Os traemos nuestro análisis de Ride 3, el nuevo simulador de carreras de motos de Milestone, que cierra 2018 con este quinto título
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Es hora de enfundarnos el traje de carreras y el casco, toca volver al asfalto sobre dos ruedas. El quinto juego del año de Milestone ya está entre nosotros: Ride 3. Tras lanzar al mercado Monster Energy Supercross, Gravel, MotoGP 18 y MXGP Pro, la desarrolladora nos trae un nuevo juego de motos, terreno donde se sienten más cómodos.
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La principal diferencia que encontramos entre Ride 3 con respecto a los demás títulos de esta índole es el amor por las vehículos de dos ruedas. Este nuevo juego es una auténtica enciclopedia del motociclismo y cualquiera que se arrime a él tendrá a su disposición toneladas de información sobre motos, cilindrada, tipos de ruedas, marcas, motores, etc. Una auténtica maravilla. Además, los tiempos de carga cuentan con fichas enciclopédicas, lo que las hará más amena y muy instructivas.
Ride 3 cuenta con diversas mejoras respecto a la última entrega de la franquicia, que data ya de 2016. Entre ellas se encuentran un nuevo motor gráfico, una interfaz más limpia e intuitiva y más de 200 motos licenciadas de 30 fabricantes reconocidos a nivel mundial. Y sí, podremos tener un hangar de aviones como garaje de todas las motos que consigamos.
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Apartado Técnico
En Ride 3 se nota el cambio de motor gráfico. Pasamos de un Ride 2 (2016) que aún usaba el motor propio de Milestone a una tercera entrega que hace uso del Unreal Engine 4 y se nota. Sobre todo a la hora de representar las motos. Todas y cada una de las 230 licenciadas (más las que llegarán vía DLC) están recreadas a la perfección, hasta el mínimo detalle.
Sin embargo, fuera de eso el juego no destaca demasiado. Las texturas de los circuitos como el público o los árboles de fondo no se notan realistas y se ven muy planos. Prácticamente no parecen de este generación, donde hemos visto verdaderas obras de arte en juegos de conducción. Ese es el gran hándicap en el apartado visual de Ride 3.
Pero además de los vehículos, un juego de conducción se distingue por sus circuitos. Y en Ride 3 tenemos más de 30 a nuestra disposición, tanto en el modo carrera como en el resto de opciones. La gran mayoría de ellos han sido recreados desde cero y tienen un gran acabado. Aunque eso sí, hay algunos a los que se le nota que son reciclados de otras sagas de la compañía, como Moto GP 18. Al final y al cabo, sacar 5 juegos al año tiene su precio.
En cuanto al aspecto sonoro, este es bastante bueno. Sobre todo en cuanto al ruido de motor de las motos. Cada uno es diferente y está perfectamente logrado en cada una, dando una entidad y una recreación perfecta de cada modelo. Eso sí, que el ruido del motor y de las ruedas sea el único sonido que escuchemos durante las carreras se le puede hacer pesado a más de uno. Pero rugidos de motor aparte, la BSO de los menús y del modo carrera es más que correcta. Y, a pesar de no ser licenciada, tiene reminiscencias del pop y de la electrónica que no desentonan para nada.
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Jugabilidad
El principal atractivo de Ride 3 es su jugabilidad. Una que no es sencilla y pondrá en problemas a los neonatos en este tipo de juegos de conducción. Los controles son complicados y aquellos que se enfrenten por primera vez se verán en problemas. Y termina por desesperar, por que nos caeremos una y otra vez de la moto, mientras que quedaremos últimos reiteradamente con varios segundos de diferencia.
Pero que sea complicada no quiere decir que no sea agradecida. Al final, una vez que se le coge el truco y se domina la moto (o motos) es un juego bastante agradecido. Los veteranos en este tipo de juegos se encontrarán con un sistema bastante completo, mientras que los demás una vez superada las primeras fases de frustración irán viendo como a poco mejoran y al final son ellos los que llevan la moto y no al revés.
Pero para poder dar este paso de forma segura, Ride 3 presenta una curva de aprendizaje muy buena. Las primeras dos o tres horas del juego serán una montaña rusa de emociones. Nos saldremos de la calzada, nos caeremos de la moto una y otra vez y nos estrellaremos contra los muros mientras aprendemos a dominar los controles. Pero una vez superado esos momentos, empezamos a disfrutar de verdad del juego. La dificultad se va ajustando automáticamente según vayamos avanzando en la campaña. Cada vez que entremos en un nuevo nivel, sentiremos la competición de verdad: una IA más inteligente y más dura de tira, algo que se agradece para que no se vayan al suelo al mínimo impacto.
Otro factor que influirá en nuestra conducción serán las condiciones atmosféricas. Aunque en Ride 3 no hay ciclos de día o noche y no hay cambios atmosféricos durante una carrera, si que realizaremos diferentes competiciones bajo la luz de la luna o bajo una intensa tormenta. Bajo estas condiciones la situación de la carrera cambiará, teniendo una peor visibilidad en la noche o poniendo más ojo en que nuestra moto no derrape con el agua acumulada en la pista. Además, cuando pasemos sobre balsas de agua esta salpicará y se manchará la cámara, dando una peor visibilidad y otorgando al juego de un gran realismo.
Duración
Cómo siempre comentamos, dar una estimación en horas de un juego deportivo (del sub-género que sea) es complicado y muy subjetivo. Ride 3 no es la excepción. En esta ocasión, cómo suele ser habitual en los juegos de Milestone, todo se articula en relación al Modo Carrera, donde nuestro hangar o garaje hará las veces de HUB entre modos de juego y opciones.
Si en el apartado técnico comentábamos que Ride 3 reciclaba varios circuitos de Moto GP, en el modo carrera toma prestadas ideas y opciones de Gravel. Sobre todo en el sistema de progresión: podremos conseguir hasta 3 estrellas en cada una de las carreras dependiendo en la posición que quedemos. Eso sí, no hay más objetivos que esos, haciendo que la rejugabilidad sea solo por el mero placer de volver a correr en determinadas condiciones.
Pero por lo que destaca este modo carrera es por la manera de presentar “su historia”. Esta sigue una estructura poco vista en el género: la edición de una revista, donde cada volumen está dedicado a un tema en concreto: un circuito, un tipo de moto o un fabricante especial. En cada uno de estos volúmenes tendremos unos 5 circuitos donde competir con una moto especial, que deberemos conseguir previamente pagando su precio. Pero esto no es un problema, ya que al finalizar cada carrera obtendremos una recompensa monetaria, independientemente del puesto que finalicemos. Aunque, obviamente, cuanto más cerca del podio quedemos, mejor. Y es digno de mencionar que al comenzar nuestra historia podremos elegir una mota entre 3 disponibles y con 10.000 monedas en el banco, más que suficiente para comprar una segunda.
Dentro del modo campaña, y como parte de esa articulación entorno a él, encontramos un completo editor de motos, que nos hará pasar horas y horas editando nuestro modelo favorito. Tenemos a nuestra disposición dos editores: uno de decoraciones, donde podemos elegir el color de fondo, vinilos en 2D, efectos de pintura, etc, y un segundo editor mecánico, enfocado a mejorar o cambiar diversas piezas de nuestra compañera, como los frenos o los neumáticos.
Pero además de este modo central, no encontramos una gran variedad de modos. De hecho, salvo el recién añadido Retos Semanales que llega con el parche Day One, sólo tenemos otro modo de juego: Carreras Rápidas. Es cierto que dentro de este podremos elegir entre varias opciones: Carrera Rápida, Contrareloj y Aceleración. En el primero de ellos elegiremos una moto de entre nuestra colección, un circuito y saldremos a correr, bien contra la IA bien contra otros jugadores vía Online. Y aquí viene uno de los grandes hándicaps del juego: no hay multijugador local en la misma consola, una función que le habría dado un buen plus a Ride 3, dejando su vertiente competitiva reservada sólo al online.
En Contrareloj competiremos contra nosotros mismos por batir nuestro mejor récord en un circuito. Por su parte, Aceleración es un modo que nos trae viejos y buenos recuerdos. En este modo jugaremos carreras cortas basadas en una larga recta donde lo necesario y fundamental será cambiar de marcha en el momento justo. Así, este modo nos ha recordado mucho a las pruebas de los Need For Speed, en especial del Underground 2, juego que llevó a la excelencia este tipo de pruebas. Y Ride 3 consigue recuperar esa esencia y llevarla a las motos.
Respecto a los Retos Semanales que comentábamos, estos son otra importación de Gravel. Aquí nos encontraremos con pruebas específicas en las que tendremos que superar o batir una marca en especial con una mota específica. Estos retos aparecen una vez a la semana y son ideales para poder probar modelos o categorías a los que todavía no hayamos accedido.
Conclusión
Milestone hace bueno el dicho de “quién mucho abarca, poco aprieta”. Es una compañía que, a pesar de contar con un equipo de desarrollopequeño, se ha decantado por un modelo multi-título. Es decir, desarrollar más de un juego a la vez y lanzarlos en poco espacio de tiempo. Como comentábamos al principio de este análisis, Ride 3 es el quinto proyecto de la desarrolladora italiana, algo que se nota en algunos puntos, como el reciclado de algunos circuitos de MotoGP 18. De este modo, al final todos los juegos dan menos de lo que podrían ofrecer, quedándose en tierra de nadie.
Esto no quiere decir ni mucho menos que Ride 3 sea un mal juego. Al revés, es un juego decente, con unas ideas muy buenas y un planteamiento diferente del modo campaña. Además, cuenta con una buena jugabilidad, desafiante con novatos, pero inmersiva una vez aprendidas las mecánicas. Pero le falta ese punto para terminar destacando.
Sobre todo acusa la fatiga en el aspecto gráfico. Una acabado visual en el primer plano, es decir, en las motos, pero justito en lo demás. Sobre todo en el público y en los elementos decorativos de los circuitos, que se quedan cortos para los estándares actuales de los juegos de conducción.
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En definitiva, Ride 3 es un buen juego que encantará a los amantes de las motos y de las competiciones sobre dos ruedas y que pueden disfrutar aquellos que se arrimen por primera vez a un título de estas condiciones.
*Gracias a Bandai Namco por habernos proporcionado el material para la review.