene una adaptación al mando muy, muy conseguida, la jugabilidad es sencilla y logra que nos movamos con fluidez por los menús del juego, así como manejar y seleccionar a nuestras unidades.
Ahora bien, a los que somos más “viejunos” y hemos jugado a muchos títulos de estrategia, el hecho de que They Are Billions sea compatible con el uso de ratón es simplemente una maravilla. Así, una vez comprobado el buen funcionamiento del dispositivo, particularmente se me hizo imposible volver al mando ante la comodidad de jugar con ratón. Un acierto muy de agradecer y un puntazo que sin duda muchos aprovecharéis.
En cuanto al juego, lo primero que llama la atención es que la versión de consola no dispone de todo el contenido que tiene la de PC. En este sentido, ahora mismo los usuarios de Xbox y PS4 no contamos ni con el modo Campaña ni con los mapas de la comunidad.
¿Qué tiene modos entonces nuestra versión? Los modos Supervivencia y Desafío semanal.
Donde nos pasaremos más tiempo, sin duda, es en el modo Supervivencia. Aquí, tendremos que sobrevivir durante un tiempo determinado -a mayor tiempo elegido menor dificultad en el modo- intentando crecer lo más posible para poder ir aguantando las hordas de zombis que irán llegando paulatinamente, hasta una última horda final.
En este sentido, tenemos que decir que They Are Billions no es un juego fácil en absoluto. Cualquier error puede condenar una partida que teníamos controlada. Por ejemplo, si nos dejamos una zona desprotegida por la que un zombi puede colarse, al atacar una casa infectará a sus habitantes, lo que hará que tengamos al enemigo dentro y que la plaga se extienda con rapidez. En caso de no conseguir controlarla a tiempo, acabará con toda la población. Ah, y os aseguro que en las hordas finales son millones de ellos, incluso en el nivel más fácil.
Así pues, They Are Billions es un desafío constante que nos hará tomar decisiones importantes, ya sea elegir la dirección para expandir nuestras fronteras, lo que determinará los materiales que encontremos o lo vulnerables que serán las defensas del poblado, así como los recursos que iremos invirtiendo para mejorar la infraestructura y las unidades de combate.
El hecho de que They Are Billions sea compatible con el uso de ratón es simplemente una maravilla.
Asimismo, hay diferentes tipos de zombis, que tendrán características, ataques y resistencias diferentes, por lo que tendremos que conocerlos bien para saber cómo defendernos mejor, entrando aquí la parte más tower defense del título, que consigue mezclar a la perfección este concepto con el de RTS.
Por último, en el Desafío Semanal podremos jugar con otros jugadores en un mismo mapa, en el que tendremos que sobrevivir la mayor cantidad de tiempo posible.
Una verdadera lástima la ausencia de los modos antes citados, que seguro completarían la experiencia de juego. Esperemos que sean añadidos en el futuro.
Duración
Como buen juego de estrategia, la duración será la que nosotros queramos. Pudiendo elegir los diferentes niveles de dificultad y encarando las partidas de diferente manera, el título puede darnos cientos de horas sin que nos demos cuenta.
They Are Billions no es un juego fácil en absoluto.
De nuevo, echamos en falta la Campaña y sobre todo los mapas de la comunidad, siendo estos últimos un elemento capaz de convertir al juego en una experiencia con posibilidades ilimitadas.
Conclusión
They Are Billions ha triunfado en su paso por PC y estamos seguros de que lo hará en consola. Es un título desafiante y difícil, pero a su vez tiene un acceso sencillo para principiantes. Además, la posibilidad de jugar con ratón hace de la experiencia de juego algo fluido y agradable en este sentido.
A la espera de saber si contaremos en el futuro con el modo Campaña y los mapas de la comunidad, por ahora podremos echar incontables horas en un título que sin duda es una pequeña obra maestra del género que por tan solo 24,99 euros debería estar en la biblioteca de cualquier amante de la estrategia en tiempo real.
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