Análisis de The Big Con

The Big Con es un juego de aventura que vive a través de la nostalgia de los noventa.

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The Big Con es un un juego de aventura desarrollado por Mighty Yell y publicado por Skybound Games. En él asumes el papel de Ali, una adolescente que intenta salvar la tienda de videos de su madre después de que unos prestamistas le cobran una alta suma de dinero. Para lograr recaudar el dinero necesario Ali decide engañar a su madre y emprender un viaje por carretera junto con un joven estafador. Durante el viaje Ali deberá robar carteras, estafar personas y disfrazarse.

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The Big Con es un juego que vive a través de la nostalgia de los noventa. Si creciste en esa década sin duda reconocerás los elementos y las referencias que el juego te da, Furbys, películas de slasher en VHS, Seinfeld y mucho más.

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Apartado técnico

La historia que narra The Big Con es divertida y efectiva, tiene como base todos los elementos que te evocarán la nostalgia por todo aquello que viviste en los noventa, sobre todo si igual que Alí fuiste un adolescente que vivía según lo que pasaba en las películas del momento. Las referencias que hace para nombrar elementos de la cultura pop de los noventas son muy ingeniosos, sin ningún problema podrás reconocer de qué están hablando, que es lo que más se está vendiendo en el momento o por qué el Stan Up Comedy es el futuro.

Y aunque precisamente que The Big Con sea fiel a la narrativa de los noventa hace que la historia se torne un poco predecible, esto no se presenta como un problema, por lo contrario, esa sensación de familiaridad es la que termina por completar la nostalgia por la cultura pop de la época.

Los personajes que se presentan al inicio del juego son congruentes con ellos mismos, lo que le aporta más naturalidad a la narrativa, la mayoría de los personajes de The Big Con encajarían fácilmente en un episodio de Doug o Rugrats. En personalidad, los personajes que te encuentras a lo largo del viaje son igualmente caricaturescos, con deseos simples que Ali puede ayudar a cumplir.

Visualmente The Big Con destaca, los gráficos son dibujados a mano, están llenos de color, y el diseño de los escenarios como el de los personajes con su estilo evocan fielmente la década de los noventa. Por supuesto, todo este sentimiento visual de aquella época es complementado con los elementos con los que Ali interactúa, los diálogos y la trama en si misma.

Musicalmente el juego presenta diferentes variaciones de un mismo tema, estas variaciones resaltarán las particulares de cada lugar en el que escuchas la canción. Puedes escuchar una melodía mientras caminas y luego esa misma melodía pero en un versión rock en un café, o simplemente escuchar todo un arreglo diferente de la misma canción en una tienda o en la recepción de un hotel.

Jugabilidad

The Big Con se centra en robar, encontrar objetos, vender y estafar. Desde que conocemos al joven estafador, Ted, aprendemos como robar fácilmente dinero de los bolsillo de las personas que nos cruzamos, solo debemos soltar un botón en el momento indicado. Robar de los bolsillos nos sirve para avanzar más rápido de un lugar a otro, la progresión está ligada a alcanzar una cantidad determinada en dólares, y es necesario el robar carteras para lograrlo.

Si fallas robando y te atrapan, puedes disfrazarte para intentar robar a la misma persona nuevamente. Solo pueden atraparte robando tres veces distintas, si te atrapan disfrazado o no, tu castigo es rebobinar las cintas VHS, una tarea que Ali detesta. Esta es un tarea bastante fácil, simplemente mantienes presionado un botón y Ali cambia las cintas y presiona el botón de rebobinado.

También tienes la opción de eliminar el robar carteras, y aun cuando elimines está opción el juego te presenta otras formas de conseguir dinero. En cada nivel, debes ganar una cierta cantidad de dinero antes de poder avanzar y puedes ganar dinero vendiendo productos que antes has robado o encontrando objetos temáticos que luego vendes a un prestamista que tiene una tienda en cada parada de tu viaje.

Por lo general los productos que busca el prestamista están en la basura o simplemente tirados por el piso, y lo que te pagará por cada producto es significativamente mucho más alto que lo que consigues solamente robando carteras. Y para vender algún objeto robado a alguien debes antes haber prestado atención a sus conversaciones para así saber con precisión que necesita y que tanto podría pagar por ello.

Escuchar las conversaciones de los demás es otras de las mecánicas del juego y es una de las características necesarias de un buen ladrón. Sin embargo, no puedes escuchar las conversaciones de todos, el juego te indicará a quienes puedes acercarte. La información que obtienes queda registrada en el cuaderno de Ali, allí anota ella cada cosa, es decir cada misión. Muchas veces necesitarás de esa información para saber quién tiene la tarjeta que te permitirá seguir avanzando en el tren o a quién puedes vender por buen precio el Furby que encontraste.

Casi todos los niveles también tienen un PIN o candado con un código numérico, de una maleta o una caja fuerte, y la combinación está oculta en algún lugar del escenario. El desafío de encontrar los códigos es un buen incentivo para explorar los escenarios, usualmente no solo encontrarías algo que robar sino también personajes con los que tener una conversación interesante.

Una vez lograbas reunir el dinero necesario para avanzar, podías continuar explorando el área o decirle a Ted que es hora de seguir adelante. En general, las misiones de en sí mismas no son nada del otro mundo, funcionan como un incentivo para ver más de cada nivel, pero luego de varios robos terminan por volverse repetitivas.

Duración

The Big Con puede terminarse en 3 a 5 horas aproximadamente. Si estás dispuesto a invertir ese tiempo recordando los noventa es una buena elección, tienes la opción de avanzar rápido o tomarte más tiempo para explorar, encontrar más dinero, personajes interesantes y en general completar las misiones secundarias.

Conclusión

The Big Con se trata de su historia y la nostalgia de una época que ya no es. Es un agradable viaje por carretera, donde las cintas de casete aún deben rebobinarse, MTV todavía reproduce videos musicales y las riñoneras están de moda. Alí es una típica adolescente que a la larga resulta entrañable, el toque de familiaridad que rodea a toda la historia funciona muy bien y visualmente el juego tiene un estilo muy agradable.

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El único problema destacable que le encuentro a The Big Con es que luego de tanto robos y sin un cambio significativo en su forma de robar, se vuelve bastante repetitivo. Sin embargo, la creatividad y solidez en el universo del juego hacen que sea un experiencia que vale la pena.