Análisis de The Gardens Between

En The Gardens Between dos amigos de la infancia nos permiten pasar por sus tiernos recuerdos de una manera muy especial. Un título de puzzles diferente.

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Hay veces que los amigos lo significan todo para nosotros. Las acciones, las travesuras, los recuerdos que tenemos con ellos conforman una relación en nuestros corazones que resulta difícil de olvidar. De pequeños es incluso más intenso, ya que fuera de las preocupaciones habituales que sufrimos desde hace tiempo lo más longevos del lugar, de lo único que nos teníamos que encargar era básicamente de una cosa: Pasárnoslo bien en todo momento.

Y prácticamente de eso va este nuevo título del estudio The Voxel Agents, The Gardens Between. Los amigos que hacemos y las relaciones que construimos dan lugar a escenarios y recuerdos en nuestras cabezas que recordaremos de una manera muy especial, como es el caso de nuestros protagonistas, Arina y Frendt, que nos narrarán en forma de rompecabezas temporal todas sus vivencias más importantes juntos.

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The Gardens Between nos muestra desde una perspectiva alejada y totalmente en 3D una aventura-puzzle que desde el primer minuto nos encandilará no sólo por su bella estética si no también por lo curioso de su manejo, ya que en realidad no podremos controlar directamente nunca los personajes, si no avanzar y rebobinar en el tiempo mientras vemos como interactúan con ciertos objetos para llegar hasta el final de cada fase.

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Apartado técnico

Aunque en los últimos años van proliferando este tipo de títulos preciosistas, nunca dejan de sorprendernos los desarrolladores con estampas dignas de un cuadro o diseños imposibles que hasta que no nos paramos a pensarlo no caemos en la cuenta de lo complicado que resulta hacerlo. A caballo entre un dibujo animado y una especie de sueño de acuarela es donde se encuentra The Gardens Between, que cuenta con una estética muy agradable a la vista.

Hablando de números, el título parece moverse en Xbox One X mejorado con respecto a Xbox One S, aunque en ambas el juego funciona de forma genial a 30 fps estables. No obstante, la aventura no es que requiera tampoco un maquinón, de hecho su lanzamiento simultáneo en IOS lo podría corroborar, pero no esta de más dejarlo reseñado.

En toda esta ecuación es esencial prestar atención a la música y a los efectos de sonido, que ponen la guinda al pastel para otorgarle la magia necesaria al título. Entra por la vista, entra por los oídos y también entra por las manos, ya que es muy fácil de controlar. Por supuesto, lo tendremos traducido al español y encima ya está disponible en Xbox Game Pass, así que dos minipuntos más para The Voxel Agents.

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Jugabilidad

Viendo las capturas quizá no se percibe bien como se juega a The Gardens Between, ya que como hemos dicho más arriba, los personajes no se controlan directamente si no que se tratará como una especie de película interactiva en la que nos movernos hacia delante o hacia atrás con el stick analógico.

En principio y en las primeras fases, podría parecer que es todo muy simple y que como van a inventar más escenarios que te compliquen la tarea para llevar encendido el farol que porta la protagonista hasta el altar, pero pronto recurren al compañero y a elementos «vivos» dentro de estos recuerdos interactivos para poder conseguir nuestro objetivo.

Recorreremos una serie de vivencias de ambos, como la una partida a la consola mientras comen snacks, la vez que se le cayó una sudadera a la alcantarilla, cuando se mojaron mientras regaban con la manguera y entre escenario y escenario nos iremos moviendo en una especie de barca que tiene la forma de la casa del árbol que comparten precisamente en lo que da el título al juego: El jardín de en medio entre las casas de ambos.

Quizá una vez le cogemos el tranquillo, podemos pasar algunas fases más rápidas de lo habitual, pero también se nos ha dado el caso de no ver la solución para continuar, que se escondía a simple vista delante nuestra. Es un juego que usa mucho recurso visual, sonoro e incluso de sus físicas de una manera relativamente simple para conformar esos complejos puzzles que se resuelven solo moviéndonos en el tiempo.

Y es que el impacto de las acciones de nuestros personajes al pasar por determinadas situaciones tendrán consecuencias en el escenario, pero habrá algunos elementos que se moverán solo mientras Frendt los manipula con accionadores que permitirán saltarse las reglas del tiempo a nuestra conveniencia. Habrá ocasiones en las que varias de estas fases conformarán un solo fragmento de recuerdo, en el que siempre veremos interactuar a los protagonistas.

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Duración

Hasta ahora era todo maravilloso, pero The Gardens Between tiene un pequeño gran problema y no es otro que el de su duración. Es extremadamente corto y si eres un lumbreras, te lo podrás pasar incluso en menos de hora y media. En nuestro caso, hemos tardado casi el doble, 3 horas, pero está poco justificado teniendo en cuenta que no hay más contenido disponible.

La parte buena de esto, es que es uno de los mejores títulos del Xbox Game Pass donde obtener los 1000G de manera extremadamente sencilla. Prácticamente con sólo avanzar y en cada historieta estar pendientes de los elementos que vibran que nos darán 80G cada uno, podremos obtener esta querida cifra ideal para los cazalogros.

Conclusión

Aunque es un juego muy bello, disfrutable y bien hecho, The Gardens Between nos durará dos ratos. Una sesión entera si nos pilla con tiempo, quizá. Y eso le perjudica seriamente si nos tuviéramos que pensar en adquirirlo. Pero por suerte, tenemos Xbox Game Pass y su inclusión en el servicio desde el día uno, lo que nos obliga a recomendaros encarecidamente que le echéis un vistazo.

Eso sí, si queréis confiar en mi criterio, los 1000G fáciles de conseguir es su mayor baza para gastar nuestro tiempo en el juego, porque con respecto a acción, ser trepidante o incluso emocionante, no lo es en absoluto y los recuerdos que conforman cada fase que deberían de contener algo de sentimiento, carecen de él al no hacer un énfasis especial en que el jugador se interese o porque las propias situaciones son eventos triviales de dos niños divirtiéndose el uno con el otro.