Análisis de Trepang2 – Una lluvia de balas llega a tu Xbox

Analizamos un FPS de acción frenética que puede ser una alternativa para los que esperan con ansias un remake de F.E.A.R.

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Si creciste con los shooters pos año 2000 es muy posible que encuentres en Trepang2 un digno homenaje a varios de los grandes nombres de aquella época, incluso en su historia, un tanto trillada pero que pronto se disuelve en las constantes balaceras que el título propone. En esta entrega, el jugador se pone en la piel del misterioso Sujeto 106, un soldado genéticamente alterado cuya historia es una incógnita y que se suma a las filas de la Task Force 27, una entidad paramilitar secreta que tiene el objetivo de detener a la Horizon Corporation, una especie de Umbrella de este mundo que lleva a cabo extraños experimentos con el fin de mejorar a la humanidad.

Esto coctel tantas veces visto se convierte en un juego de acción frenética con disparos, explosiones, un dejo de furtividad y violencia excesiva, de esa que a todos nos gusta por demás. A lo largo de estas líneas, mi intención es contarte un poco más sobre qué puedes esperar de un juego que puede ser una opción para muchos amantes del género que ya se han pasado más de una vez los títulos tradicionales y que buscan material fresco.

Carga tu arma y acompáñame, nos vamos a recorrer el mundo.

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Apartado técnico

Gráficamente el juego se luce cuando quiere, un punto que me parece vale la pena desarrollar. Los efectos de la sangre, los chispazos y los daños al escenario se ven extremadamente bien, lo cuál es algo muy destacable para un título que no tuvo el mismo presupuesto que otros titanes del género como pueden ser las nuevas versiones de Doom.

En contrapartida, las paletas de colores necesitan mucho trabajo. La mayoría de los escenarios ostentan la gama que bien se podría encontrar en la generación de la Xbox 360 y aunque quizás esto esté bastante disimulado con la constante acción del juego, se aprecia y es un punto bastante en contra, como lo es la iluminación.

Este aspecto en particular es de lo más flojo que le encontré al título ya que afecta directamente a la experiencia jugable. Trepang2 juega constantemente con las luces y las sombras para hacer que el jugador utilice las zonas más oscuras para camuflarse y tener algunos momentos de pseudo sigilo pero aunque esto puede llegar a funcionar de forma estable en algunos momentos, cuando la acción en pantalla es trepidante, muchas veces no se entiende a qué se le está disparando, de dónde vienen los ataques o cómo proceder, lo cual se vuelve bastante frustrante, y lo peor es que esto sucede regularmente en distintos escenarios.

Un punto positivo, además del daño que ya se mencionó, es que los cadáveres de los enemigos no desaparecen, lo que brinda otra sensación de realismo e inmersión y esto no afecta o ralentiza la partida, que mantiene una tasa de frames estable a pesar de tener una gran cantidad de enemigos en pantalla, a veces más de 30, incluso en la Xbox Series S que fue en donde realicé este análisis.

Dentro de esta categoría también me gustaría incluir que el juego no posee una animación de muerte como es común en estos caso, es decir, cuando la energía se agota, el título simplemente muestra una cinemática de una explosión nuclear con el menú de opciones listo para reintentar, algo que no tiene nada de sentido al comienzo del título y que corta con la atmósfera de manera tajante.

A nivel sonoro, el juego cumple sin resaltar con distintas melodías varían de acuerdo a la acción en pantalla, aumentando el ritmo durante los conflictos armados y disminuyéndolo durante las etapas más tranquilas o en medio de los ataques de olas de enemigos.

El título se encuentra disponible también en español para quienes quieran seguir la historia sin necesidad de recurrir a la web en caso de no contar con un nivel de inglés elevado.

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Jugabilidad

El juego comienza con el rescate de una base antártica del protagonista y la misión hace las veces de tutorial aunque presenta al título con una base muy marcada en el sigilo, que en las misiones posteriores tiene una relevancia mínima siendo generosos. En esta introducción tenemos la posibilidad de ver las dos mecánicas «distintivas» del juego además de los balazos limpios: el camuflaje y la ralentización. La primera contempla la invisibilidad temporal, algo que muchos asociarán con Crysis, por ejemplo, y la segunda tiene que ver con detener el avance del tiempo de una forma similar a lo que sucedía en Max Payne, aunque desde una perspectiva diferente.

Ambas habilidades dependen de una recarga que se muestra constantemente a ambos lados del punto de mira y son muy necesarias para el desarrollo de las misiones, en especial en aquellas que muestran a varios enemigos en pantalla.

El ritmo del juego da mucho lugar a la creatividad con respecto al uso de armas, se pueden utilizar desde armas cortas para distancias reducidas, escopetas, rifles de largo alcance y distintos tipos de explosivos y otros objetos arrojables como cuchillos y hasta hachas. Incluso es factible dispararle a las luces para crear oscuridad y colocar algunas trampas como minas antipersonales.

Lamentablemente el tiempo para hacer todo esto es más que reducido ya que los enemigos se agolpan constantemente y el descanso entre las olas es escaso, lo cual desperdicia un poco el potencial que tenía originalmente toda la versatilidad al momento de acabar con los enemigos.

Las armas se pueden personalizar desde algunos puntos en medio de la partida con partes que se irán recolectando en algunos lugares de los escenarios e incluso, más o menos a partir de la mitad de la campaña, mediante el uso de un fluido será posible utilizar dos armas al mismo tiempo, una función que quizás hubiese sido interesante que estuviese desde un comienzo.

El diseño de los niveles es interesante por las dimensiones que tienen, aunque a menudo muchas de las secciones no tienen absolutamente nada y caen en el desaprovechamiento. 

El título quiere en todo momento jugar con el factor paranormal como lo sabía hacer F.E.A.R pero carece de un antagonista como lo era Alma Wade, de esta forma no se define entre el terror paranormal y una ciencia ficción tradicional lo que afecta directamente a los enemigos del título que se definen, por un lado, entre soldados tradicionales, algunos especialistas con armaduras diferentes al que solo los afectan los disparos en la cabeza. Por otro lado, también se hacen presentes monstruos y otras deformidades cuyos ataques son bastante pobres y si no fuese por la cantidad de individuos en simultaneo, serían bastante sencillos de derrotar incluso en los niveles más difíciles.

Entre las misiones, el jugador puede pasar bastante tiempo en la base de la Task Force 27, un HUB que permite personalizar la apariencia de las armas y del propio personaje principal, cambiar el armamento y hasta entrenar en diversos simuladores de combate con diferentes escenarios y enemigos. Desde esta base, el jugador podrá seleccionar las misiones a elección utilizando un mapa.

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Duración

El juego consta de seis misiones principales y seis misiones secundarias, bastante repetitivas a mi entender, que hacen que la aventura dure entre 6 y 10 horas totales dependiendo de la elección del jugador con respecto a los caminos a tomar y si decide o no hacer las misiones alternativas.

En cuanto a la rejugabilidad, se puede extender la experiencia volviendo a las misiones ya pasadas pero en una dificultad más elevada con jefes más difíciles, de hecho, algunos solo aparecen en dificultades avanzadas cuya recompensas por culminación incluyen códigos secretos para crear enemigos cabezones, tener munición infinita y otros detalles. 

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Conclusión

El título de Trepang Studios tiene la posibilidad de acaparar a ese público huérfano de historias simples y cargadas de acción que parecen casi exclusivos de otra era. Trepang2 lleva un nombre que quizás no llame la atención, pero es innegable que a muchos jugadores los cautivará con su propuesta nostálgica de FPS de los 2000 y su fórmula de acción constante a pesar de algunas fallas bastante visibles.