The Good Life es un juego caótico, para bien o para mal encuentras muchísimos elementos.
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The Good Life es el último juego de White Owls y Hidetaka Suehiro, también conocido como Swery. En él eres Naomi Hayward, una neoyorquina fotoperiodista que ha acumulado una grandísima deuda, para saldar la deuda te han enviado a una ciudad inglesa llamada Rainy Wood, «la ciudad más feliz del mundo», en este lugar debes con tu cámara y habilidades descubrir un importante secreto.
Rápidamente parece que descubres el gran misterio, cuando hay luna llena y exactamente a las 11:00pm los habitantes de Rainy Wood se convierten en perros y gatos, de hecho tu también pronto puedes transformarte en un gato (y más adelante en un perro). Sin embargo, ese no es el secreto que te enviaron a descubrir y tus labores de investigación deben continuar.
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Como los juegos anteriores de Swery, The Good Life es característicamente absurdo y un tanto desordenado. Se puede clasificar en términos generales como un simulador de la vida diaria, en la línea de Stardew Valley, pero no como ninguno de ellos. Cuenta además con una mecánica de fotografía en la que debes fotografiar cosas interesantes y personas de la ciudad para conseguir recompensas en efectivo.
Apartado técnico
The Good Life tiene mucho por contar, es un mundo lleno de personajes característicos y situaciones extrañas. En todo momento encontrarás algo para hacer, además de la línea principal del juego (descifrar el secreto), hay misiones de búsqueda, muchas misiones de búsqueda, misiones secundarias, distracciones, carreras de ovejas y cacerías misteriosas todo ello enclavado en el mundo abierto de Rainy Wood. De hecho, hay tantos acontecimientos que a veces puede ser agotador seguirle el ritmo.
Sin embargo, para ser un juego que tiene todos estos elementos de mundo abierto, se siente deliberadamente limitado por muros que obligan a Naomi a tomar los largos caminos de un lugar a otro. Puedes saltar muros transformada en gato, pero el gato no puede superar todos los tipos de paredes. Y cuando te transformas en perro debes transformarte de nuevo en Naomi antes de poder transformarte en un gato.
Hay algunas paredes que el perro tampoco puede saltar, por lo que si quieres atravesar un campo en particular, deberas transformarte en Naomi y luego transformarte en el gato con un poco de espera entre cada transformación. Sin contar que hay una barra de resistencia que necesita un período de enfriamiento.
Por lo que en muchas ocasiones simplemente moverte por la ciudad parece tortuoso, si en la misiones tienes que buscar elementos, ir de un lugar a otro corriendo cuidando no cansarte tan rápido para no tener que ir a casa a dormir, se puede volver repetitivo y agotador y muchas veces puede terminar en que pierdas el hilo de la misión que llevabas. Se siente como si el juego te castigara por intentar superar las misiones principales a tu propio ritmo.
En general el diseño artístico es lindo y los diseños de personajes son divertidos, pero es importante aclarar que este juego no viene en español, todos sus textos son en inglés, por lo que si no tu inglés no es muy bueno en ocaciones será difícil entender las indicaciones de las misiones y los diálogos que Naomi tiene con los habitantes de Rainy Woods, lo que claro a la larga será un problema si quieres descubrir el secreto que encierra la ciudad.
En cuanto a su narrativa The Good Life tiene un tono constantemente extraño, el universo creado de misterio en la juego está muy bien desarrollado. Los personajes parece olvidarse de las cosas, la ciudad en muchas ocaciones es bastante silenciosa, y cada interacción entre personajes comprende una reunión de oraciones extrañas.
Jugabilidad
Por supuesto, al ser una fotoperiodista lo primero que te explican en el juego es cómo ganarte la vida con tus fotografías. Debes subir fotografías de Rainy Woods a un sitio llamado Flamigo, por cada «me gusta» que consigas obtendrás 1 penique y con este dinero ayudarás a restar tu deuda. Obtienes más «me gusta» si sigues los «Hotwords», que serían como los hashtags en Instagram. Sin embargo, Flamingo tiene un limite de publicaciones, por lo que con le tiempo, deberás ir eliminando las fotografías menos populares para cargar nuevas.
Aunque una parte del juego depende de la fotografía el sistema para tomar fotografías es bastante sencillo. Ten dan bonus si organizas el cuadro, pero más allá de eso nada. No puedes ajustar el foco, ni el diafragma, ni la velocidad de obturación, ni mecánicas de edición. Las personas y animales se mueven rápidamente de un lugar a otro, pero una vez los alcanzas fotografiarlos no es un gran reto.
Una vez avanzas en el juego te envían una nueva cámara, que te permite tomar fotografías a color y podrás escoger con cuál cámara tomar tus fotografías. Además, por email tus empleadores te enviarán misiones, personas específicas a las que debes fotografiar e investigar. Las encontrarás en la ciudad de manera sencilla, a todos lo personajes les aparece su nombre.
También podrás hacer uso de tus habilidades de transformación en animal. Como gato podrás trepar paredes, saltar y caminar por los tejados. Como perro podrás seguir con tu olfato olores y orinar para marcar el camino. A diferencia de los habitantes de Rainy Woods, Naomi puede transformarse en cualquiera de los dos animales en el momento que desee. Por lo que puedes convertirte en un perro para moverte más rápido o en un gato para atrapar animales pequeños cuando lo necesites. Con lo que atrapas puedes realizar brebajes que son elaborados por la bruja del pueblo.
Por otra parte, está todo lo relacionado con la simulación de la vida cotidiana. Hay indicadores como el hambre, el cansancio, la resistencia y un indicador de carisma, Naomi tendrá que ducharse, cocinar, comprar cosas o conseguir materiales y cuidar lo que ha cultivado. Y la poca atención a cualquiera de estos medidores puede empeorar la experiencia general.
Además, solo una misión puede estar activa cuando estas jugando, lo que hace que todas las demás misiones sean invisibles en el mundo. Entonces, si durante una misión te encuentras accidentalmente con un personaje o un elemento que es importante para otra cosa que accediste a hacer, te lo perderás por completo.
Duración
En The Good Life hay tres rutas de historia para investigar el secreto y, como puedes abordarlas en cualquier orden, no se hacen referencia entre sí. Hay al menos un clímax para aquellos que están completamente comprometidos y aquellos que quieren sumergirse por completo en su misterio de búsqueda principal mientras se enfrentan a los elementos de simulación de vida.
No es un juego para terminar en una sola sentada, debes tener en cuenta los factores de paso del tiempo en el juego y decidir que tanto involucrarte o no en las misiones que no están aparentemente ligadas a la trama principal. Pero si estás dispuesto a descifrar los secretos, referencias y situaciones absurdas que esconde The Good Life podrías acabar el juego en 4 a 6 horas aproximadamente.
Conclusión
The Good Life es un juego caótico, para bien o para mal encuentras tantos elementos que puede ser abrumador seguirle el ritmo. Si estás buscando un juego ligero y que no te haga preguntas, este no es la mejor opción. De hecho, lo mejor que puedes hacer con The Good Life es dejarte arrastrar.
No es un juego que destaque por su apartado técnico y jugabilidad, de hecho Naomi se siente torpe la mayoría del tiempo y moverse por la ciudad es aburridor, pero su historia es tan absurda que termina siendo lo más valorable en Rainy Wood. Si te animas, The Good Life está actualmente disponible con Xbox Game Pass.
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Apartado técnico65/100
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Jugabilidad55/100
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Duración55/100
Lo bueno
- Situaciones absurdas
- Personajes únicos
- Referencias divertidas
Lo malo
- Idioma únicamente en inglés
- Moverse en la ciudad es agotador
- Movimientos de Naomi torpes