Análisis de Enchanted Portals – Un homenaje desperdiciado

Análisis de Enchanted Portals un juego que pretendía rendir homenaje a Cuphead, tristemente se queda a medio camino y puede ser muy frustrante para el jugador.

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Existen muchos estudios que se inspiran en otros juegos, esto no es nada nuevo ni es una práctica que se esté realizando desde hace pocos años. Es una realidad que no es pasajera, tampoco es algo que deberíamos juzgar, ya que gracias a esto han visto la luz muchas obras increíbles.

En esta ocasión, un nuevo estudio español se aventura con su propio juego, nos referimos a Xixo Games Studio, que de manera literal ha optado por rendir homenaje de cierta manera a uno de los grandes juegos que han salido en estos años, el inigualable Cuphead.

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Aunque cuando se dio el anuncio del juego, fue duramente criticado y lapidado, tachándolo de una copia que pretendía explotar el éxito de los hermanos cabeza de taza. Sin embargo, el juego finalmente llegó a nosotros y hoy te contamos nuestra experiencia con él.

Apartado Técnico

Hay juegos que impactan a primera vista, Enchanted Portals es uno de ellos. No está mal que sea así; lo importante es que este aspecto visual y artístico esté respaldado en su totalidad, para poder obtener un juego completo y divertido.

El juego presenta personajes principales bastante peculiares y cómicos. Con su colorido y animaciones, en algunos casos, adecuadas, se nota que llamar la atención era uno de los objetivos de sus responsables, y lo lograron con éxito.

Sin embargo, a pesar de lo llamativo que es el juego, este es el único aspecto que permanecerá en los pensamientos del jugador, debido a que posee una serie de problemas que afectan por completo lo que tiene para ofrecer.

Al menos en la versión de Xbox, al iniciar la historia, vemos un vídeo que debería introducir al jugador en los acontecimientos que desembocan en el inicio de la partida. Sin embargo, en un punto de esta introducción, el vídeo se corta de forma abrupta y sin sentido, dando inicio al juego. Al investigar al respecto, esto no sucede en otras plataformas, donde se pueden ver los sucesos sin problemas.

Al jugar, nos daremos cuenta de ciertos puntos ciegos o muertos, en los que podemos morir repentinamente. Además, en ocasiones, los enemigos al revivir el portal que se genera para llevarnos a otro lugar pueden fallar, y caemos al vacío debido a su imprecisión.

En los enfrentamientos con los jefes, como mencionábamos previamente, también se encuentran estos puntos ciegos, y habrá un sitio en el que no recibiremos daños y podremos atacar sin piedad. Esto no sucede con todos los jefes, pero es un elemento que puede romper el ritmo del juego para aquellos que se dan cuenta de ese detalle.

Hablando de jefes y enemigos, se aprecia que los recursos se destinaron a los combates con los jefes, que están bastante elaborados y bien detallados. Sin embargo, en los niveles normales, la situación es completamente diferente, lo que rompe con el ritmo del juego. Si a esto le añadimos que el juego posee una serie de errores que obstaculizan nuestro progreso, jugar se vuelve tedioso y pierde su encanto rápidamente.

Para finalizar, su banda sonora es minimalista y no destaca en absoluto, quedando en segundo plano y volviéndose completamente innecesaria. En este aspecto técnico, el juego prometía mucho, pero ni siquiera llega a la mitad del camino. Los responsables del título tenían buenas ideas y, desafortunadamente, no lograron plasmarlas correctamente, dejándonos un juego que se siente incompleto.

Jugabilidad

La historia comienza con dos personajes haciendo sus deberes, cuando de pronto por accidente les cae un libro que contiene conjuros y deciden probar por su cuenta uno de los hechizos del mismo. Por azares del destino, abren un portal que los transporta a otro lugar, dando inicio a nuestra aventura en este desconocido y nuevo mundo.

¿Un homenaje o una copia de Cuphead? - ¡Comparte!

Al principio, podremos controlar a nuestro personaje, y durante este primer nivel, nos enseñan lo que corresponde a las acciones más básicas y algunos movimientos. Sin embargo, aquí viene el primer problema del juego. Solo podemos ver representaciones algo ambiguas de lo que debemos hacer, y seguimos nuestra aventura. Al aparecer los primeros enemigos, están rodeados por un cierto color de aura o escudo, que pasa desapercibido rápidamente, pero que será de suma importancia conocer.

Luego de varios intentos fallidos de acabar con las amenazas sin éxito alguno y sin conocer qué debemos hacer, nos dirigimos por curiosidad al menú de opciones y nos damos cuenta de que en la configuración del mando, existen una especie de comandos un poco mejor explicados. Observamos que podemos cambiar el tipo de ataque, contando con hechizos de color rojo, azul y verde (disparo en tres direcciones), y que cada enemigo es vulnerable dependiendo del color del hechizo.

En resumen, de la forma menos amigable, a través del ensayo y error, podemos dar con la clave para avanzar en el nivel (que se generan de forma procedural). Esto ocurre solo al comenzar la primera fase y rompe el ritmo y las ganas de jugar, siendo muy negativo al ser nuestro primer contacto con el juego. En mi caso, al jugar cualquier título, sigo las indicaciones, aprendo lo necesario y comienzo, pero esto se ve poco amigable en tus primeros minutos.

Contamos con una gran variedad de movimientos, desde salto y doble salto, los tres tipos de disparos, una especie de escudo, un dash y la posibilidad de cargar nuestro ataque para hacerlo poderoso. Es decir, un conjunto de mecánicas amplias para avanzar durante la historia, que se siente insípida y no explica los motivos de nuestro recorrido.

Se siente injusto y desbalanceado - ¡Comparte!

La jugabilidad se ve afectada en varias ocasiones, por ejemplo, durante un salto o doble salto, no podemos cambiar el tipo de ataque. Debemos detenernos y cambiar, lo que nos hace perder valiosos segundos que nos llevarán a la muerte. El personaje se siente tosco e impreciso; le faltó pulirlo más. Además, el festín de enemigos en pantalla es desproporcionado y desequilibrado, lo que frustrará a más de uno.

El juego se desarrolla de la siguiente forma: recorremos las fases de un nivel, que en muchas ocasiones se siente monótono y repetitivo, reciclando muchas cosas y alargando el mismo de manera forzada, al no ofrecernos el incentivo necesario para terminarlo. Al concluir todas las fases del nivel, nos encontramos con el jefe final, que nos ofrecerá el mayor reto del juego.

En total, contamos con seis niveles, que se suceden uno tras otro hasta llegar al final del juego. Esto puede sonar corto al mencionarlo, pero la desgracia ocurre al tener secciones del juego injustas y mal diseñadas, en las que morirás rápidamente y sin piedad. Es decir, que la habilidad es un extra, pero no garantizará la victoria en el recorrido. El mal diseño de algunas fases se resiente en nosotros, al vernos imposibilitados para superarlas. El juego se siente bastante injusto y desbalanceado.

Entonces, si tienes la paciencia suficiente para llegar a los jefes, podrás obtener un reto bastante adecuado. Aunque, como en las fases normales, algunos contarán con transformaciones que incrementarán la dificultad. Durante nuestra partida, en un par de ocasiones, en el combate del jefe llegábamos a su última transformación, y él nos mataba, mostrándose la animación de nuestra muerte. Sin embargo, al cabo de dos segundos, resulta que salimos victoriosos y se abre el siguiente nivel.

Dicho todo esto, entre los errores del juego y los problemas de jugabilidad, Enchanted Portals se siente injusto y desproporcionado. El juego debió pasar más tiempo cocinándose, porque quedó a medio cocer y lo que se llega a jugar puede desencantar a los jugadores que tenían grandes expectativas con el juego.

Duración

Entramos en otro aspecto que será duramente criticado del juego. Ya conocemos lo que nos ofrece Enchanted Portals en términos generales, y su duración tampoco estará exenta de polémica. Puedes jugar en compañía, sin embargo, los detalles que posee el juego siempre estarán presentes y acompañados puede ser un total caos.

El título es corto, tanto que lo podremos pasar en alrededor de 2 a 5 horas. Aunque esto pareciera ser algo normal en un juego de estas características, aquí entra un detalle fundamental. Creemos que su duración es muy artificial, es decir, los errores en la partida y las situaciones muy injustas hacen que las muertes sean recurrentes y no se sientan naturales.

La frustración nos acompañará y extenderá nuestra estancia en el juego, pasando de un acercamiento inicial agradable a uno más decepcionante al ver que moriremos por razones con poco sentido, haciendo que no queramos volver a colocar los dedos en el mando.

Conclusión

Es una lástima que las intenciones de Xixo Games Studio con Enchanted Portals se vean opacadas por tantos aspectos negativos en lugar de positivos. Es un homenaje a Cuphead, y la intención está presente, solo que su ejecución no alcanza lo que seguramente deseaban sus responsables.

Un juego plagado de errores, con mucha repetición y poca claridad en su planteamiento, factores que frustrarán a los jugadores por igual, ya sean expertos o novatos, el resultado será el mismo. Aquí lo que realmente te permitirá avanzar será la insistencia y no tus habilidades como jugador.

Es una verdadera lástima, porque el juego, a pesar de todo, luce muy bien, y quizás con un poco más de tiempo y recursos, seguramente se hubiesen podido corregir sus fallos para ofrecernos una mejor experiencia jugable.

*Gracias a Xixo Games Studio por proporcionarnos el material para llevar a cabo este análisis.

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Franklin Eduardo

45/100

Nota final